Los pisos de Mandarin Oriental en Barcelona se vuelven a retrasar
Las residencias de superlujo se entregarán a final de año, cuando su promotor esperaba colocarlas en el arranque de 2022
22 abril, 2022 09:50Los pisos de superlujo de Mandarin Oriental en la Torre Deutsche Bank de Barcelona se vuelven a retrasar. Las residencias de la cadena hongkonesa en la Ciudad Condal, las primeras de su tipo, se entregarán a final de año, cuando la comercialización preveía entregarlas en el arranque de 2022.
Es lo que se desprende de documentación interna del proyecto a la que ha accedido este medio. Según la comercializadora, Savills, las unidades premium estarán "disponibles para mudarse a finales de 2022". Ello es relevante, porque se trata del enésimo retraso en una promoción que marcará un antes y un después en el inmobiliario de la capital catalana.
Pandemia y atonía del mercado
Como explicó este medio, el fondo de inversión KKH de Josep Maria Farré vio como el mercado daba una tímida acogida a los productos exclusivos tras la fase dura de la pandemia del coronavirus.
La atonía de los compradores llegó después de que la obra sufriera retrasos por el impacto de la crisis sanitaria, que retrasó los trabajos de transformación del rascacielos, que se eleva en la confluencia del Paseo de Gracia y la avenida Diagonal.
Casi dos años
Con ello, las Mandarin Oriental Residences pasaron de entregarse a principios de 2021 a "finales de 2022", como admite la comercializadora de la inversión.
La demora está afectando también a los bajos de la promoción, que ocupará Dior salvo sorpresas, avanzó Crónica Global en exclusiva.
Edificio 'maldito'
Los obstáculos en el lanzamiento de la que es la promoción más exclusiva de Barcelona, con precios de 2,5 millones de euros hasta los nueve millones para las cuatro penthouses de la azotea, significa otro capítulo en una inversión que comenzó con mal pie.
KKH compró el edifcio en 2014 para transformarlo en un hotel de la marca Four Seasons, pero el gobierno municipal de Ada Colau vetó el proyecto al verlo especulativo. Finalmente, la cadena canadiense se marchó a Madrid y Mallorca ante el desplante en Barcelona. Por su parte, el fondo transformó la obra en residencial, hasta ahora.