Las ventas de Danone se atenúan, los beneficios crecen
La firma de yogures constituye un negocio redondo para su accionista francés
21 noviembre, 2019 00:00Las actividades que el gigante lácteo francés Danone desarrolla en España acumulan dos ejercicios a la baja. Y ello es así a pesar de que su producto estelar, los yogures, no atraviesan un mal momento.
Por el contrario, las ventas se han visto animadas por el lanzamiento de diversas especialidades, tales como los yogures sin lactosa, los proteínicos, los vegetales y los ecológicos, entre otros muchos.
Pero ocurre que el crecimiento de ese sector se concentra casi exclusivamente en las marcas blancas, es decir, las propias de las grandes redes de supermercados, cuyos avances parecen imparables.
En términos de volumen, ya acaparan más del 60% del mercado, y presionan intensamente a la baja las ventas de las grandes enseñas.
Aumenta el superávit
Los yogures presentan el 86% del negocio de Danone. El año pasado, la facturación de la compañía bajó de 795 a 764 millones. Es el segundo recorte consecutivo, tras haber tocado los 875 millones en 2016. El 14% de los ingresos corresponde a exportaciones.
Pese a este retroceso, la firma mejoró sus beneficios de 93 a 97 millones. Un tercio de tales excedentes no son propiamente resultados de la explotación, sino dividendos recibidos de sus filiales o sociedades participadas.
Año | Ventas | Beneficio |
2018 | 764 | 97 |
2017 | 795 | 93 |
2016 | 875 | 108 |
2015 | 867 | 101 |
Fondos propios
Entre estas últimas es de destacar su propia matriz francesa Danone, de la que posee un lote de títulos equivalente a algo menos del 2% de su capital. Este pequeño porcentaje le reportó el año pasado unos dividendos de 10,9 millones, que se inyectaron directamente a su cuenta de resultados.
A su vez, la Danone española aplicó a dividendos todo su beneficio, tal como viene ocurriendo los últimos ejercicios. Por ello, el patrimonio neto se mantiene estabilizado en torno de los 450 millones.
Accionistas históricos
La Danone francesa controla el 98% de Danone. Entre 2013 y 2016, la multinacional adquirió diversos paquetes de socios españoles, entre ellos los pertenecientes a las familias Botton, Portabella, Fuster y Carasso, representativos de más del 40% del capital. Quedan pequeños lotes en manos de accionistas locales, que en conjunto no llegan al 1%.
Al margen de los dividendos que entrega de forma recurrente a su socio francés, Danone es un negocio redondo para la multinacional gala. El año pasado le abonó 31 millones por el uso de licencias de marcas, patentes y servicios de apoyo a la gestión.