Imagen del accidente de la Ronda Litoral tras la persecución con los Mossos d'Esquadra / CG

Imagen del accidente de la Ronda Litoral tras la persecución con los Mossos d'Esquadra / CG

Vida

Los Mossos tapan una persecución suicida en la Ronda Litoral

La policía autonómica investiga una violenta carrera que acabó en accidente en la vía rápida de Barcelona; los agentes no informaron a la Guardia Urbana

16 julio, 2019 00:00

Los Mossos d’Esquadra taparon el viernes y siguen haciéndolo hoy una violenta persecución en la Ronda Litoral de Barcelona. La policía investiga discretamente una dramática carrera en la entrada de la Ciudad Condal que acabó en violento accidente de tráfico en la concurrida vía, por la que circulan 100.000 vehículos al día.

Según fuentes cercanas a las pesquisas, la alocada carrera se inició el viernes 12 de julio de madrugada en el municipio de Sant Adrià de Besòs (Barcelona). Por razones que aún se desconocen, un vehículo de alta cilindrada huyó de una patrulla del cuerpo autonómico de policía y se dio a la fuga. Tras ello, se adentró en la Ronda Litoral o carretera B-10 a gran velocidad, haciendo caso omiso de las advertencias de los agentes.

Accidente

La caza del bólido suicida duró varios kilómetros. Concretamente hasta el punto kilométrico 11, cuando el automóvil embistió uno de los laterales de la vía a la altura del Port Vell, donde la carretera presenta una peligrosa doble entrada. El choque causó graves daños al vehículo, aunque sus ocupantes, según parece, salieron ilesos.

Imagen del vehículo que se accidentó tras una persecución en la Ronda Litoral de Barcelona / CG

Imagen del vehículo que se accidentó tras una persecución en la Ronda Litoral de Barcelona / CG

Tanto es así que, al parecer, el conductor y acompañante huyeron a la carrera pese a haber destrozado el vehículo. Éste tuvo que ser retirado por una grúa municipal.

“Descoordinación”

El incidente y posteriores diligencias de investigación abiertas por los Mossos d’Esquadra no son especiales salvo por un extremo: se orilló a la Guardia Urbana de todo el suceso. “No se informó a los compañeros de tráfico de que se estaba persiguiendo un automóvil a toda velocidad en una carretera que pasa por Barcelona. Algún día ocurrirá una tragedia por esta descoordinación”, han lamentado fuentes policiales.

Esta tensión entre cuerpos policiales por la investigación de un presunto crimen en la Ciudad Condal no es nueva. Ya se produjo en abril con el caso del violador de Drassanes, al que interceptó la Guardia Urbana ante la cicatería de los Mossos, que no compartieron la discreción del sospechoso y, después, ya detenido, describieron el arresto como una “operación conjunta”.