Egara pugna por las ambulancias de Castilla tras tropezar en Aragón y Andorra
La transportista catalana, con los hombres de David Madí al frente, se lanza a por otro macrocontrato público con 737 millones de presupuesto
11 agosto, 2022 00:00Buscar más mercado sin consolidar el actual. Esto es lo que está haciendo la catalana Ambulancias Egara, que se ha presentado a cuatro lotes del megacontrato de ambulancias de Castilla y León pese a tener graves problemas en Aragón, donde está en franca batalla con su socia en la unión temporal de empresas (UTE), con problemas como el impago de nóminas, y en Andorra, donde no ha podido comenzar a operar por falta de vehículos.
Es lo que alertan fuentes del sector sanitario, que dan detalles sobre la nueva apuesta de Egara, que cambió de empresa familiar catalana en 2016 a pasar a estar controlada por directivos vinculados al empresario independentista David Madí, a la sazón ex secretario de Comunicación del Govern con CiU. Con este equipo, la transportista se expandió a Aragón y Andorra y se ha lanzado ahora a por cuatro lotes del concurso castellano-leonés: el 1, de Ávila; el 5, Salamanca; el 6, correspondiente a Segovia y el 8, a Valladolid.
Problemas en Aragón.
Este medio ha preguntado a Egara por sus planes para Castilla y León, sin recibir respuesta. Otras fuentes del sector sí han alertado de que que cualquiera que fuere la estrategia empresarial de la catalana, esta no llega a Castilla con buen currículum. "En Aragón acaba de retrasar el pago de nóminas de julio, y no es la primera vez, y tiene problemas para cumplir los pliegos y ahora busca expandirse a otra autonomía", alertan.
En efecto, la unión temporal de empresas (UTE) que controla el transporte sanitario no urgente de Aragón, y que forman Egara y la vasca Ambulancias Maiz, ha retrasado la remuneración mensual a sus 325 empleados. Ello cabalga sobre un acta pasada de la Inspección de Trabajo, de carácter "grave", que alertó de lo propio en 2021. Cabe recordar que la UTE, que controla la catalana por una maniobra que realizó con Fernando Izagirre, el exdirectivo de la DYA imputado por el presunto saqueo de la oenegé en el País Vasco, incumpliría también los pliegos de condiciones, según dos sindicatos.
Máculas en Andorra y Cataluña
Todo ello está sobre la mesa del Servicio Aragonés de Salud, que no ha tomado cartas en el asunto, de momento. Pero es que el plan de expansión de los hombres de Madí en Egara, que son Fermí Ferran --ex director de seguridad de la multinacional del juego Cirsa-- y Álex García --ex jefe de seguridad del FC Barcelona-- presenta otros lunares. En el propio territorio de la firma de Terrassa, Cataluña, la explotación de los tres lotes del gran contrato de ambulancias de 2015 arrancó con problemas, explicó este medio en 2016. Sin solución de continuidad, apenas un año después, Ambulancias Lafuente, la socia de la empresa de Ferran y García en la UTE catalana implosionó, en un proceso controvertido que muchos comparan con el que ahora se produce en Aragón.
En Andorra, donde Egara ha entrado este año de la mano de Ambulancias Valira y Carlemany para operar el transporte programado, ha sido incapaz de comenzar la prestación, pese a que bregó por el contrato público en los tribunales. Aduce falta de vehículos para retrasar su llegada hasta el 1 de septiembre.
"Territorio HTG"
Sea como fuere, el intento de la compañía catalana de ganar mercado en Castilla y León plantea otras dificultades externas. Lo explican directivos del sector, que recuerdan que la comunidad central es "territorio HTG", el mayor operador de transporte sanitario de España, que nació de la fusión entre Ambuibérica y Emeru. "Se trata de colocar una pica en terreno rival", insisten las mismas fuentes. Algo que, sostienen, sería complicado por "la dispersión de las zonas en liza", lo que impediría generar sinergias.
Sea como fuere, para la catalana el interés es estratégico, pues conllevaría un incremento de facturación y el dominio de una plaza que ahora le es hostil. Sin perjuicio de la --hasta ahora-- errática gestión en Aragón y Andorra.
Los hombres de Madí toman la compañía
Un desempeño que, por bien que polémico, es netamente expansivo. Desde la entrada de los commendatores de David Madí en Ambulancias Egara, la firma antaño familiar se ha expandido con velocidad. Antes, el empresario independentista tuteló personalmente, indican fuentes conocedoras, la irrupción de sus hombres en la transportista sanitaria. En las negociaciones para decantar la que era una empresa familiar con 1.200 trabajadores participó también desde fuera Joan Albert Arqués, director general de la constructora Benito Arnó y detenido en 2017 en la Operación Pika por su presunta vinculación con una rama del caso 3% de financiación ilegal de CDC.
Como detalló Crónica Global, la toma a derribo de Ambulancias Egara involucró a un directivo andorrano del sector de la seguridad, Joan Diego Gallardo, que puso en contacto a las dos partes: a la familia Simón, los celebrados expropietarios de Egara, y a Madí y a sus hombres. No obstante, el ejecutivo subraya que solo actuó haciendo labores de "comercial a puerta fría", sin conocer "lo que pasó después". Lo que pasó después es que Madí, por medio de Ferran y sobre todo Álex García, fagocitó a los Simón y se hizo con el control de la firma, que apuntaló con directivos de otros sectores, como la seguridad privada y el juego. Antes de acometer la citada expansión que hoy tiene un nuevo capítulo en Castilla y León.