Los 10 motivos de la oposición del Barça para volver a la carga contra Laporta
- El presidente azulgrana se aferra a los resultados del equipo de Hansi Flick para sortear una avalancha de críticas hacia su gestión
- Más historias: la Grada d'Animació, víctima de los recortes de Laporta con la seguridad del Barça en Montjuïc
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Joan Laporta, presidente del FC Barcelona, ha logrado acallar las voces más críticas con su gestión a partir de los buenos resultados obtenidos por el equipo de Hansi Flick. La apuesta del entrenador alemán ha permitido al dirigente azulgrana tener una cuota de tranquilidad en los primeros meses de la temporada 2024-25. Sin embargo, los grupos de oposición todavía tienen muchos motivos para volver a la carga.
Hace días que los opositores a Laporta mantienen un perfil más bajo, pero se augura un cambio radical del panorama en las próximas semanas. Las voces críticas con la actual junta directiva han mantenido el discurso de que los resultados del primer equipo no pueden desviar el foco de atención en otros ámbitos. En este sentido, existen hasta 10 motivos que ponen bajo la lupa la gestión del presidente y se van a encargar de seguirlos recordando.
1) El cierre de la Grada
La exclusión de la Grada d'Animació en los partidos contra el Brest y Las Palmas ha generado un nuevo punto de tensión entre los socios y Laporta. La cúpula azulgrana no cede terreno ante la exigencia de que los cuatro grupos paguen los 21.000 euros que corresponden a multas de la anterior temporada. Muchos hinchas del Barça consideran que es una medida desproporcionada que perjudica a los intereses del primer equipo, sumido ahora en una racha negativa con solo un punto de los últimos nueve en Liga.
El ambiente de Montjuïc, sin la Grada, se ha visto claramente debilitado. La derrota contra Las Palmas (1-2) fue una buena prueba de ello. Además, ha sido una nefasta idea tomar una decisión tan drástica justamente en el momento de la celebración del 125 aniversario del Barça, que ha quedado manchado por la atmosfera tan fría en el estadio azulgrana. Esta situación ha enrarecido el ambiente y empieza a generar muchas críticas a Laporta, sobre todo de los grupos de animación que llaman a los culés a protestar. No suma ni a los intereses del club ni a los del primer equipo. Y menos teniendo en cuenta la reducción de las medidas de seguridad y control que hay en el Olímpic Lluís Companys.
2) Fuga de talento
La desprofesionalización del FC Barcelona en la era de Laporta es un tema que también genera preocupación. Cada año que pasa se confirman nuevas bajas en el área ejecutiva que debilitan el proyecto azulgrana, como fue el reciente caso de las salidas de Eduard Romeu, Maribel Meléndez y Joan Moya. Más de 30 altos cargos han sido despedidos o se han marchado por su cuenta. El número, aunque no hay datos oficiales del club, supera con creces el centenar de personas si se suman empleados de nivel inferior y los trabajadores que conformaban Barça TV.
Esa incertidumbre en el área laboral es lo que ha provocado que en las elecciones del Comité de Empresa del Barça se diera un resultado sorpresivo. Jaume Felíu, que llevaba 25 años como representante de los trabajadores por Comisiones Obreras, ha perdido su cargo ante Susana Berniola, de UGT. El aparente motivo detrás de ese cambio radical podría ser la escasa defensa de sus intereses que han sentido los propios trabajadores en un clima plagado de dimisiones y despidos.
3) La inscripción de Olmo
Dani Olmo fue el único fichaje importante del FC Barcelona en el anterior mercado de verano. Sin embargo, Laporta todavía no ha logrado cerrar su inscripción de forma definitiva. El de Terrassa solo está inscrito hasta finales de año a partir de la lesión de Andreas Christensen. Faltan pocas semanas para llegar a 2025 y el centrocampista se podría quedar fuera de las convocatorias de Hansi Flick si la junta directiva no logra tapar un agujero de unos 35 millones de euros derivado de los incumplimientos constantes en los pagos de Barça Studios.
La improvisación de los altos mandos con la inscripción de Olmo es uno de los puntos más criticados por los grupos barcelonistas, tanto los de opinión como los de oposición. Desde el Barça confían en que nuevos inversores entren en la sociedad Bridgeburg Invest durante este mes de diciembre para evitar lo que sería una situación que también podría incrementar el malestar de la masa social azulgrana. En caso contrario, el club se vería obligado a buscar la venta de algún jugador con caché en el mercado --De Jong o Christensen están entre los más señalados-- o, en su defecto, deberían firmar un nuevo aval. Algo que desaprueban la mayoría de miembros de la junta directiva.
4) El pufo de Barça Studios
Si hay algo que ha dado problemas en la gestión del club durante los últimos tres años es Barça Studios. La sociedad que está llamada a ser el foco del negocio audiovisual y digital todavía no ha logrado justificar su valor dentro del club. La junta directiva ha contabilizado un valor de 408 millones de euros en sus balances, debido a los 200 millones que acordaron vender a diferentes socios.
Sin embargo, la realidad es que el FC Barcelona tan solo ha recibido 55 millones de euros por Barça Studios, lo que ha provocado que exista un agujero en las cuentas y con ello más complicaciones para afrontar la planificación deportiva. Joan Laporta ha preferido hacer oídos sordos al auditor, Grant Thornton, sobre la recomendación de devaluar la sociedad, que además tiene unos niveles de facturación inferiores al millón de euros.
