Marta Jofra (CUP), Olga Arnau (ERC) --alcaldesa de Vilanova y la Geltrú-- y Blanca Albà (Junts) /CG

Marta Jofra (CUP), Olga Arnau (ERC) --alcaldesa de Vilanova y la Geltrú-- y Blanca Albà (Junts) /CG

Política

La CUP se rompe en Vilanova i la Geltrú por su apoyo a ERC y Junts

Los tres concejales municipales abandonan la formación anticapitalista, pero mantienen el acta y sus cargos como miembros del equipo de gobierno

4 marzo, 2022 12:31

La CUP implosiona en la ciudad de Vilanova i la Geltrú (Barcelona). Los tres concejales de la formación anticapitalista en la capital del Garraf han anunciado que abandonan las filas del partido, pero que mantendrán el acta de concejales en lo que queda del mandato. Lo hacen como regidores no adscritos y serán socios del equipo de gobierno que integran junto a ERC y Junts. 

Los tres críticos con la formación han explicado que han tomado la decisión después de que la asamblea de su formación les pidiera la renuncia de todos sus cargos por haber desobedecido el mandato de la militancia. Y es que votaron a favor de los presupuestos municipales en contra de lo que había opinado la mayoría en una asamblea, el órgano que tiene más peso en la vida política de la CUP. Elos mismos presentaron los números municipalos y los apoyaron como miembros del tripartito independentista local que lidera Olga Arnau, (ERC). No consiguieon el apoyo de las bases pero, al final, decidieron pasar de ello en la votación en el Pleno. Sin sus tres votos a favor, no podían prosperar. 

Denuncian que la asamblea se haya convertido en un espacio tóxico 

En rueda de prensa, los ya excupaires Marta Jofra, Jaume Aliaga y Enric Garriga han dado a conocer su continuidad en el Ejecutivo local después del ultimátum que les dio la sección local del partido. Les dejó claro que, si no dimitían en un plazo de siete días, emprenderían acciones legales en su contra. Ahora, los tres han defendido su postura, así como la labor realizada durante estos tres años. Justifican que se quedan en el consistorio para “dar cumplimiento a las políticas del programa de gobierno" que diseñaron. 

Argumentan que el proyecto se ha visto “gravemente amenazado” en los últimos meses por los ya sus excompañeros de partido, a quienes acusan de haber convertido la asamblea permanente “en un espacio tóxico, hostil y agresivo”. Denuncian incluso la sustracción de los dominios de los perfiles que usaban de forma habitual en redes sociales tras la celebración del pleno de presupuestos, donde quedó clara la ruptura en el seno de los anticapitalistas.

Pérdida de la representación insititucional

Mantienen que la crisis interna del partido no tendrá "afectaciones" en la ciudad. Remarcan la buena sintonía que existe entre las tres fuerzas independentistas que están en el gobierno local y que aseguran que se mantendrá hasta la primavera de 2023, cuando se celebrarán las próximas municipales. En este sentido, aclaran que en ningún momento se han sobrepasado las líneas rojas fijadas en el acuerdo gubernamental, firmado al inicio del mandato.

La CUP pierde la representación institucional en la capital del Garraf. Fuentes próximas a la dirección local señalan que la militancia en la población es la que debe decidir si cumple con sus amenazas y, finalmente, emprende medidas legales en contra de los tres concejales díscolos, a quienes tildan abiertamente de “tránsfugas”. Hasta la fecha, el Ayuntamiento de Vilanova i la Geltrú era el segundo mayor consistorio en el que los anticapitalistas gobernaban, tan solo por detrás de Tarragona.