Selenta Group, primera hotelera catalana en ajustar plantilla
La cadena de alojamientos de lujo, tocada por el año negro del coronavirus, negocia un ERE para sus servicios centrales
17 junio, 2020 00:00De los ERTE a los ERE. Selenta Group es la primera cadena catalana en ajustarse el cinturón por culpa de la pandemia del Covid-19, que ha dejado la facturación a cero durante casi tres meses y que ha arruinado parte del verano, temporada que algunos hoteleros ya dan por perdida. En este escenario, la hotelera ha tomado decisiones y está negociando 30 extinciones de empleo en las oficina centrales, según han informado fuentes conocedoras.
Preguntado por la cuestión, un portavoz de Selenta ha confirmado la información. La fuente corporativa ha precisado no obstante que la cadena "está negociando con los representantes legales de los trabajadores". En cualquier caso, las medidas de ajuste, ha defendido, no afectarán a más de 30 empleados "sobre un total de 1.500, un 2% del conjunto de la plantilla". Asimismo, la firma de hoteles MICE y de lujo prevé tocar sólo las oficinas centrales de la compañía. ¿Con qué fin? "El objetivo del proceso es adaptar la plantilla al volumen de negocio actual y previsto para los próximos meses, aunque el ajuste es sustancialmente inferior a la disminución del volumen de negocio".
Spot publicitario del Hotel Sofía de Selenta Group / YOUTUBE
Sin fecha de reapertura
La decisión de Selenta de reducir personal se explica por el letal impacto del coronavirus sobre el segmento corporativo, uno de los principales del grupo. De hecho, alojamientos rivales más orientados al turista de ocio, como el W Barcelona o el Hotel Arts, ambos operados por el gigante Marriott-Starwood, ya han anunciado sus reaperturas de cara a julio. ¿Y Selenta, con activos de tanta envergadura como los cinco estrellas Sofía Barcelona o Nobu? "Aún no tenemos fechas para la reapertura de los hoteles. Se hará cuando la demanda lo permita. Estamos preparados para hacerlo con los más rigurosos protocolos de seguridad e higiene", ha explicado un portavoz de la cadena.
Esta decisión es atribuible al hundimiento del mercado de ferias, conferencias, convenciones y eventos en la Ciudad Condal. La causa es la pandemia, sí, pero también el deterioro de la marca Barcelona por, por ejemplo, los disturbios provocados por radicales independentistas tras la sentencia del procés en otoño de 2019. Aquellas algaradas provocaron cancelaciones de reservas, algo que ya había ocurrido en 2017, en pleno desafío independentista. Tras ello vino el virus SARS-CoV-2 y el mazazo de la anulación del Mobile World Congress (MWC). El sector, esperan los expertos, no se recuperará hasta el próximo Mobile en febrero de 2021, habida cuenta del rebrote esperado para otoño. Por el momento, la Generalitat ha lanzado ya una campaña de captación a la desesperada.
Verano perdido y atonía hasta 2021
Ajena a los esfuerzos institucionales, los males de Selenta no son únicos. El mercado de los alojamientos de lujo, salvo los muy orientados al turista de ocio, dan por perdido el verano, tal y como avanzó este medio. Matará la temporada la reapertura en julio, la desconfianza del turismo y las dificultades para viajar. En cuanto pase el estío y llegue la temporada de ferias, el rebrote o las precauciones para que no haya cadenas de contagios en los congresos tampoco ayudarán. Es por ello que alojamientos como el Fairmont Juan Carlos I de Barcelona, igual que Selenta, ya otean a 2021 para la recuperación, dando el año por perdido.
Ello no contenta a los sindicatos, que prevén batallar. UGT recuerda que la cadena ha recibido ayudas de las administraciones públicas. Asegura el principal sindicato en hostelería en Cataluña que se "precariza y despide a los trabajadores" aprovechando la pandemia. La agrupación avanza una postura proactiva contra los despidos, que llegarán cuando la hotelera de Jordi Mestre, también presidente del Gremio de Hoteles de Barcelona, culminará un ERTE, como el resto del sector. Está por ver si el resto de cadenas siguen los pasos de Selenta y se ajustan el cinturón o el turismo remonta y les permite aguantar plantillas.