Desabastecimiento e inflación contra Sánchez
Baldas de supermercados vacías y cierre temporal de fábricas. Los camioneros se crecen. Feijóo propone llamar al Ejército. La carta a Mohamed VI, en 'El País'. Los costes del "procés"
23 marzo, 2022 08:11Trompetería mediática contra el Gobierno. La huelga de los transportistas provoca cierres temporales y lineales vacíos en los supermercados. El fantasma del desabastecimiento planea sobre la economía española. Los camioneros no aceptan la propuesta del Ejecutivo, cuya ayuda de quinientos millones de euros consideran una limosna humillante. En paralelo, el presidente Pedro Sánchez intenta convencer a los países de la UE de la necesidad de desacoplar la luz del gas para forzar una contención del recibo y aplacar la inflación. Y a todas estas, todos los partidos cargan contra el giro marroquí en el expediente del Sáhara Occidental.
Según la prensa de orientación conservadora, el paro del transporte y el cambio en política exterior acorralan a un Gobierno en horas bajas. Las estampas de supermercados con las baldas vacías menudean en las portadas. Los convocantes del paro se crecen ante los efectos de sus protestas.
En Vozpópuli aseguran que "la falta de suministros es generalizada". Aluden a las plantas de procesado. "Empresas como Calvo, Cuétara o Dcoop (antigua Hojiblanca) han paralizado parte de sus fábricas, mientras que Danone o Heineken prevén hacerlo esta misma semana", abunda un sumario del texto que firma Nerea San Esteban: "Es un lunes cualquiera de marzo, pero no para fábricas como la de Calvo ubicada en Carballo (La Coruña), que ha tenido que paralizar su actividad. La falta de suministro a la planta y las dificultades para distribuir los productos al punto de venta han hecho que esta fábrica, la única del grupo en España que se dedica a las conservas de pescado (atún, sardina o mejillón), haya detenido la cadena. La razón: la huelga de transportes convocada en España desde hace más de una semana. La situación de Calvo no es excepcional. Fábricas como las de Azucarera, Cuétara o Dcoop (antigua Hojiblanca) ya han paralizado también su actividad, mientras que otras grandes empresas, como Danone o Heineken --que fabrica marcas como Cruzcampo o El Águila--, se preparan también para paralizar su producción esta semana. "Si la situación continúa así, será imposible servir los productos a las superficies comerciales, bares y restaurantes, y aprovisionarse de materias primas, debido a los violentos piquetes que impiden las normales operaciones de la compañía", aseguraba la cervecera".
Y: "El gigante de los yogures, sin embargo, iba un paso más allá, y acotaba el plazo, dando por hecho que tendrían que cerrar las fábricas ya este miércoles: "En caso de no alcanzarse una solución de forma inmediata, Danone advierte de que en el plazo máximo de 24 horas se verá obligado a interrumpir de forma temporal su actividad tanto en sus cuatro plantas en España de productos lácteos, como en las tres de agua mineral natural". Para la compañía, "la inaudita situación de inestabilidad y el agravamiento de los paros ya están comenzando a afectar al aprovisionamiento de materias primas esenciales para sus productos como leche entera o nata"".
Los camioneros tienen poco que perder. De hecho, aducen que les sale más a cuenta estar parados que arrancar el camión. Según La Razón, "El 60% de los transportistas en huelga está en quiebra técnica". Así lo explica Roberto L. Vargas: "Que abandonen toda esperanza aquellos que piensen que una posible rebaja en el precio de los carburantes pueda terminar con la huelga de los transportistas. Los convocantes de los paros no darán su brazo a torcer hasta que el Gobierno no les garantice por escrito que no van a volver a trabajar por debajo de coste. Porque, ahora mismo, con el gasóleo en el entorno de los 1,8 euros, aseguran que pierden dinero. Y mucho. Según afirman fuentes de la Plataforma Nacional de Defensa del Sector del Transporte en declaraciones a La Razón, «ahora mismo, el 60% de las empresas paradas están en quiebra técnica». Unas 60.000 pequeñas y medianas compañías que, aseguran, llevan más de un mes poniendo dinero de su bolsillo. «Y no puede ser que trabajar nos cueste dinero», añaden".
