Calviño rescata a Sánchez y Lastra en la picota
Los movimientos de Moncloa soliviantan a los medios, que censuran el pacto con Bildu y que se mantuviera en secreto hasta después de la votación. Nadia Calviño forzó la rectificación
22 mayo, 2020 08:33Hay una cierta y rara unanimidad crítica en los medios respecto a las maniobras, movimientos y escorzos del sanchismo gobernante, cuya última figura gimnástica ha acabado como el rosario de la aurora. El apaño a tres bandas entre el PSOE, Podemos y Bildu, con las firmas de Adriana Lastra, Pablo Echenique y Mertxe Aizpurua, ha estado a punto de reventar al Gobierno, al PSOE, el diálogo social y casi la legislatura. Todavía no se ha alcanzado un consenso sobre el volumen de los daños, pero la credibilidad de Pedro Sánchez ha quedado tocada, según conceden medios poco dados a lecturas dramáticas con el Gobierno como El País y La Vanguardia.
El temor a perder la votación de la prórroga del estado de alarma, la autonomía de Lastra, los errores de cálculo de Carmen Calvo, la desconfianza respecto a Ciudadanos, la presión de Pablo Iglesias y la descoordinación entre Moncloa y el PSOE son algunos de los factores que se barajan en las crónicas para explicar cómo se hizo un pan como unas tortas. La antedicha Lastra ha quedado retratada. En esta crisis dentro de una crisis emerge la figura de la ministra de Economía, Nadia Calviño, que habría puesto pies en pared y hasta amagado con la dimisión. La titular de Trabajo, Yolanda Díaz, también fumaba en pipa. En el otro extremo, Iglesias pide el cumplimiento del pacto con Bildu y Arnaldo Otegi exhibe el papel mientras su partido se niega a condenar los ataques y amenazas abertzales a la líder socialista vasca Idoia Mendía.
En La Razón son Toni Bolaño y Ainhoa Martínez quienes dan cuenta del terremoto: "Conmoción en Moncloa. El PSOE se enfrenta en las últimas horas a uno de los momentos políticos más comprometidos desde que llegó al poder tras la moción de censura. Un solo adjetivo, 'integral' –referido a la derogación de la reforma laboral de 2012–, en un acuerdo oculto a tres firmas con Bildu y Unidas Podemos, ha generado un malestar y un revuelo que lo abarca todo. Enfado en el Partido Socialista; enfado en los ministros que desconocían el contenido del mismo; enfado en La Moncloa que ignoraba el 'detalle concreto'; enfado en la patronal que sacó un duro comunicado y se levantó de la mesa de diálogo social; enfado en los sindicatos; enfado en el País Vasco, porque daba protagonismo a Bildu el día después que la organización abertzale no condenara el ataque al domicilio de la secretaria general, Idoia Mendia, y a dos meses de las elecciones; enfado entre los socios que apoyaron la prórroga del estado de alarma: Ciudadanos a los que no gustó ni un pelo este acuerdo de última hora con los herederos de Batasuna y enfado en el PNV. Se logró una unidad inusitada en estos tiempos. Un consenso, eso sí, en contra".
Sigue la nota: "Desde Moncloa se apunta en una única dirección: Adriana Lastra. La portavoz del PSOE en el Congreso es señalada por todos como la responsable de un acuerdo inasumible en fondo y forma. En el fondo porque es imposible derogar en su totalidad la reforma laboral; en la forma, porque se tejió a espaldas de partido y Gobierno y se le otorgó con la rúbrica una oficialidad que no se deseaba. Hasta hace meses, Sánchez renegaba siquiera de negociar nada con Bildu. Lastra comunicó al presidente su intención de alcanzar un acuerdo con la formación abertzale sobre la reforma laboral. Nada más. Cuando en Ferraz y en Moncloa se leyó el texto no daban crédito. El ambiente se enrareció de inmediato cuando se hizo público".
En El País son tres las firmas para la crónica del desconcierto. Carlos E. Cué, Javier Casqueiro y Elsa García de Blas suscriben la pieza: "Ahora casi todos en el PSOE —no así en Unidas Podemos ni mucho menos en EH Bildu— ven claro que fue un error grave. Y en La Moncloa están esforzándose con múltiples contactos a todos los niveles para sacar los pies del charco. El presidente, Pedro Sánchez, llamó este jueves por la mañana a los máximos responsables de la patronal y de los sindicatos para intentar reconducir la situación. Pero mientras se estaba fraguando el pacto con la izquierda abertzale, sus protagonistas lo veían de manera muy diferente".
