'On The Hoist'. Empire State Building, 1931. Una de las fotografías expuestas en la exposición de Barcelona / LEWIS HINE

'On The Hoist'. Empire State Building, 1931. Una de las fotografías expuestas en la exposición de Barcelona / LEWIS HINE

Artes

Enamorarse de una línea para comprar fotografías

Una exposición en Barcelona recoge, por primera vez en España, instantáneas de Doisneau, Man Ray y Cartier-Bresson cuyo nexo de unión es la fuerza expresiva de la composición

12 julio, 2019 00:00

¿Por qué nos gustan unas fotografías y no otras? ¿Cómo las interpreta el ojo y el cerebro humano para decidir si son bonitas o feas, buenas o malas, únicas o comunes? Mucho se ha teorizado sobre ello y, a pesar de que no existe una respuesta única para este tipo de preguntas, existe un consenso entre los estudiosos y expertos en el arte de la instantánea: el contenido no es nada sin la composición de sus líneas --y viceversa--.

En este aspecto indaga La belleza de las líneas, una exposición que recoge obras de reconocidos maestros de la fotografía, como Henri Cartier-Bresson, Robert Doissneau y Man Ray, pero también capturas de artistas de menor fama pero gran belleza expresiva. Todas ellas pertenecen a la colección Gilman y González-Falla y que visita por primera vez España --en concreto, Barcelona--. 

Varias fotografías expuestas en la exposición de Foto Colectania en Barcelona / CG

Varias fotografías expuestas en la exposición de Foto Colectania en Barcelona / CG

Fotografía emocionante

La pareja que ha hecho posible esta exposición, que se muestra en la sala Foto Colectania hasta el 29 de septiembre, está formada por Sondra Gilman y Celso González-Falla. La colección de este matrimonio comenzó cuando, en los años 70, la mujer compró sus tres primeras fotografías, obra del fotógrafo francés Eugène Atget. Desde entonces, ambos han ido ampliando el fondo documental con una única base: "Lo que buscamos en una imagen es sencillo: debe emocionarnos". 

'The Pale Yellow Cadillac'. Sadie. Portland, Maine. 2010 / CIG HARVEY

'The Pale Yellow Cadillac'. Sadie. Portland, Maine. 2010 / CIG HARVEY

La primera vez que estas obras cruzaron el Atlántico fueron a parar al Musée de l'Elysée de Lausana, en Suiza. Su directora, Tatyana Franck, es una de las comisarias de la exposición que visita Barcelona, en colaboración con la conservadora Pauline Martin. Desde Foto Colectania explican que ambas expertas se enfrentaron a crear esta muestra con la búsqueda de puntos "en común" entre las distintas placas y se dieron cuenta de que, además del gusto de los propietarios, el nexo entre ellas se encontraba en "el aspecto más formal" de la composición fotográfica: la línea. "Es algo que quizá no se mira tanto", reconocen, y sin embargo es base esencial de una buena instantánea.

Rectas, curvas, abstractas

Decenas de obras se concentran en los 500 metros cuadrados que tiene esta sala de exposiciones. La muestra se estructura en tres grupos según el contenido más formal de las fotos que engloba: líneas rectas, líneas curvas y líneas abstractas. El visitante inexperto o principiante puede pensar que el primer grupo puede ser el que menos atracción pueda tener, debido a la seriedad que transmiten las paralelas y transversales. Nada más lejos de la realidad: fotógrafos como Berenice Abbott, Stéphane Couturier, Larry Clark y hasta el mismísimo Cartier-Bresson fueron seducidos por la línea recta. Algunos demostraron la sobriedad de la naturaleza domesticada por los humanos; otros, el efecto profundo de las líneas fugadas; todos supieron plasmarlas en obras únicas.

Fotografías de la zona de líneas curvas de la exposición en Barcelona / CG

Fotografías de la zona de líneas curvas de la exposición en Barcelona / CG

Fotografía de la zona de líneas curvas de la exposición en Barcelona / CG

Las paredes en las que cuelgan las obras curvas se centran, sobre todo --aunque no únicamente-- en la figura humana, ejemplo vivo del movimiento que se transmite en este tipo de líneas, a pesar de la quietud de una imagen. Uno de sus exponentes es Alexander Rodchenko, uno de los impulsores del constructivismo ruso en cuyas fotografías no faltaba casi nunca una representación del pueblo soviético sobreexpuestos a construcciones de la URSS, rompiendo sus ángulos rectos.

Fotografía para 'esconder' la realidad 

¿Cómo fotografiar un objeto para representar la abstracción? En principio puede parecer una contradicción, pero "algunos artistas han buscado deliberadamente enmascarar la realidad", explican desde la organización de esta exposición. La finalidad es sencilla, aunque no tanto su consecución: "enfatizar la fuerza visual de la imagen". O lo que es lo mismo, que la fotografía sea valorada por ella misma y no por el objeto fotografiado. 

Aaron Siskind, Alison Rossiter, Ray K. Merzker... Todos ellos buscaron fórmulas para plasmar lo abstracto en un papel y consiguieron, además, atraer la mirada de Gilman y González-Falla, que añadieron sus obras en la colección. Se recomienda al visitante que asista a esta exposición paciencia, tiempo y, sobre todo, curiosidad. La fotografía es leída de forma diferente por cada ojo que la ve.