Xavier Vendrell usó el Hospital Plató para buscar contratos públicos

Lo han denunciado directivos del sector y lo ha podido corroborar este medio en conversación con fuentes cercanas a este área de asistencia e información del Registro Mercantil. Vendrell se valió del hospital concertado con el sistema público para dar la vuelta a la Unidad, que inicialmente buscaba investigar en el campo del daño cerebral. La reorientó para conseguir dinero público para su red de empresas médicas, que cuelgan del holding Biomek Group.

"Utilizó sus contactos: quería contratos públicos"

Las fuentes conocedoras del proceso aportan una cronología de los hechos. La UDCA de Hospital Plató arrancó en 2005 para investigar el daño cerebral y los avances médicos en este campo. Se situó en las plantas segunda, tercera y última del hospital concertado con el Servicio Catalán de Salud (CatSalut). La componían profesionales de prestigio y contaba con el aval de empresas del sector y Mutua Universal. El departamento trabajó durante unos años, y algunos portales web --como por ejemplo este-- se hicieron eco de la iniciativa. Hasta que llegó Vendrell en 2009, señalan los mismos interlocutores.

"Lo cambió todo. Entró en el accionariado de la empresa y reorientó la unidad. Era muy claro cuando hablaba. Era quien era, exconsejero de Gobernación [con el tripartito], y venía a por los contratos del Instituto Catalán de Evaluaciones Médicas (ICAM) de la Generalitat de Cataluña", explican voces cercanas al proceso. ¿Qué hizo Vendrell? "Sucesivas ampliaciones de capital para diluir la participación de sus otros socios en la firma de forma paulatina. Se quedó con la sociedad y con su operativa en Hospital Plató", explican.

Nueve años en Plató

La sociedad que adquirió del centro sanitario es Certificación de Lesiones España SL, una mercantil que cuelga de Biotek Group y que buscaba, en efecto, licitaciones públicas. Las consiguió, no sin antes enfrentarse a Invalcor, otra firma especializada en evaluaciones médicas que el sector sitúa cerca de la antigua CiU. De hecho, la empresa de Xavier Vendrell logró hacerse con uno de los grandes concursos del ICAM de la Generalitat de Cataluña, antes de que su rival le llevara ante el Tribunal Catalán de Contratos y revirtiera el procedimiento. El fiscalizador detectó precios demasiado bajos.

Es en este momento de pugna por una contrata pública cuando tuvo lugar la ya célebre grabación telefónica en la que el empresario independentista amenaza con "enviar a unos [sicarios] colombianos" a su competidor. La otra empresa era Invalcor y él operaba todo este tiempo desde Hospital Plató. Pasó allí ocho años, hasta 2018, cuando se mudó a la actual sede de CardioCerc, otra empresa del ramo sita en Barcelona. Sigue allí, según el Registro Mercantil. Por el camino, la Autoridad Catalana de la Competencia abrió expediente a la empresa de Xavier Vendrell por, supuestamente, pastelear las adjudicaciones, tal y como informó este medio. Y, también, durante este lapso de tiempo los médicos que habían fundado la UDCA se marcharon, decepcionados.

La gerencia le tolera, el sector; no

El paso de Xavier Vendrell por Hospital Plató acabó en 2018, cuando Certificación de Lesiones España SL --nombre que provoca hilaridad a los que trataron con el nacionalista-- cambió de sede. ¿No sigue el empresario independentista en el hospital concertado? "Certificación de Lesiones ya no está aquí", confirman desde la recepción del hospital barcelonés. Por su parte, el departamento de Comunicación de Plató no ha contestado a los requerimientos informativos de este medio.

La gerencia del doctor Jordi Pujol Colomer prefiere guardar silencio, pero el sector sí habla. "La Unidad de Daño Cerebral no pendía de la dirección general del hospital, sino de la pata médica. Pero es impensable que la cúpula no supiera que Xavier Vendrell había desembarcado allí", explican. Las mismas fuentes alertan de que no fue el equipo del doctor Pujol Colomer quien echó a Vendrell, sino el sector. "La gente no quería trabajar con él. Sabían con quién estaban tratando", han explicado.

Opacidad y fusión

Vendrell y Certificación de Lesiones se marcharon de Hospital Plató en 2018. Entraron en Corporación Fisiogestión, tan vinculada a CiU que fue apoderado de la sociedad Josep Maria Padrosa, exdirector del CatSalut con Artur Mas al frente del Govern. Y, en el ático, Assistència Sanitària. Por el camino, el político republicano había desmantelado, lo quisiera o no, la novedosa Unidad de Daño Cerebral. También había dejado a accionistas minoritarios impagados, en un proceso de reclamación que aún sigue. Con esta mácula en la hoja de servicios se presta ahora Hospital Plató a fusionarse con el Hospital Clínic Barcelona, el mejor de Cataluña.

Y no es la única. Las due diligences que ha elaborado Deloitte y que son previas a la integración han aflorado una cadena de irregularidades en la gestión de este hospital mediano que da servicio a 150.000 personas en la zona alta de Barcelona, anomalías de las que ha dado cuenta este medio. No obstante, Plató, que vive en un 92% del concierto público, prefiere no aportar detalles sobre la operación. Tampoco lo da la otra parte, el Hospital Clínic, pese a que en los planos urbanísticos del proyecto figura que Barnaclínic, su parte privada, se instalará en terrenos colindantes a su nuevo socio. Asimismo, opta por la discreción el CatSalut, pese a que ambos hospitales viven de los conciertos públicos con este organismo.