Habla el exmarido de la mujer asesinada en Balaguer: “Tenía moratones y decía que había sido él”
Pablo, que compartió 12 años con la víctima y es padre de una de sus hijas, asegura que ella reconoció a una tercera persona que su actual pareja la había maltratado
24 enero, 2023 00:00"Tuvimos una vida muy dura, llegamos a pedir para comer y a vivir en la calle y discutimos como todas las parejas, pero siempre me preocupé de que estuviese bien. Después, conoció a este tipo, que se la ha cargado en cuatro meses". Este es el desgarrador testimonio de Pablo P., exmarido de Elisabeth G., la mujer asesinada en Balaguer (Lleida), con quien tuvo una relación de 12 años y una hija en común.
El hombre ha explicado a Crónica Global que no da crédito a lo que ha sucedido y que jamás hubiese imaginado este final para la madre de su hija, a quien su última pareja quitó presuntamente la vida, fingiendo después que se trataba de un suicidio.
Una muerte misteriosa
Sucedió el pasado miércoles 18 de enero, cuando Enric Bonastre avisó a los Mossos d'Esquadra alertando de que, al despertar, había encontrado a su pareja muerta, junto a él, en la cama, en el piso que compartían en la calle Noguera Pallaresa, número 22C, de Balaguer. Sin embargo, se trataba de una muerte misteriosa, ya que la víctima tenía un cuchillo clavado en el abdomen.
Según contó su pareja a los agentes, debía tratarse de un suicidio, ya que la mujer le había advertido en varias ocasiones de que algún día se quitaría la vida, y de la forma en que aparentemente lo hizo. El caso es que las primeras inspecciones oculares prácticamente descartaron que se tratase de una muerte voluntaria, ya que las heridas que presentaba el cadáver eran casi incompatibles con un fallecimiento de este tipo.
Una vida difícil
Pablo P. no sabe cómo explicarle a su hija que no volverá a ver a mamá. "Todos los días me pregunta que cuándo bajará del cielo y yo no sé qué más decirle". El hombre asegura estar viviendo una gran pesadilla con la muerte de Elisabeth, una mujer con la que compartió 12 años de su vida y con la atravesó momentos muy duros. "La gente que nos conoce de verdad sabe lo que hemos pasado. Llegamos a vivir en la calle y a pedir para comer, pero jamás le hubiese hecho daño ni a ella ni a mi hija. Después, conoció a este tipo y se la ha cargado en cuatro meses", lamenta.
Según el testimonio del exmarido de la víctima, la mujer tenía problemas de adicción y había "intentado ayudarla 1.000 veces". El hombre cuenta que en un primer momento se temió que la muerte hubiese tenido algo que ver con esto. Lo que nunca hubiese imaginado, explica, es que alguien acabase con ella, de la forma en que parece que lo ha hecho. "No tengo ninguna duda, sé que le había puesto la mano encima, porque una persona se la encontró y tenía moratones. Al preguntarle, dijo que había sido él".
Un tipo desconocido
Tal como avanzó Crónica Global, la pareja actual de la víctima, que ya ha ingresado en prisión provisional a la espera de juicio por la muerte de Elisabeth, tenía un comportamiento extraño en redes sociales, donde acumulaba perfiles diferentes en los que se presentaba como Guardia Civil, vigilante de seguridad o pensionista. De hecho, los vecinos estaban convencidos de que, efectivamente, el hombre había sido teniente de la Guardia Civil hasta que sufrió un grave accidente que lo apartó del cuerpo, algo que la propia comandancia de Lleida ha desmentido a este medio.
Además, poca gente ha podido aportar información sobre él. Ni siquiera los empleados del supermercado más cercano al domicilio de la pareja, donde Elisabeth pasó días y días pidiendo limosna. "Nunca lo hemos visto", aseguró una responsable del establecimiento. Exactamente lo mismo cuenta la expareja de la víctima, quien asegura que "a ese tío no lo conocía nadie", y que ni siquiera su hija ha tenido contacto con él. Sin embargo, el detenido llegó a anunciar en redes que se habían casado y le mostraba numerosas muestras de amor públicamente. "Ella me dijo que pensaba casarse este año y me pidió permiso para que la niña fuese a la boda, así que dudo mucho que fuese verdad que ya lo estuviesen", insiste el exmarido.
"Solo espero que encuentre la paz"
A lo largo de la conversación, Pablo. P repite varias veces: "Lo único que quiero es que este tipo encuentre la paz, porque le haré la vida un infierno sea vivo o muerto". Subraya que no se ha llevado una vida, sino la de toda una familia.
Elisabeth recibirá sepultura hoy, seis días después de su muerte. Ahora falta esperar a que se celebre el juicio para saber qué pasó realmente esa madrugada del 17 al 18 de enero, cómo murió y por qué. Mientras, la familia y allegados de la víctima tienen por delante un largo duelo. "Ella ahora ya descansa en paz", sentencia su exmarido.