Los 'venture builder' salen reforzados del año del Covid

"El Covid no nos ha afectado para nada", reconoce Rafael García-Escarré, cofundador de 101 Ventures, un spin-off del fondo 101 Startups enfocado al emprendimiento tecnológico. Durante el último año, han levantado tres millones para siete startups distintas en áreas como el 5G y el blockchain. En su portfolio cuentan con Wolorent, The Sampling Solutions, Lets Coder, Networkers y Elefant24. "Hemos generado unos 35 nuevos puestos de trabajo y tenemos previsto crear nueve compañías nuevas en 2021", explica el inversor.

Escudo anticrisis

A diferencia de otras iniciativas, los venture builder acompañan desde cero a los emprendedores con ideas originales de negocio. La creación compartida del producto, tanto a nivel tecnológico como empresarial, limita su exposición a la volatilidad económica. De ahí que la operativa de estos fondos no haya sufrido rasguños por la caída de la demanda y la ocupación experimentada durante 2020.

Otras fuentes corroboran este diagnóstico. Christian Rodríguez, artífice de Mutter, otra fábrica de startups barcelonesa, destaca que muchas de sus soluciones "han experimentado una aceleración por parte del mercado". "Los proyectos que nacen están muy basados en tendencias a punto de explotar y han alcanzado su punto de madurez tras dos años de andadura. Si se le suma el trabajo profesional de los asesores, se generan proyectos sólidos y contundentes", detalla. Mutter recaudó el curso anterior 1,5 millones de euro, cantidad que prevé doblar durante este año para apuntalar empresas como Bulldoc, Cobramus o Groenlandia.

Persona cogiendo una bombilla como símbolo de innovación / UNSPLASH

Actitud dual del mercado

Miguel Vicente, cofundador junto a Gerard Olivé de Antai, matiza que se ha dado una actitud dual en el mercado digital. "Por un lado, gracias a la digitalización a marchas forzadas por el Covid las compañías han aumentado resultados. Aunque el ecosistema local de startups todavía es dependiente de fondos internacionales, y durante unos meses la llegada de capital fue más compleja, también se han hecho más operaciones y de más cantidad en fases iniciales", explica. Vicente también señala que se aproxima un ciclo favorable de inversión debido a que los fondos se encuentran a máximos de liquidez.

Y con ganas de financiar. "En nuestro caso prevemos abrir seis compañías en 2021, cuando nuestra previsión anual es de tres", informa. Durante el año pasado, Antai levantó más de 20 millones en diez rondas distintas para empresas como Nemuru o Singular Cover. "En Antai todos nuestros e-commerce han multiplicado sus ventas por tres, y las empresas de software han entrado en ebitda antes de lo previsto", añade.

Apuestas disruptivas

También los fondos verticales se han beneficiado de la burbuja que rodea al ecosistema. Lo cuenta André Caçador, fundador de Uniq Ventures: "Realizamos un balance positivo de 2020. Como estamos bien financiados, no hemos necesitado recurrir a calls y estamos estados focalizados en nuestros productos".

Esta firma centrada en fintech ha seguido adelante con sus planes gracias al interés creciente por el cruce entre las finanzas y la digitalización. Durante este ejercicio prevén cerrar la integración del proyecto de machine learning Octans con una aseguradora y un banco, además de activar la versión beta de Vesto, una app para inversores novatos. Caçador confirma la impresión general: son buenos tiempos para la capitalización en startups ubicadas al filo de la tecnología.

Proyectos en marcha

Tampoco Carlos Blanco, emprendedor y fundador de Nuclio, ha encajado ningún golpe por el virus. "La pandemia ha provocado incertidumbre en muchos negocios, pero nosotros, aparte de una afectación temporal sobre algunos productos debido a las restricciones, hemos capeado muy bien el Covid-19", asegura.

No solo eso, sino que la venture afronta el año con nuevas metas. Por un lado, la casa de Housfy y Typs prevé lanzar siete startups nuevas --dos centradas en el campo de la educación, otras dos de e-health, una fintech y dos compañías de servicio--, además de abrir en Madrid una gran oficina de 800 metros cuadrados como segundo cuartel general en España. A eso se suma la inauguración de una escuela de talento digital y la incorporación de nuevos rostros al equipo como Ernest Sánchez y Elisabet Martínez. En definitiva, no se podrá argumentar que es mala época para lanzar una startup.