Grant Dalton

Mientras, el equipo organizador cierra carpetas para que la carrera de regatas esté a punto y lista para ser "la mejor de la historia", como han planteado algunos cargos electos. Uno de los dosieres que se ha podido cerrar es el de la hospitality, que operará Vilaplana -Compass Group-, como avanzó este medio y confirmó la propia empresa en las redes sociales. 

El anuncio de que una empresa con cierta raigambre en Barcelona participará de la competición es positiva, aunque cabe recordar que la llegada de la antaño empresa familiar de la zona alta llega tras una crisis. 

Es así porque Fortius, el que tenía que ser el partner oficial para toda el área de aficionados vip, dio un portazo a la organización en junio. Fue una crisis que el puente de mando de la Copa supo sortear, y encontró a Vilaplana por medio de consultas a viva voz. De lo contrario, se arriesgaban a quedarse sin operador de este negocio. 

Una vez más, la Copa América navega sin problemas la marejada y llega a buen puerto, salvaguardando las altas expectativas que conlleva. Eso sí, un plus de transparencia de parte de la organización acompañaría mejor esta capacidad de resolución de problemas.