Una instalación fotovoltaica de Electra Caldense
La eléctrica que sólo usa renovables aparca la energía hidráulica en plena sequía en Cataluña
- Electra Caldense apuesta ahora por la solar para impulsar su crecimiento
- La fuerza del agua es una fuente energética eficiente pero con oposición del territorio
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La eléctrica privada que usa solamente energías limpias ha decidido aparcar las instalaciones hidráulicas en un momento en que Cataluña sufre una aguda sequía. Sin embargo, lo que realmente ha frenado este tipo de proyectos no es la falta de agua, sino la oposición territorial y las barreras burocráticas que se ha encontrado Electra Caldense, que distribuye electricidad producida con fuentes renovables a través de sus filiales.
Una de ellas es Delta Renovables, una empresa creada en los años 80 con el objetivo de promover minicentrales hidroeléctricas, pero que ha decidido apostar por la energía eólica y fotovoltaica, dejando de lado la hidráulica, que se ha visto afectada por la oposición territorial. Lo explica a Crónica Global el consejero delegado del grupo energético "100% verde", Oriol Xalabarder.
Oriol Xalabarder, junto con el logo de ASEME / FOTOMONTAJE (CG)
Del agua al sol
El directivo de la empresa familiar recuerda que la filial Delta "originalmente se llamaba Hidrodelta y fue fundada en los años 80 con la idea de realizar promociones de centrales hidroeléctricas en los Pirineos". Ahora, este proyecto ha recibido un impulso millonario para cambiar la estrategia, ya que el plan hidráulico "tenía alguna posibilidad, pero se fue abandonando debido a la oposición territorial", admite.
La empresa mantiene algunas centrales hidroléctricas operativas como la de Bausen, construida en los años 90, que están establecidas para el suministro. Sin embargo, ya no se centra en la promoción de nuevas instalaciones de este tipo: "A partir del principio de los años 2000, ya no era el momento oportuno para este tipo de proyectos, ya que los ayuntamientos estaban más preocupados por el tema del agua y se complicó más", indica el consejero delegado.
Una instalación fotovoltaica de Electra Caldense
Tres inversores
Por eso, la empresa ha optado por priorizar la energía eólica y fotovoltaica, que considera más adecuadas en el contexto actual de transición energética. "Actualmente, la hidráulica es un buen medio para producir energía, pero ahora la tendencia se dirige más hacia la energía eólica y fotovoltaica", afirma Xalabarder. Para financiar este relanzamiento bajo la nueva estrategia, Delta ha recibido una ampliación de capital de 2,5 millones de euros.
El dinero lo han aportado a partes iguales los tres socios de la compañía: Electra, el organismo público IDAE y la ingeniería de renovables Efener. Se prevé destinar dos millones a la construcción y promoción de nuevas instalaciones renovables, sobre todo fotovoltaicas en azoteas, y se complementarán las aportaciones de los socios con un crowdfunding (micromecenazgo) del 20% y con préstamos de entidades bancarias.
La hidroeléctrica de Bausen, promovida por Delta Renovables
De Caldes a Galicia
Los nuevos proyectos de la firma se enfocan a la producción fotovoltaica, especialmente en pequeños proyectos de hasta cuatro megavatios (Mw), aunque la mayoría tienen una generación distribuida de uno a 1,5 MW. Estos proyectos se ubican principalmente cerca de zonas urbanas, permitiendo el autoconsumo, especialmente en la zona del Vallès -Electra Caldense tiene en Caldes de Montbui su raíz y su bastión de distribución-, pero también en Terra Alta y la Anoia.
Además, la compañía cuenta con algunas participaciones en parques eólicos en Galicia y gestiona la comunidad energética de autoconsumo de El Prat de Llobregat a través de otra de sus filiales, Elecsum Fotovoltaica. También tiene previsto desarrollar su servicio de puntos de carga en centros comerciales o en industria, para los trabajadores que acudan a la planta en coche eléctrico.