Continúa la pieza: "Desde la Plataforma no entienden que el Gobierno no quiera sentarse a dialogar con ellos e insisten en que los interlocutores con los que negocia «no nos representan porque son los que nos subcontratan a nosotros». Por eso, dicen, sus acuerdos no les valen. Ellos, dicen, no quieren que les bajen el precio del gasóleo. O que baje sólo. Porque, según comentan, “el gasóleo tendría que bajar entre 70 y 75 céntimos para cubrir gastos. Y eso ahora parece inviable”. Tampoco les valen los 500 millones de euros comprometidos por el Ejecutivo para bonificar el gasóleo porque, según dicen, la experiencia de cómo se han repartido este tipo de subvenciones en otras ocasiones les lleva a pensar que “acabarán en los bolsillos de las empresas grandes”. La llave para acabar con las movilizaciones es la garantía de no trabajar a pérdida. «Y no vamos a arrancar mientras no lo tengamos por escrito», advierten".
En Público indagan acerca de las motivaciones políticas que los camioneros niegan. De un texto de Eduardo Bayona: ""Somos camioneros, no políticos. Nos han llamado de todos los partidos para ponerse a nuestro lado, pero nosotros no queremos meternos en política", sostiene Hernández, que califica de "rotundamente falso" que cuenten con el apoyo formal de alguna formación política. No obstante, el énfasis con el que jalea el paro la ultraderecha ha despertado suspicacias hasta el punto de que parlamentarios como Gabriel Rufián, de ERC, señalan a Vox como "convocante" de las protestas".
El nuevo líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, debuta en las labores de jefe de la oposición en medio de un escenario crítico para el Gobierno y con un decálogo para paliar los efectos de la huelga de transportistas. Según El Mundo, "plantea a Sánchez que el Ejército garantice el suministro de alimentos perecederos y medicinas". Escribe Juanma Lamet: "Alberto Núñez Feijóo ha desgranado este martes un plan nacional con "diez medidas inmediatas para detener el cierre de empresas y las enormes pérdidas" que están causando la carestía energética, la crisis de suministros y el paro de una parte del transporte de mercancías. De esta manera, el futuro líder del PP ha comenzado a hacer oposición nacional desde el Parlamento gallego, donde ha comparecido a petición de la oposición. (...) Del decálogo de propuestas del barón gallego ha descollado una: un Plan de contingencia para garantizar el suministro de productos básicos a la población, en el que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad escolten a los camiones que transportan alimentos perecederos. "Y si esto no es suficiente para garantizar corredores seguros, en alimentos perecederos que nos ayude el Ejército para garantizar que la leche, el pescado y la carne sale de sus lugares de origen hasta el lugar de destino". Además, fuentes de la Xunta añaden que Feijóo reclama también que los productos sanitarios se protejan de igual manera: si es preciso, con el Ejército. No en vano, el gobierno regional gallego ha llegado a un acuerdo con los transportistas para establecer "corredores seguros" para los alimentos perecederos, según fuentes del Ejecutivo autonómico".