Sigue el texto: "Para ellos, sobre todo los socialistas, encabezados por la portavoz, Adriana Lastra, apoyada desde La Moncloa por la vicepresidenta Carmen Calvo y con respaldo del presidente —la primera es una de sus colaboradoras más cercanas— lo único que contaba era evitar una derrota parlamentaria en la prórroga del decreto de alarma de consecuencias jurídicas y políticas imprevisibles. 'Ahora todos se preguntan por qué arriesgamos tanto si los cinco votos de Bildu no eran necesarios [la votación acabó con 177 síes, 162 noes y 11 abstenciones]. Pero no se puede juzgar una votación por cómo acaba. Tienes que estar ahí para entenderlo. Y hasta el último minuto temimos que podíamos perder. Había que asegurar como fuera todos los votos y evitar que subieran los noes. Ahora que ganamos cómodamente parece fácil. ¿Pero alguien se imagina qué hubiera pasado si perdemos?', señala una persona al tanto de las negociaciones".
La pieza incluye apuntes críticos: "Ahora varios ministros se llevan las manos a la cabeza. Ninguno de ellos lo sabía. Es el estilo del núcleo duro de Sánchez, siempre criticado en privado como origen de muchos de los errores y rectificaciones del Gobierno. Las decisiones se toman entre poquísimas personas con un secretismo que suele jugar malas pasadas. Ni siquiera se consultó a la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, de Unidas Podemos, que lleva el diálogo social y prepara la contrarreforma laboral. Tampoco a la de Economía, Nadia Calviño, que montó en cólera en cuanto conoció el acuerdo y presionó exigiendo una rectificación que finalmente llegó al filo de la medianoche. (...) Por si había dudas de que el presidente estaba al tanto de todo, fue él quien reveló la negociación en el pleno. En su réplica a la portavoz de Bildu, sobre las 14.30 horas, agradeció su abstención y le dijo que 'el compromiso de investidura de derogar la reforma laboral permanece indeleble'. Descolocada ante tanta transparencia, Aizpurua hizo notar al presidente que ella aún no había anunciado su postura en la votación. 'Supongo que entonces es porque han aceptado derogar la reforma laboral', le comentó. Aun así, Cs mantuvo su posición".
El editorial del diario de Prisa abunda en la crítica: "En otras circunstancias, tal vez el Gobierno podría minimizar el coste político con una explicación de lo sucedido. Pero esta vez las cosas han ido demasiado lejos y la única manera en la que podría contener la hemorragia política provocada por el acuerdo sobre la reforma laboral en un contexto impropio y con un socio inadecuado es depurando responsabilidades. De no hacerlo con urgencia, será el propio presidente Sánchez el que se arriesgue a perder toda cobertura, llevando al país a una vía muerta institucional cuando lo que requiere es emprender cuanto antes el largo y doloroso camino que le queda por recorrer".
"¿Dónde está la bolita?" se titula la carta del director de La Vanguardia, Jordi Juan, quien escribe: "Aparte del enfrentamiento dentro del Ejecutivo, la aprobación de la última prórroga y la rectificación del PSOE han significado por diversos motivos el enfado del PNV, de Compromís, de EH-Bildu y de ERC, cuatro de los socios de la investidura. Sánchez tiene a todos descontentos. La legislatura no puede funcionar siempre gracias al regate en corto como si estuviéramos en una mesa de trileros. ¿Dónde está hoy la bolita? En un momento dramático como este, el Gobierno necesita emitir un mensaje de confianza y garantizarse un apoyo serio y estable".
Nada más trascender el acuerdo del PSOE con Bildu, el presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, dio por finalizado el diálogo social. Carlos Segovia le entrevista en El Mundo:
"P. Su patronal ha emitido un comunicado durísimo contra el Gobierno por el pacto con Bildu para derogar la reforma laboral, ¿se acabó el diálogo social?
R. El diálogo social está en suspenso hasta que expliquen lo que hay. Cuando voy a una mesa me gusta que las cartas no estén marcadas. Aquí lo están.
P. ¿Por qué las ve marcadas?
R. Porque es gravísimo este pacto en la actual situación económica cuando lo que hay que proteger es el empleo. Crea un problema grave en las empresas y en los trabajadores, que no saben ahora qué va ser de ellos. Mezclar esto con el estado de alarma como han hecho no tiene sentido.
P. ¿Se pierde la confianza empresarial si se cambia ahora la reforma laboral?
R. Por supuesto y la confianza es clave y tanto para las empresas españolas como para las extranjeras que miran a España. La UE , la OCDE, el FMI... Todo el mundo ha dicho que si algo se hizo bien fue gracias a la reforma laboral y que si no, España no habría salido adelante de la crisis anterior. Este juego que están haciendo en pleno coronavirus es muy grave.
P. ¿Juego?
R. Es que encima se están desdiciendo y ahora no sabemos si la derogación es total o parcial. Pero ¡esto qué es!"
Más entrevistas. En El Español, María Vega interroga a la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, quien no es partidaria de la subida de impuestos ni tampoco del pacto con Bildu:
"P. En un momento tan delicado para la economía y las empresas, ¿qué implicaciones tendrá abrir el debate sobre la derogación de la reforma laboral?
R. Estas y otras medidas tienen un marco de negociación, que es el diálogo social. Ahora más que nunca, España necesita un gran acuerdo, tanto económico como social, para salir de la crisis y protegernos del impacto de la pandemia. Los consensos alcanzados en ese marco de interlocución de los gobiernos con los empresarios y los sindicatos --duraderos en el tiempo-- han sido la base de nuestro Estado del bienestar. En todo caso, lo que me ocupa y me preocupa en estos momentos es la desescalada y la vuelta a la normalidad.
P. La reforma laboral ha permitido poner en marcha los ERTE que están siendo efectivos. ¿Defenderá extenderlos más allá del 30 de junio?
R. Estamos en distintos grupos interministeriales abordando el pacto de reconstrucción económica y social. Parte de ese pacto tiene que venir de la mano de las medidas económicas de apoyo a los sectores y por supuesto, en el marco del diálogo social. Espero que en esas mesas se incluya a los sectores que realmente necesitan más tiempo para la recuperación y sin duda, el turismo, la hostelería o el comercio son tres sectores que lo necesitan. Cuanto más ambicioso sea, mejor va a ser recibido por las partes implicadas.
P. ¿Será posible ir de vacaciones en julio?
R. No solo será posible, sino que está habiendo reservas ya. Según el CIS, casi el 60% contestaron que tiene pensado ir de viaje por España. Hay un ánimo en la población española de salir y estamos preparando los destinos para tener la seguridad de que no se van a producir contagios y en caso de que se produzcan, tenemos el sistema sanitario preparado. Ese es un elemento muy importante que otros países no están contemplando".
En El Confidencial se advierte de que la Guardia Civil apunta al médico Fernando Simón en las pesquisas sumariales por el 8M. Es una información de José María Olmo: "La investigación penal sobre la autorización de la marcha del 8M y otras concentraciones en plena expansión del coronavirus apunta a Fernando Simón. Las diligencias de la Guardia Civil han acreditado que el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias del Ministerio de Sanidad manejaba al menos tres días antes de la manifestación del Día de la Mujer datos que evidenciaban la gravedad de la crisis. Pese a ello, no tomó ninguna medida para evitar ese acto multitudinario ni otros que tuvieron lugar ese fin de semana, como un congreso político de Vox en el Palacio de Vistalegre con 9.000 cargos y afiliados y un partido de fútbol en el Wanda Metropolitano ante 60.000 espectadores".
Continúa el texto: "Las pesquisas, dirigidas por el Juzgado de Instrucción número 51 de plaza de Castilla, también apuntalan los indicios contra el delegado del Gobierno en Madrid, el socialista José Manuel Franco, que está imputado en la causa por un presunto delito de prevaricación por haber permitido las aglomeraciones de esos días previos a la declaración del estado de alarma, obviando las alertas del Gobierno autonómico madrileño y de las organizaciones sanitarias europeas y mundiales. Otros altos cargos de la delegación y del ministerio pueden seguir ahora los pasos de Franco, según fuentes próximas al caso".
A todas estas, Pablo Iglesias ha sido designado líder perpetuo y jefe vitalicio de Podemos en una suerte de Vistalegre III más virtual que nunca. Así lo cuenta Alejandro López de Miguel en Público: "Pablo Iglesias ha revalidado de forma indiscutible su liderazgo al frente de Unidas Podemos en la tercera Asamblea Ciudadana Estatal de la formación, conocida como Vistalegre III. El actual vicepresidente segundo del Gobierno se ha hecho con el 92,19% de los apoyos (53.167 votos), de un total del 59.201, de un censo de 516.492 inscritos. Esto supone una participación del 11.5% del total de inscritos, el 27% si se tienen en cuenta únicamente los considerados activos".
Cataluña. Colas para recoger alimentos, gente afectada por ERTE que todavía no ha cobrado un euro, previsiones catastróficas y aumento de sueldo para los altos cargos autonómicos. Barra libre y que corra el champán. De e-notícies: "El salari dels alts càrrecs de la Generalitat s'incrementarà fins a un màxim del 2% després que el Govern hagi inclòs la iniciativa en un decret llei sobre mesures econòmiques i socials per pal·liar els efectes de la Covid-19. El Parlament ha aprovat el text aquest dijous amb l'únic vot en contra del PPC, mentre que Cs, PSC, Comuns i la CUP s'hi han abstingut i JxCat i ERC hi han votat a favor. El capítol IV del decret llei diu que 's'aproven mesures urgents' en matèria de retribucions en l'àmbit del sector públic 'fins a un màxim del 2% respecte de l'exercici 2019'. Aquest augment és el mateix que s'aplica a tots els funcionari i el mateix que el Govern espanyol va aprovar per als seus alts càrrecs".
Posdata: Las mascarillas no son cubrepapadas.
22 de mayo, santoral: Atón de Pistoya, Basilisco de Comana, Julia de Córcega, Joaquina de Vedruna, Lupo de Limoges y Rita de Casia.