Malestar diplomático por el escrache 'indepe' al Consulado chino

Cabreo entre la comunidad diplomática china por el escrache independentista al Consulado General Chino de Barcelona. La delegación oficial ha avisado al secesionismo de que "no tolerará la injerencia extranjera" en el conflicto de Hong Kong. Lo ha dicho tras una performance independentista que reivindicó ayer jueves las protestas en la región administrativa y pidió la secesión catalana.

En un comunicado difundido en chino y español [leer aquí], la cónsul Lin Nan ha subrayado que "Hong Kong es un asunto interno de China". La alto cargo ha recordado que el país "se adhiere siempre a la política exterior pacífica e independiente sin interferir en la política interna de otros países, y tampoco tolera la intervención en nuestros asuntos internos por parte de cualquier fuerza extranjera". Quizá más importante, la nota del Consulado no muestra concesión alguna con el independentismo catalán, hasta el nivel que no lo cita explícitamente, sino que se dirige a "una parte de los ciudadanos locales [que] prestan mucha atención al tema de Hong Kong de China".

"La violencia no defiende la democracia"

Deja claro también el equipo de Nan que "lo que se muestra actualmente en Hong Kong no es una manifestación pacífica sino violencia callejera al cien por cien".  En opinión de la que fuera ministra consejera de la embajada china en EEUU, "la violencia y la destrucción no traen ni prosperidad ni hermosura, por lo cual nadie debe embellecer la violencia callejera como defender la democracia", en, ahora sí, una referencia a los métodos de protesta de los estudiantes en la región administrativa, pero también por los CDR en Cataluña. 

Avisa el gabinete de la cónsul que "lo más importante en Hong Kong ahora es detener la violencia, restablecer el orden y administrar de acuerdo con la ley". Agrega que el gigante asiático ha de "restaurar el estado de derecho" en la excolonia británica y reivindica, de nuevo, el principio de un país, dos sistemas que permitió la devolución del enclave de Reino Unido a China en 1997.

Escrache de la ANC con la mujer de Torra

El comunicado de la representación oficial china llegó horas después de que un centenar de independentistas se concentraran ante el Consulado en Barcelona. Conectaron allí en directo con Hong Kong y mostraron pancartas relativas a la secesión catalana y a las protestas que se han producido en el centro financiero asiático en los últimos meses.

Al escrache, en el que la presidenta de la ANC, Elisenda Paluzie, hizo de cicerone, acudió Carola Miró, la mujer de Quim Torra. La maestra y activista llegó en coche oficial y con escolta acompañada de cargos locales de Junts per Catalunya (JxCat) en Barcelona.