En El Confidencial informan de que "España prepara medidas 'adicionales' contra la inflación ante el temor de pinchar en la UE". La pieza viene con las firmas de Iván Gil y Álvaro Villalobos y destaca que "nada garantiza en estos momentos el acuerdo que busca España, junto a los países del sur, con el respaldo de Francia y Bélgica. Ni mucho menos que pueda ser inmediato. La oposición de Alemania y Holanda amenaza así con frustrar los planes de Sánchez o al menos rebajarlos considerablemente. Un escollo que no ha logrado salvar el presidente, pese al ambicioso 'tour' en el que logró la sintonía de Francia, Portugal, Italia, Grecia, Rumanía o Eslovaquia. Ante el temor de que fracase el plan A del Gobierno, en Moncloa comienzan a argumentar que todas las opciones están sobre la mesa para combatir las consecuencias económicas de la guerra. Se preparan medidas "adicionales" para contener los precios, indicaron fuentes gubernamentales si la respuesta de la UE es insuficiente. Las propuestas de partida de España son ambiciosas: además de desacoplar los precios mayoristas del gas y los de la electricidad (“hay que atajar esta toxicidad que supone el precio del gas sobre el precio de la electricidad”, insiste Moncloa), se busca impulsar la oferta de renovables, mejorar la interconexión de España con el resto de Europa, empezando por Francia, y acordar compras conjuntas de gas por parte de la UE en el mercado mayorista".
En El País desvelan el contenido de la carta de Sánchez a Mohamed VI, una misiva que Rabat difundió cuatro días después de que llegara a manos del monarca alauita. La crónica es de Miguel González, quien escribe : "El párrafo clave de la carta es el siguiente: “Reconozco la importancia que tiene la cuestión del Sáhara Occidental para Marruecos y los esfuerzos serios y creíbles, en el marco de Naciones Unidas, para encontrar una solución mutuamente aceptable. En este sentido, España considera que la propuesta marroquí de autonomía presentada en 2007 como la base más seria, creíble y realista para la resolución de este diferendo”. El presidente Sánchez apuntaba así a una solución para el Sáhara en los contornos fijados por la ONU y siempre con esa fórmula “mutuamente aceptable”".
Continúa González: "Los términos “esfuerzos serios y creíbles” y también los calificativos de “seria, creíble y realista” referidos a la propuesta de autonomía para el Sáhara Occidental que Marruecos presentó en 2007, figuran en las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU, incluida la última, de octubre del año pasado. La diferencia es el adverbio “más”; es decir, que España expresa su preferencia por la fórmula autonómica frente al referéndum de autodeterminación".
La guerra en Ucrania ha pasado a un segundo plano cuando se cumplen 28 días del comienzo de la invasión. La mayoría de los medios aceptan la versión de que Putin se ha metido en un charco inmenso. Es más, el ejército ucraniano habría pasado a la ofensiva mientras que en el Pentágono aseguran que Rusia ha perdido el noventa por ciento de su potencial bélico. "Ucrania desafía a Rusia y reconquista un enclave vital para el suministro de Kiev", es uno de los titulares destacados del Abc. De la nota que firma Mikel Ayestarán: "Kiev volvió a congelarse con un toque de queda de 35 horas que vació sus ya casi desiertas calles. Soldados y voluntarios de las unidades de la Defensa Territorial, la milicia encargada de los puestos de control, eran los únicos que podían moverse. Fue el segundo toque de queda en las últimas dos semanas, el tercero desde que el 24 de febrero Rusia lanzara su ataque. Los ciudadanos respetaron las órdenes con marcialidad y volvieron a quedarse en sus casas, cerca de los búnkeres, en una jornada marcada por el tono grave de las explosiones en el norte de la ciudad y las detonaciones puntuales que sacudieron barrios cercanos al centro, como el de Obolon, donde un vecino perdió la vida".
Sigue el parte: "Los medios locales informaron de una contraofensiva ucraniana para alejar a los rusos del frente norte, lo que explicaba el rugido constante del cielo en esa parte de la ciudad. Estas fuentes aseguraron que las tropas enemigas situadas en Irpín, Bucha y Hostomel habrían quedado aisladas por el ataque ucraniano y con las vías de suministro cortadas. El furor causado por este supuesto golpe a los rusos se calmó cuando se difundieron imágenes captadas por satélite, en las que se podía ver toda una batería de artillería que Rusia ha desplegado en Irpín, un movimiento que puede ser clave para lanzar una guerra desgaste contra Kiev. Pero el Gobierno de Zelenski había dado ayer un golpe de efecto al apoderarse y hacer ondear su bandera en Makarov, una pequeña localidad a las afueras de Kiev y en una ruta clave para hacer llegar avituallamiento a la capital. La guerra, que al comienzo parecía que podía ser relámpago, se estanca, y Rusia apuesta por una estrategia: castigar ciudad por ciudad y desgastar la defensa rival".
