El vandalismo de los CDR
Los CDR cortaron la AP-7 durante 15 horas el sábado. El domingo levantaron barreras en diversos peajes de autopistas catalanas. Pero, no sólo rompieron las barreras durante tres horas, sino que también destruyeron todo el cableado, lo que dejó inutilizables los peajes durante unas cuantas horas más de la operación retorno. Los trabajadores de las autopistas no dudan en calificar estos hechos de “vandalismo bajo la mirada de la policía”.
Los empleados de las empresas concesionarias no salen de su asombro, no tanto por la actuación de los piquetes, sino por la nula actuación de los Mossos d’Esquadra. En uno de estos peajes, los Mossos se dirigieron a los activistas para preguntarles “cuáles eran sus intenciones”, lo que los trabajadores consideran “alucinante”, algo así como una “broma”. Además, alertan “de la complicada situación que genera la apertura de barreras porque los coches pasan a toda velocidad mientras los piquetes campan a sus anchas. Que se produzca un accidente es casi seguro y, encima, la culpa será nuestra”.