Lucha abierta para ver quién del mundo económico catalán toma posiciones ante Feijóo

Las casuísticas del calendario propiciaron que la primera plaza pública que pisó Alberto Núñez Feijóo tras la victoria del PP en las elecciones municipales fuera Barcelona. Convenció al Círculo de Economía, cuyos socios le auparon como presidente tras anunciar que bajaría impuestos, contendría el déficit y la deuda pública y ejecutaría de una vez por todas la simplificación administrativa pendiente en España. El mundo económico catalán da por descontado que se instalará en la Moncloa. Tanto, que ya se ha desatado una pugna para ver quién se convierte en el interlocutor del político gallego en el territorio.

Feijóo conoce bien Cataluña y cuenta con un círculo de confianza propio en el que destaca el fundador y presidente de Hotusa, Amancio López Seijas. Participa en la noche gallega que el hotelero celebra cada año en el Eurostars Grand Marina y apoya al empresario en el Foro La Toja, el “espacio para el diálogo, la reflexión y la defensa de la democracia liberal” que organiza en su establecimiento atlántico. Este grupo se completaba con el desaparecido Josep Piqué, íntimo y colaborador estrecho del líder popular.

Homenaje a Josep Piqué

“Tenían una relación excelente”, señalan quienes le conocieron, “no hay duda de que hubiera sido vicepresidente o ministro de Exteriores en su gobierno”. De hecho, López Seijas organizó su propio homenaje a Piqué el lunes pasado en Barcelona. Un día antes de que el rey Felipe IV reconociese su trayectoria en la reunión del Círculo, el hotelero mandó 16 invitaciones para brindar en su honor y dejar claro “que era una persona muy querida” por los suyos a su viuda, la periodista Gloria Lomana.

Presentación del 'Foro Atlántico La Toja' con Alberto Núñez Feijóo, Josep Piqué, Antón Costas y Amancio López LA TOJA

Quién ocupará el vacío de Piqué es la pugna entre esta parte del mundo económico catalán que está bien conectado con Madrid, pero que quiere interlocución directa con el que consideran que será el futuro presidente. Feijóo no estuvo el lunes en la cena homenaje a su gran amigo, pero sí que llegó a Barcelona el día antes de su intervención en el lobi económico catalán.

La discreta cena de Feijóo en Barcelona

Mantuvo una cena discreta de la que todo el mundo se interroga en la ciudad. “Es muy hermético con lo que hace”, indican desde su partido. Se explica como una primera toma de contacto con el mundo económico catalán tras el impulso que recibió en las urnas. Las mismas fuentes apuntan a que Feijóo la organizó casi a título individual, sin mediación del partido.

“Suele ser habitual en él”, recuerdan. Ya desde la dirección de Correos (entre 2000 y 2003), se mantuvo próximo al empresariado del país, una forma de hacer política que también llegó a la Xunta de Galicia a lo largo de sus años como presidente. “Es business friendly en el sentido de que escucha al mundo económico”, añaden.

Futuro gobierno del PP

Sabiendo de esta predisposición, que contrasta con la de algunas caras nuevas en la política nacional, los empresarios mueven sus fichas. Algunas son evidentes, como los codazos que hubo en el Hotel W el miércoles pasado para poder toparse con él. O los corrillos para comentar el aparte, meramente formal, que mantuvo con el presidente del lobi, Jaume Guardiola, y su predecesor en el cargo, Javier Faus, dos perfiles alejados de la primera línea.

El líder del PP, Alberto Núéz Feijóo, en la reunión del Círculo de Economía Luis Miguel Añón - CG

Sin Piqué, la cuota catalana en un hipotético gobierno conservador en verano –las sesiones constitutivas de las Cortes tendrán lugar el 17 de agosto– está vacante. El debate actual es parecido al que se abrió a mediados de los años 90, cuando se apuntó incluso a Juan Rosell como el hombre fuerte de José María Aznar en Cataluña. Papel que, finalmente, desempeñó Piqué. A poco más de un mes para las generales, parte del empresariado catalán incluso se reparte ministerios.