El PSC claudica y deja a Eloi Badia con el control de Medio Ambiente de la AMB

Eloi Badia seguirá como vicepresidente de Medio Ambiente del Área Metropolitana de Barcelona (AMB) cuatro años más. El PSC ha claudicado ante la demanda del partido de Ada Colau, BComú, que situó la continuidad de uno de los concejales más polémicos como una de las líneas rojas para conseguir el pacto cuatripartito.

Los socialistas y los comuns tendrán el peso más destacado en la institución supramunicipal por los resultados electorales y la importancia de la capital catalana, pero desarrollarán el mandato de la mano de ERC y JxCat.

Tándem de Colau y Balmón

La alcaldía de Barcelona le asegura a Colau la presidencia de la AMB, aunque el primer edil de Cornellà de Llobregat, Antonio Balmón, será el vicepresidente y tendrá la voz cantante en la institución. Se repetirá de este modo el modelo de la etapa anterior.

La intención inicial de los socialistas era forzar el relevo de la persona que ha impulsado con más fuerza la municipalización del agua en el territorio en la legislatura anterior, tal y como indican fuentes conocedoras de las negociaciones. Finalmente, han dado su brazo a torcer.

Línea roja de BComú

Los mismos interlocutores indican que BComú había llegado a amenazar con renunciar a la presidencia y no unirse al gobierno cuatripartito si Badia no continuaba en Medio Ambiente. Quería que continuase con esta responsabilidad a pesar de perder ascendencia en el nuevo organigrama del ayuntamiento.

Aunque sobre el papel hayan moderado los discursos para reivindicar que sea una empresa pública la que se ocupe de la gestión del agua en lugar de una sociedad de economía mixta --especialmente tras el pacto con Jaume Collboni en el ayuntamiento--, se trata de un planteamiento que defienden desde su fundación.

Antonio Balmón, alcalde de Cornellà de Llobregat y vicepresidente del Área Metropolitana de Barcelona (AMB) / EP

El partido de Colau es consciente de que tiene una oportunidad casi única para conseguir su ansiada municipalización en los próximos meses. El Tribunal Supremo revisará la sentencia del TSJC que enmendaba la creación de la sociedad mixta a finales de octubre. Los magistrados deberán decidir si de forma efectiva hubo errores en la fórmula que eligió Xavier Trias cuando era el presidente de la AMB para dar forma a la compañía y si estos suponen que se deba reemprender la constitución desde el momento inicial.

AMB, titular original de las depuradoras

Es en este escenario donde Badia considera que puede conseguir crear la empresa pública que se quede con el servicio, tal y como ha apuntado en varias ocasiones. El problema es que la AMB nunca ha sido la encargada de la red de abastecimiento de agua, sólo del trabajo de depuración.

Si se llegase a anular la creación de la sociedad mixta que se ocupa del servicio integral, Aguas de Barcelona mantendría la responsabilidad de llevar agua potable a los domicilios que conforman la institución supramunicipal a través de los contratos anteriores. Dentro de la propia AMB dan por sentado que este choque podría derivar en otra batalla entre Badia y la compañía.

Badia, sólo declaraciones

Desde el PSC mantienen que el polémico vicepresidente de Medio Ambiente “sólo ha hecho declaraciones” a favor de la municipalización en los últimos cuatro años. Señalan que el servicio de agua se presta “del mismo modo que se ha hecho durante toda la vida” y que el impacto real de sus pretensiones ha sido muy limitado.

Consideran que esto no debe cambiar en la nueva etapa de la AMB que se abre este jueves. Dan por sentado el ruido. Los cambios reales que se puedan producir serán uno de los elementos centrales de la nueva legislatura.