El presidente del club azulgrana espera incorporar a nuevos inversores para Barça Studios y cobrar los 200 millones que se prometieron en las cuentas. La realidad es que se trata de una línea de negocio que todavía no muestra una hoja de ruta para que se convierta en una fuente de ingresos, tal y como sí sucede con Barça Licensing & Merchandising (BLM).
5) Comisiones
Las comisiones en la etapa presidencial de Laporta están a la orden del día. Es un asunto que genera preocupación entre los grupos de oposición, teniendo en cuenta que una de las más recientes corresponde a Darren Dein. El intermediario inglés se llevará un pago por haber participado en el acuerdo de renovación con Nike.
¿Realmente necesitaba el Barça a un intermediario? Esa es una de las grandes preguntas que surgen con la presencia de un Dein que también se llevó una comisión en el acuerdo de Spotify. El FC Barcelona es uno de los clubes más mediáticos del panorama internacional, por lo que sorprende que Jan decida insistir en Darren para formar parte de esas negociaciones. Especialmente con colaboradores con los que existe una relación directa.
6) El caso ISL
El FC Barcelona hizo saltar la polémica a mediados del mes de mayo cuando se conoció que la directiva de Joan Laporta aceptó un préstamo en 2021 de ISL Futbol LLC por valor de 350.000 euros. Dicha suma de dinero se destinó al coste financiero derivado de los avales que necesitaba la junta de cara a presidir el club azulgrana.
Desde el Barça aseguraron que no existió ninguna contraprestación, pero no deja de ser llamativo que ISL fue la encargada de gestionar la gira de pretemporada en Estados Unidos dos años después de realizar el préstamo a los altos mandos. Pasan los meses y apenas hay respuestas sobre la devolución de ese dinero y las condiciones del mismo. Sin dejar de lado el claro conflicto de intereses generado.
7) El fichaje de Vitor Roque
Otro caso que genera ruido en el barcelonismo es el fichaje de Vitor Roque. En una época de máxima urgencia financiera, la cúpula azulgrana decidió incorporar al joven delantero brasileño a cambio de 31 millones de euros en fijo más 30 en variables. La cifra oficial difiere de la versión de los medios en Brasil, que tasan la operación en 74 millones.
La importante apuesta del Barça apenas tuvo continuidad tras acordar la cesión del jugador del Real Betis tan solo seis meses después de llegar al primer equipo. El joven delantero prácticamente no jugó bajo las órdenes de Xavi Hernández --que no veía prioritario su fichaje-- en ese tramo del anterior curso. La operación por Vitor Roque huele mal. Tanto por la presencia de agentes como André Cury que tienen un historial negativo en el Barça como por el hecho de su salida al Betis, donde espera superar el trago tan amargo de su primer semestre como azulgrana.
8) Peñas olvidadas
Laporta nunca ha mimado a las peñas del Barça, como sí hacía, por ejemplo, el expresidente Núñez o, más recientemente, el propio Bartomeu. Nunca ha buscado explícitamente su apoyo ni su complicidad. Se sienten olvidadas por la actual cúpula azulgrana, prácticamente en un limbo. Con el paso del tiempo han visto recortadas las ayudas que antes recibían de los altos mandos.
Los peñistas del FC Barcelona, como los miembros de la Grada, están descontentos con un presidente distante, quien parece asumir que el movimiento peñístico es más cosa del pasado que del futuro. Algo que también ha tensado la relación en algunos partidos en Montjuïc, donde se corea con más asiduidad el "Barça sí, Laporta no" que tanto disgusta al presidente y que se presume como el motivo principal para haber tomado medidas con la Grada.
9) La vuelta al Camp Nou
De las promesas incumplidas de Laporta, destacan los plazos de la vuelta al Camp Nou. El año pasado se expresó en varias ocasiones que la afición culé regresaría al recinto azulgrana en el marco de la celebración del 125 aniversario. Primero se dijo noviembre y luego diciembre. Sin embargo, no fueron capaces de lograr ese objetivo, que ahora se traslada hasta febrero-marzo de 2025.
Las obras del nuevo Camp Nou tampoco han estado exentas de polémicas por la tensa relación que existe actualmente con los vecinos de Les Corts. Son muchas las quejas de los grupos vecinales por el ruido generado de la construcción y los horarios de trabajo, sometidos a incumplimientos reiterados, que apenas permiten descansar a los habitantes de la zona.
10) Viajes misteriosos
Otro detalle que también genera críticas por parte de los grupos de oposición --y muchos socios y aficionados-- es la poca transparencia del FC Barcelona sobre los exóticos viajes de Laporta. En pleno parón de selecciones de noviembre, el dirigente azulgrana decidió salir del continente europeo para moverse por Mongolia y Azerbaiyán. Se vendió que era un viaje privado --y es en parte verdad--, pero luego trascendieron negociaciones para montar academias y para vender la marca propia de ropa del Barça, a través de BLM (Barça Licensing & Merchandising), en territorio asiático.
El año anterior también se produjeron algunos viajes poco transparentes del presidente, tanto a Qatar como Bali. Y en años anteriores han surgido otro tipo de situaciones similares en Israel, donde el Barça se asoció a un empresario, Moshe Hogeg, vinculado al sector de las criptomonedas que estaba siendo investigado por estafa, entre otros asuntos muy turbios. El Barça tuvo que cancelar un amistoso y ese contrato ante la polémica suscitada. El club mantiene una política de secretismo y opacidad sobre este tipo de viajes que, a la postre, no repercuten en ingresos directos a la institución.