De vuelta a las cuitas "domésticas", el consejero de Enseñanza de la Generalitat, el republicano Josep Gonzàlez-Cambray, ha venido a decir que la sentencia del 25% de castellano en clase que debería estar aplicada antes del lunes es papel mojado, puro humo. "La Generalitat no aplicará porcentajes en el castellano como pide la sentencia", constata La Vanguardia. La pieza es de Carina Farreras y arranca así: "El Govern abrirá una audiencia pública de un proyecto de decreto de régimen lingüístico, que aún no se conoce y que tardará entre 8 y 12 meses para entrar en vigor, para combatir la sentencia del 25% del castellano, cuyo plazo de ejecución finaliza este viernes 25 de marzo. Además, apoyará la manifestación a favor de la inmersión, convocada para hoy, a las 8.45h, en un acto frente al Parlament de Catalunya en el que comparecerán todos los consellers, además del presidente del Govern de la Generalitat, y diputados que quieran sumarse. La manifestación también se convoca por la dejadez demostrada por el Govern en este tema".
Continúa el texto: "El conseller de Educació, Josep Gonzàlez-Cambray, desveló ayer que el viernes sí responderá al Tribunal Superior de Justícia de Catalunya (TSJC), que le pide concreción sobre la aplicación de, al menos, el 25% de castellano en las escuelas, y una nueva redacción de los proyectos lingüísticos de los centros que no excluyan esta lengua como vehicular. Cambray no dará una instrucción así, sino que informará que está trabajando “un nuevo marco normativo” en vías de ser consensuado social y políticamente, que defiende la enseñanza de las lenguas no por “proporciones” sino por su dominio al final de la educación, y de acuerdo a la realidad sociolingüística de la zona. “Lo que hacemos es dar respuesta al tribunal trasladándole el desarrollo de un nuevo marco normativo con criterios pedagógicos”, aseguró. Acompañará la documentación con estudios y encuestas, como la que presentó el lunes el Síndic de Greuges, sobre el uso del castellano en las aulas, aunque no sea lengua formalmente docente, y la situación de retroceso del uso social del catalán".
O sea que en línea con lo que es costumbre, el Govern hará lo que le rote. El coste de este tipo de prácticas no es menor. Crónica Global abre con este titular: "La inversión extranjera en Cataluña se hunde el 39% en la década del ‘procés’". Firma Raúl Pozo: "El desarrollo del proceso separatista en Cataluña, especialmente concentrado en los últimos diez años, ha tenido un efecto demoledor en la confianza de los inversores procedentes del exterior. Desde 2017, año de acontecimientos como el referéndum ilegal del 1 de octubre y la fallida declaración unilateral de independencia (DUI), la inversión extranjera ha caído el 13,5%, cifra nada desdeñable pero que palidece frente a la registrada en la última década, en la que ha sufrido un desplome del 39,3%. La tendencia contrasta radicalmente con la mostrada por el conjunto de España en este capítulo. Desde 2011, los flujos de inversión bruta provenientes de fuera de las fronteras se han incrementado el 128%; o, lo que es lo mismo, se han multiplicado casi por 2,3. (...) En términos absolutos, la inversión llegada desde el exterior se ha desplomado cerca de 1.950 millones de euros en Cataluña en la última década, la que un buen número de expertos económicos denominan como la “década perdida”".
23 de marzo, santoral: José Oriol, Toribio de Mogrovejo, Fingar, Gualterio, Otón de Ariano, Pedro Higgins y Rebeca del Himalaya.