Mònica Gallardo, líder de Junts en Sitges
Mònica Gallardo
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Junts está teniendo mal perder en Sitges, donde ganó las elecciones municipales de 2023, pero no logró la mayoría para gobernar. Un año después, su líder, Mònica Gallardo, sigue utilizando una investigación en marcha para tratar de auparse a la alcaldía.
La instrucción del llamado caso Texas, en el que se investigan presuntas subvenciones irregulares a la Taula del Tercer Sector del municipio, deberá aclarar qué pasó. Pero es evidente de que la presunción de inocencia asiste a todo el mundo, cargos electos incluidos.
Hasta nueva orden y salvo decisión judicial en firme, que no ha llegado, nadie en la localidad ha cometido irregularidad alguna. Tendrá que probarse.
Mientras, Gallardo airea la causa e insiste en una supuesta corrupción -que deberá probarse, como cualquier otra- para tratar de asirse al primer plano de la política municipal. Pero la edil se excede. Ayer mismo detectó una supuesta "trama" que alimenta teorías "conspiranoicas", y se enzarzó con el medio de comunicación local, L'Eco, por afirmar con dos testigos que ella conocía las pesquisas policiales antes de que se sustanciaran en una operación en junio de 2023.
El estilo de hacer oposición de la edil juntaire es tosco y recuerda demasiado al resentimiento. Más le valdría a la dirigente independentista hacer aportaciones constructivas, o alternativas, sobre los distintos temas que afectan a la villa. Por ahora, no lo está haciendo, y quizá por ello, está quedando aislada políticamente y en un plano rayano en lo tóxico.
