Imagen de la cocina de alto rendimiento de Serhs Food en Mataró
Serhs vuelve al 'lugar del crimen' y gana la restauración de Mataró y Calella
- El grupo de la familia Bagó entra en los dos hospitales pese a las irregularidades que afloraron la Oficina Antifraude de Cataluña y la Fiscalía
- La firma salió del Consorci Sanitari del Maresme tras denuncias y una huelga, pero vuelve con una licitación de urgencia
Noticias relacionadas
Serhs ha vuelto al lugar del crimen y ha logrado la restauración de los hospitales de Mataró y Calella. El conglomerado de restauración de la familia Bagó ha irrumpido en los dos centros sanitarios pese a las irregularidades en los contratos públicos que afearon la Oficina Antifraude de Cataluña (OAC) y la Fiscalía de Barcelona.
Lo han denunciado fuentes del sector sanitario, que han alertado de que "Serhs ha regresado esta misma semana al Consorci Sanitari del Maresme" como proveedor integral de restauración. La nueva gerencia del doctor Rafael Lledó ha comunicado el cambio a la plantilla.
10,8 millones
Así, Serhs ha vuelto a los hospitales del Maresme, y lo ha hecho con una licitación de urgencia -con menos competencia- por la cifra de seis millones de euros. No se presentó ninguna empresa más.
Vista aérea del Hospital de Mataró, cabecera del Consorci Sanitari del Maresme
Este contrato se suma al de Calella, que la firma captó a finales de 2022, un año antes, y que le aseguró 4,8 millones de euros para cuatro años. Ha sido ampliado sin competencia con otros 80.000 euros, según el Portal de Contratación.
Antifraude afeó el "conflicto de interés"
El regreso del conglomerado al Hospital de Mataró significa que Serhs vuelve al lugar de una agria polémica. En 2013, la Oficina Antifraude de Cataluña criticó en un demoledor informe el "conflicto de interés" en el que incurrió Ramón Bagó, expresidente del grupo, en su doble posición de máximo directivo y de presidente de la patronal de hospitales Consorci de Salut i Social de Catalunya (CSC), paraguas de los hospitales de Mataró y Calella.
Antifraude concluyó que Bagó pudo cometer los delitos de "negociaciones prohibidas" y "revelación de secretos", por lo que derivó su dictamen de 8.000 páginas a la Fiscalía Superior de Cataluña. Y esta instancia, a la Fiscalía de Barcelona.
Fiscalía lo vio "sangrante" e "ilógico", pero no delictivo
El ministerio público abrió diligencias, pero las archivó un año después, en 2014.
Jordi Bagó, consejero delegado de Grup Serhs
La causa decayó con un informe que criticaba, eso sí, la "falta de toda lógica" en el hecho de que el máximo directivo de Serhs fuera adjudicatario y, al mismo tiempo, presidiera la patronal que adjudicaba junto a los hospitales. Ello lo describió como "sangrante" y abonó la tesis del "conflicto de interés", aunque no el delito.
Apartada en los años 90
Hay más, porque la compañía de colectividades fue apartada del propio Consorci Sanitari del Maresme (CSdM) en los años 90 tras quejas por mal servicio que el comité de empresa denunció a las autoridades sanitarias y que provocaron una huelga.
Lo explica uno de los miembros del organismo, que recuerda que "se externalizó la cocina, hasta entonces interna, y se entregó a Serhs". Pero las quejas del personal duraron meses y provocaron denuncias a Sanidad y una huelga de tuppers. Finalmente, Serhs acabó desvinculada del grupo sanitario.
CSdM: "Insolvencia de la anterior"
¿Qué dicen los hospitales? A preguntas de este medio, una portavoz de CSdM ha admitido el cambio, aunque ha recordado que Serhs fue "la única empresa que se presentó". La contratación fue de urgencia porque "la empresa que prestaba el servicio [Arcasa] se declaró en concurso de acreedores -como avanzó Crónica Global-, y el administrador concursal solicitó la resolución del contrato a la mayor brevedad".
Imagen del acceso al Hospital de Mataró, cabecera del Consorci Sanitari del Maresme
En relación al papel que ha jugado el CSC en la licitación, desde el Hospital de Mataró se insiste en que sólo ha aportado el rol de "vocal jurídico" en la mesa de contratación. Este medio ha contactado con la Corporación Sanitaria del Maresme i la Selva, de la que pende del Hospital de Calella, sin recibir respuesta.
De pedir la independencia a un rescate del Estado
Cabe recordar que Serhs fue de las pocas grandes empresas que apoyaron el procés independentista en Cataluña. Lo hizo por boca de su expresidente, el malogrado Ramón Bagó. El directivo aseguró que la secesión "reforzaría la marca de Cataluña" en 2012, y en 2013 pidió que los que vaticinaban una catástrofe económica "se callaran". Fue un año antes de la primera consulta por la separación organizada por el entonces president de la Generalitat, Artur Mas.
El directivo falleció en 2018. Le sucedió su hijo, Jordi Bagó Mons, ahora presidente y consejero delegado. Éste se topó con el duro golpe que propinó la pandemia del coronavirus a las empresas de cátering y restauración. Ante ello, Serhs terminó pidiendo ayuda al Estado, que acudió al rescate por medio de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI).
Condena por estafa
No fue el único lance complicado para la empresa. En 2021, el propio Jordi Bagó aceptó una condena de un año de cárcel por haber engañado a Novo Banco en una operación de reestructuración de deuda.
Imagen de la cocina de alto rendimiento de Serhs em Mataró
Serhs consiguió un pacto con sus acreedores, pero lo ocultó al banco gallego. En cambio, amplió la póliza de crédito hasta los 1,5 millones, de los que solo devolvió 10.000. Bagó aceptó la condena menor y eludió los siete años de prisión que le pedía la Fiscalía.
