
Joan Estévez 'Espinosa', el mercenario catalán que se fue a la guerra de Ucrania MOVISTAR+
Joan Estévez 'Espinosa', el mercenario catalán que se fue a la guerra de Ucrania : "Es como el Mobile World Congress"
Un exmilitar del Ejército español relata su vida como soldado a sueldo en el conflicto bélico con Rusia en un documental
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Tenía casa, dos negocios y un hijo, de lo que sólo mantiene los dos primeros. Y, de repente, se va a la guerra de Ucrania como mercenario. Nunca estuvo lejos de esa camino, en realidad. “Yo trabajaba en el Ejército, pero lo dejé cuando me casé”, relata a Crónica Global.
Esta es la historia de Joan Estévez 'Espinosa', un catalán radicado en la Vall d’Aran que, tras sufrir los horrores de la guerra de Ucrania y sentir que podía morir en el frente, aún ha de controlar sus deseos irrefrenables de volver.
Espinosa asegura que no lo hace por dinero. En la guerra de Ucrania les pagan 5.000 euros para enviarles directamente a las trincheras. “Ahí no puedes ir por el sueldo, es un trabajo que no está pagado”, admite.
La pregunta entonces es obvia: ¿qué es lo que le impulsa a ir allí? ¿Qué encuentra en el campo de batalla que le compensa los malos ratos, el ver a compañeros morir y ponerse en primera línea con riesgo de muerte?
Por qué va a la guerra
“A mí me compensa estar allí, haciendo lo que sé hacer, en beneficio de un bien común: ayudar a la gente que está sufriendo por la guerra”, asevera.
Cuando uno ve el documental Mercenario, la película dirigida por Juanma Arizmendi, se da cuenta de que esta explicación se queda corta. No es algo irracional, pero sí algo que está en el subconsciente.

Joan Estévez 'Espinosa' vestido de militar MOVISTAR
Estévez no lo ve así o lo puede intuir cuando va a terapia, pero lo que vive en la guerra le da algo que no le da la vida en la Vall d’Aran. En su casa, sufre más que otra cosa.
Se lo confiesa a su compañero cuando le viene a visitar a Cataluña: nadie puede entender por lo que ha pasado. A lo que su colega mercenario le responde que es “egoísta” querer que alguien se meta en su piel.
Vocación militar
Espinosa decidió que su vida iba a ser esta hace mucho tiempo. Él "años atrás era soldado del Ejército español", detalla. “Yo dejo de ser militar para casarme”, reconoce. Y no funcionó.
A los cinco años de matrimonio, y con un hijo de por medio, llega el divorcio. Una separación nada fácil, como se ve al final del documental. Es entonces cuando decide volver a la vida militar.

Joan Estévez 'Espinosa' en Ucrania MOVISTAR+
“El único camino que tengo para volver es siendo mercenario”, afirma, “porque en España, por límite de edad, ya no podía volver al ejército”, prosigue. Antes de dar el salto a Ucrania, se alista a la legión extranjera de Francia y de allí pasó “a este conflicto de Ucrania-Rusia donde voy a trabajar como mercenario”.
Usa la palabra "trabajar". Aunque en la cabeza de muchos esto no se consideraría un trabajo, para Estévez lo es. Para él y para tantos otros mercenarios con los que ha compartido batallas en el frente. Algunos, incluso los ha visto morir en el frente, no sin dolor.
¿La guerra como el MWC?
Estos tristes momentos en la guerra y otros mucho más festivos se muestran en el documental que llega este 3 de abril a Movistar+. El reportaje sigue a Estévez desde la Vall d’Aran hasta el frente. Se muestra la preocupación de sus padres por la decisión y la sonrisa que él emprende eso que llama su trabajo.
Allí conoce a muchos más como él, que sienten este llamado. Incluso como si se tratara de un lugar para hacer networking le ofrecen ir a otras guerras. “Ucrania es como el Mobile World Congress, ya me han ofrecido trabajo en Birmania y en el Chad”, relata ante las cámaras que lo filman.

Joan Estévez 'Espinosa' vestido de militar MOVISTAR+
Su misión en Ucrania
Ahora, por eso, ha vuelto a la Vall d’Aran. En el frente estuvo varias veces a punto de perder la vida. Oculto en agujero de poco más de cinco metros, viendo como las tropas rusas los disparaban desde pocos metros y con armas mucho mejores que las suyas.
“Esta guerra es de barro, de cuerpo a tierra. Es como la I Guerra Mundial en la guerra más tecnológica de la historia”, llega a soltar cuando está en las trincheras. En realidad, esa es su guerra, la del mercenario. Ucrania cuenta con drones y con otras armas suministradas por Estados Unidos y otros países aliados. A ellos, nada de eso les llega.

Joan Estévez 'Espinosa' en el documental 'Mercenario' MOVISTAR+
“Nos envían a las zonas más duras”, admite. Lo hacen en “misiones en el frente que duran entre cuatro y cinco días”, luego vuelven a Kiev hasta que reciben un nuevo encargo para ir al frente. Durante esos días de descanso, solo parece hacer dos cosas: descansar y emborracharse.
Lo muestra sin tapujos en el documental. No tiene problemas por hacerlo. Esa es su realidad cuando hace de mercenario. Aunque se asemeja también a la que tiene cuando sale con sus amigos en Cataluña.
Vida de civil
A pesar de querer volver a ver sus hijos y de haber salido de las adicciones, algunas de sus salidas de ocio están bañadas en alcohol y alguna que otra sustancia. Discute con su propio padre, vive alejado de su madre. Regresa la incomprensión. La soledad.
Espinosa no va a encontrar nada como la guerra, como tampoco mucha gente que lo comprenda. Se lo dicen sus propios compañeros. Su salida es la terapia, la medicación, el campo y un nuevo trabajo.

Joan Estévez 'Espinosa' con un arma MOVISTAR+
Sigue muriendo de ganas de volver a la guerra, la que sea, por ahora está en Cataluña, en la Vall d’Aran. Él y un compañero de guerra entrenan a otros mercenarios, algunos de ellos también han ido a Ucrania, incluso han perdido la vida allí. Eso sí, el impulso de regresar lo tiene. Joan Estévez ‘Espinosa’ parecer llevarlo en la sangre. Es un mercenario.