Dani Alves y la víctima estuvieron encerrados 15 minutos en el baño de Sutton

Las imágenes no cuadran con ninguna de las tres versiones que ha dado Dani Alves en relación a una supuesta violación en uno de los baños de la discoteca Sutton de Barcelona. Según avanza El Periódico, las cámaras de seguridad del local recogen que él y la denunciante permanecieron encerrados alrededor de 15 minutos. 

Así pues, las imágenes han restado credibilidad al exjugador del Barça, que en un primer vídeo enviado al programa Y ahora Sonsoles de Antena 3 reconoció que la noche del 30 de diciembre estuvo en la discoteca Sutton de Barcelona, pero que no sabía quién era la mujer. 

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Versiones contradictorias

“Cuando uno elige ir al baño no tienes que preguntar quién está en él. Lo siento mucho, pero no sé quién es esa señorita. No sé su nombre, no la conozco, no la vi otra vez en mi vida. En estos años nunca he invadido el espacio de alguien sin su autorización. ¿Cómo le voy a hacer eso a una mujer o una chica? No, por Dios. Ya basta. Sobre todo porque están haciendo daño a los míos, porque saben quién soy”, se defendía. 

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Sin embargo, las grabaciones de las cámaras de seguridad del local, situado en la calle Tuset, no concuerdan con ese relato, del que se desprende que, aquella noche, en la sala VIP de la discoteca, Alves abrió la puerta del baño y, accidentalmente, se encontró con la víctima en el interior. Según ese medio, Alves y la víctima estuvieron dentro de ese baño alrededor de un cuarto de hora. 

La versión de la víctima

Por tanto, ni las imágenes --analizadas por la Unidad Central de Agresiones Sexuaes de los Mossos d’Esquadra-- ni las versiones de los testigos recogidos coinciden con las versiones que ha dado el defensa. Por su parte, la víctima mantuvo la misma versión de los hechos en su declaración ante la policía autonómica y el pasado viernes en sede judicial. Su explicación, además, sí que encaja con las grabaciones de las cámaras de seguridad. 

Según la joven de 23 años, el brasileño, a través de un camarero de la discoteca, la había invitado a ella y a las dos amigas con las que se encontraba en la zona VIP. Envió al trabajador dos veces y ellas aceptaron reunirse con Alves a la segunda. Cuando se sentaron con él, el jugador empezó a tontear con las tres, acercándose mucho a ellas. 

Imagen de Sutton / CG

Tal y como explicó la joven a los Mossos d’Esquadra, Alves se colocó detrás de ella, le agarró la mano con fuerza y la puso sobre sus partes. Un gesto que ella rechazó. Sin embargo, él siguió insistiendo para que le siguiera al baño, en cuyo interior, y ya sin cámaras, el futbolista la abofeteó y violó, según la denunciante.   

Alves pide declarar de nuevo

Por otro lado, el exjugador --que cumple prisión provisional desde el viernes-- ha pedido comparecer de nuevo ante la jueza que instruye el caso de violación para aclarar los hechos ocurridos. Como adelantó El País, en una comparecencia que duró aproximadamente 45 minutos frente a la jueza instructora, el brasileño dio tres versiones de lo ocurrido. A preguntas de la titular aseguró que no hubo contacto con la denunciante. A la fiscalía le respondió que se quedó paralizado, sin saber que hacer, para acabar respondiendo a la acusación particular que quien se abalanzó sobre él fue la denunciante, que le realizó una felación y que si no lo dijo hasta el momento fue para “protegerla”. 

Una versión que dista mucho de la de la joven de 23 años, que desde el día de los hechos se mantiene firme en una versión que la jueza considera coherente.