ERC busca la "remontada" con el cambio de rumbo de Junts hacia el diálogo
Los republicanos creen que el hecho de que los de Puigdemont se atengan ahora a dialogar valida sus tesis
7 septiembre, 2023 23:30Noticias relacionadas
Pese al batacazo electoral en las pasadas elecciones municipales y generales, desde Esquerra Republicana (ERC) intentan ver el vaso medio lleno. Dirigentes republicanos confían en que el cambio de rumbo de Junts, que ahora se abre a negociar la investidura con el PSOE, puede hacerles lograr una “remontada” ante los futuros comicios autonómicos. En este sentido, fuentes del partido consideran que el hecho de que los de Carles Puigdemont se atengan ahora a dialogar puede dar carta de naturaleza a sus tesis de los últimos años. “El tiempo nos acabará dando la razón”, indican fuentes del partido.
Esta postura explica que, en los últimos días, varios líderes de ERC se hayan atribuido los frutos de las negociaciones entre socialistas y neoconvergentes. Entre ellas la portavoz en el Parlament, Marta Vilalta, quien celebró este jueves que ahora sí Junts deje de poner “palos en las ruedas” y se decante por la vía de la negociación. Algo que el propio Aragonès ha defendido “desde el primer minuto de la legislatura” y que le llevó a conseguir prebendas como los indultos o la derogación de la sedición y la rebaja del delito de malversación.
Una “aparente” elevación de las exigencias
Pese a los exabruptos de algunos de los líderes de Junts y la “aparente” elevación de las exigencias de los últimos días –diciendo que la amnistía es una condición sine qua non para empezar a negociar-, desde ERC creen que se trata de una “escenificación” de un partido que, ahora, pretende transitar hacia la vía del diálogo que tantas veces ha rechazado y criticado. Así, vaticinan que el nuevo discurso “dará la razón” y desautorizará a los que decían que la única forma de avanzar hacia la independencia era mediante un choque de trenes con el Estado.
Asimismo, los republicanos ven similitudes entre la reunión del pasado lunes entre Carles Puigdemont y la líder de Sumar, Yolanda Díaz, con la que tuvo lugar tras las elecciones de 2019 entre Gabriel Rufián y la entonces vicesecretaria general del PSOE, Adriana Lastra. Y es que confían en que el electorado independentista compruebe que ha sido Junts quien se ha acabado acercando a las tesis de los republicanos de intentar hacer valer sus votos en el Congreso de los Diputados.
Así pues, desde ERC son conscientes de la importancia que tienen estos gestos simbólicos en Cataluña a la hora de definir los apoyos electorales, y creen que los movimientos que está realizando Junts en los últimos días no van a pasar desapercibidos ante los votantes indepes.
“Más competitivos” electoralmente
Si bien en el seno de ERC hay quienes, a priori, temen que Junts esté aparentando negociar mejor que ellos situando la amnistía como condición sine qua non para empezar a hablar, también creen que, con el tiempo, la percepción que existirá entre el electorado es que la única forma de avanzar hacia la independencia es ir conquistando espacios mediante la negociación con el Gobierno.
En este sentido, aseguran que, una vez las aguas vuelvan a su cauce tras el contexto poselectoral, ERC volverá a ser “más competitiva” electoralmente, por lo que podrá recuperar posiciones con vistas a unas elecciones autonómicas que se sitúan en febrero de 2025. Los resultados de los últimos comicios, en cambio, demuestran todo lo contrario.
Fricciones con la base 'indepe'
“Aún hay tiempo para la remontada”, confían algunos líderes republicanos, que recuerdan que tienen dos años por delante para intentar capitalizar la acción del Gobierno de Aragonès, algunas alcaldías y la política de diálogo en el Congreso a la que ahora se añade Junts.
Es más, desde sectores de ERC vaticinan también que los neoconvergentes podrían sufrir un cierto desgaste y fricciones con la base independentista, a la que quiso contentar Puigdemont en su conferencia del martes aparentando endurecer sus condiciones para la investidura, en un intento de guiño a la Assemblea Nacional Catalana (ANC) en vísperas de la Diada.