La sede de Naturgy en la avenida Diagonal de Barcelona / NATURGY

La sede de Naturgy en la avenida Diagonal de Barcelona / NATURGY

Business

Naturgy pulveriza su plan estratégico original a dos años de culminarlo

La compañía energética fija para 2023 un objetivo de resultado operativo que supera en un 12,5% el consignado en el plan original para 2025, con lo que envía al mercado una clara señal de haberlo superado con nitidez

24 octubre, 2023 23:30

Noticias relacionadas

Naturgy ha vuelto a dar un golpe encima de la mesa en el mercado energético. Hace justamente de tres meses, la compañía revisó al alza determinados objetivos de su plan estratégico a cinco años, entre ellos los relativos a los beneficios y los dividendos. Este martes, ha vuelto a dar señales de que el traje que diseñó para el largo plazo a mediados de 2021 se le ha quedado ya demasiado pequeño.

El presidente Naturgy, Francisco Reynés, anunció durante la presentación de los resultados anuales de 2022 que a partir de entonces el mercado sólo tendría referencias de las cuentas de la empresa cada semestre, en lugar de la habitual periodicidad trimestral, aprovechando la posibilidad que ofrece la remozada normativa societaria.

Sin resultados, con previsiones

A tal efecto, Naturgy no ha dado a conocer detalles sobre su desempeño hasta septiembre. Pero sí ha comunicado una mejora de estimaciones para el año en curso, que incluye una considerable mejora del resultado operativo (Ebitda), hasta los 5.400 millones de euros, un 8% más que el objetivo marcado anteriormente para 2023, que no había trascendido hasta ahora. 

La referencia que tenía el mercado hasta la fecha era la de 2025, cuando culmina el plan estratégico en vigor. Tras la actualización del programa al paso por su ecuador, la meta de Ebitda quedó fijada en 5.100 millones de euros para esa fecha. 

La comparativa ya hablaría de un objetivo superado con dos años de antelación, con una diferencia cercana al 6%. Pero esta distancia se multiplica por más de dos si se tiene en cuenta la estimación que recogía el plan original, que hablaba de un resultado operativo en torno a 4.800 millones de euros. 

De modo que si se cumplen las previsiones aprobadas en la última reunión del consejo de administración de Naturgy, el rendimiento de la compañía en 2023 habrá superado en un 12,5% el previsto para 2025.

Respaldo bursátil 

Señales de un plan claramente superado que no pasaron desapercibidas para el mercado. Las acciones de Naturgy subieron el martes un 3,09% y fueron las más revalorizadas de un Ibex 35 que volvió a cerrar en negativo, aunque de forma moderada (-0,22%).

Las sensaciones en torno a la compañía son positivas desde hace unos días; sólo así se explica que se cuente entre los tres únicos valores del selectivo que presenta un balance positivo (+1,6%) durante la última semana, que ha sido muy complicada para los principales mercados de renta variable, afectados por las perspectivas de crecimiento en 2024 y las tensiones geopolíticas.

Un plan conservador

Esa evolución contrasta con la del Ibex 35, que se ha dejado en ese mismo periodo un 3,5%, el peor comportamiento entre los referentes bursátiles europeos.

En su día, el plan estratégico de Naturgy fue considerado por los mercados de tinte algo conservador. Aunque por entonces no se había iniciado la guerra en Ucrania, la compañía diseñó su hoja de ruta en un entorno muy volátil de precios y con numerosas incertidumbres, entre las que se encontraban las regulatorias, que apenas se acaban de resolver en el ámbito de la Unión Europea

Francisco Reynés, presidente ejecutivo de Naturgy / EFE

Francisco Reynés, presidente ejecutivo de Naturgy / EFE

Se trataba de una hoja de ruta con amplio margen para la revisión, aunque los hechos han superado ampliamente las expectativas. 

Por entonces, estaba pendiente la estructura accionarial resultante de la opa parcial lanzada por el actual accionista IFM, que aún no se había resuelto; tampoco se había planteado el denominado 'proyecto Géminis', consistente en la escisión de la compañía en dos sociedades con idéntico reparto de capital y que aglutinen, por separado, los negocios regulados y liberalizados de Naturgy.

Un futuro más despejado

Algo más de dos años después, algunas incertidumbres permanecen pero el panorama aparece algo más despejado; al menos, lo suficiente para haber dejado atrás un plan estratégico confeccionado en tiempos de nadar y guardar la ropa. Queda por ver si se sigue enmendando o si Naturgy opta por adelantarse y confeccionar uno prácticamente nuevo.

Buena parte de ese futuro dependerá de Géminis. Por lo pronto, la ministra de Transición Ecológica en funciones, Teresa Ribera, volvió a pronunciarse en contra en una entrevista publicada en los últimos días por Expansión. El panorama político interno es otra de las incógnitas a despejar.