Una juez ‘destierra’ a una mossa d’Esquadra crítica con el independentismo

La titular del Juzgado Contencioso-Administrativo 1 de Girona ha rechazado el recurso presentado por la excabo de los Mossos d’Esquadra, Inma Alcolea, contra su desplazamiento a un puesto de trabajo no policial de técnico de apoyo en Barcelona, situado a 200 kilómetros de su domicilio, situado en Girona. Alcolea es la agente que fue expedientada por denunciar el sesgo independentista existente en el cuerpo en pleno procés.

La magistrada sí reconoce el derecho de la recurrente a percibir, con efectos retroactivos, el pago de los sueldos dejados de percibir. Alcolea, actualmente en situación de incapacidad por el acoso y hostigamiento sufrido por parte de la propia Dirección General de la Polícia --reconocidos por otra juez-- , estuvo diez meses sin cobrar a la espera de que la Consejería de Interior le buscara un nuevo destino. La Justicia ha dado la razón en diversas ocasiones a esta mossa, quien fue objeto de varios expedientes por parte del departamento de Interior por denunciar las presiones independentistas sufridas.

Creación 'ad hoc' de un puesto de trabajo

En este caso, la juez Ramona Guitart, confirma el nuevo destino de Alcolea que entiende acorde con el decreto 246/2008 de regulación de la situación administrativa especial de segunda actividad. Y alude a la creación ad hoc de un puesto de trabajo no policial de técnico básico de apoyo en Barcelona, fuera de la Dirección General de la Policía, reservado a personas funcionarias de la categoría de cabo de la escala básica de Mossos.

Niega la magistrada que la agente haya sido discriminada o resulte perjudicada por esos desplazamientos a los que se ve sometida a pesar de que el propio departamento de asuntos sociales prevé la conciliación laboral y familiar para personas con un reconocimiento de discapacidad. 

La recurrente alega que en Girona existían cuatro puestos de trabajo similares que nunca le ofrecieron, entre ellos uno destinado a la Unidad de Juegos y Espectáculos donde ha sido finalmente destinada en Barcelona.

"Acoso y hostigamiento"

Alcolea asegura que el “acoso y hostigamiento” que sufre desde que rechaza la politización dentro de los Mossos “se ha extendido contra mi pareja, un sargento de mozos que no cometiendo ninguna infracción está cumpliendo una sanción ilegal de un mes sin sueldo”.

En 2014, la juez Guitart rechazó el recurso presentado por la Abogacía del Estado contra los ayuntamientos catalanes que financian con fondos municipales a la Associació de Municipis per la Independència (AMI). Por el contrario, y en fechas similares, otro juzgado de emitía un fallo a favor del Estado en base a la jurisprudencia del Tribunal Supremo la ‘AMI vasca’ que Batasuna promovió tras el pacto de Estella, una organización a la que estaban asociados todos los ayuntamientos nacionalistas y cuyo funcionamiento y financiación era similar a la entidad municipalista catalana.

La misma magistrada y en otra causa, sancionó a un mosso que escribió atestados en castellano argumentando que había faltado "a los pilares fundamentales del cuerpo". Una resolución contraria a la doctrina judicial que establece que un idioma no puede prevalecer sobre otro. 

Esta sentencia, junto a la de Alcolea y la falta de legitimación dictaminada por Guitart contra Impulso Ciudadano para personarse en la causa sobre el cambio de nombre de la avenida Borbón de Barcelona están pendientes de resolución ante el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña.