Dos agentes de la Guardia Urbana de Barcelona, en Ciutat Vella

Dos agentes de la Guardia Urbana de Barcelona, en Ciutat Vella Cedida / GUB

Política

El Ayuntamiento de Barcelona desplaza al responsable de los operativos de la Guardia Urbana en Ciutat Vella

El subinspector del distrito más 'caliente' de la ciudad ha sido apartado tras decenas de investigaciones internas a policías del mismo cuerpo

14 diciembre, 2023 00:00

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Barcelona ha apartado al mando de la Guardia Urbana encargado de supervisar los operativos de Ciutat Vella. El ayuntamiento ha desplazado al subinspector del distrito más caliente de la Ciudad Condal tras decenas de investigaciones de Asuntos Internos a policías del propio cuerpo. 

Lo han explicado fuentes policiales, que detallan que el alto cargo policial "ha sido apartado recientemente" tras menos de tres años en su puesto. El alto funcionario fue nombrado en 2020 como número tres de Ciutat Vella, el territorio más conflictivo de la capital catalana. 

"Azuzó a Asuntos Internos"

Su designación, atribuida al gobierno municipal anterior, no ha ido bien. Las mismas fuentes explican que tomó una senda de gestión "extremadamente garantista". 

Efectivos de la UREP de la Guardia Urbana, durante un deshahucio en la Barceloneta

Efectivos de la UREP de la Guardia Urbana, durante un deshahucio en la Barceloneta Cedida

Ello le llevó a "azuzar a Asuntos Internos -la llamada UDAI- contra decenas de agentes, empezando unas 40 investigaciones en menos de tres años". Como consecuencia, aumentó la conflictividad laboral en la Unidad Territorial 1 (UT-1) de la Guardia Urbana, la sección con más detenciones -el 70% de las de toda la ciudad-, más bajas de agentes y más conflictos. 

"Ciutat Vella no es Sarrià"

La gestión "extremadamente garantista" sería lo habitual en cualquier otra zona policial, pero no en el casco antiguo de Barcelona. Lo explican agentes adscritos a este territorio, que insisten en que Ciutat Vella "es un enclave de muy difícil control". 

¿Por qué? "Por los narcopisos; los robos a turistas; la actividad de los relojeros o cacos de relojes -para los que Mossos d'Esquadra han tenido que crear una unidad específica-; las agresiones sexuales o la actividad en las zonas de discotecas del Frente Marítimo o Las Ramblas; los botellones tumultuarios frente al Macba y otras plazas, o la Barceloneta como lugar de paso intensivo de turistas y quienes se dedican a robarles". 

"Encontronazos"

Esa presencia intensiva de grupos delincuenciales mezclado con ocio nocturno provoca "encontronazos constantes" con la Guardia Urbana, que vela por el civismo y niveles de ruido aceptables para la comunidad.

Otro agente que trabaja las noches y fines de semana relata esta situación: "Nos reciben de forma hostil. Se rebotan, nos empujan, nos insultan y se revuelven. Las sanciones administrativas y detenciones pueden no ser pacíficas, como sí ocurre en otros distritos". 

Una detención llevada a cabo por agentes de la UREP de la Urbana

Una detención llevada a cabo por agentes de la UREP de la Urbana Cedida

En este escenario, desde los efectivos de a pie se reclama "más apoyo político" para pacificar una zona que vive al límite, "sobre todo en verano". Con el nuevo número tres "no lo tuvieron y se entró en una espiral de enfrentamientos, con expedientes constantes de la UDAI". Ahora, los responsables de los gestores del cuerpo de seguridad local han apartado a este cargo. 

"Razones operativas"

Preguntada por la cuestión, una portavoz del Ayuntamiento de Barcelona ha confirmado el cambio de destino. De forma oficial, se atribuye a "razones operativas". 

Otras fuentes también han corroborado la información y han precisado que el sustituto es otro policía con galones procedente de Nou Barris. Al nuevo responsable, agentes y sindicatos le piden "más respaldo a la base".