Los afectados del camping de Coma-ruga, sin noticias de HolaCamp a un día del desmantelamiento de sus caravanas
Las cien familias afectadas por la venta del camping debían retirar sus caravanas y mobilehomes en un plazo que ha vencido este domingo; ahora desconocen cómo procederá la empresa
14 abril, 2024 18:28Noticias relacionadas
La fecha límite ha llegado para las cien familias afectadas por la venta del camping Sant Salvador en Coma-ruga (Tarragona). La nueva propiedad, la empresa de glamping HolaCamp, podría desmantelar las caravanas y mobilehomes de los clientes este mismo lunes, una vez vencido el ultimátum en el que pidió que se retiraran antes del 15 de abril para poder empezar la instalación de los nuevos alojamientos.
La empresa avisó de que reubicaría las casitas vacacionales si los clientes no lo hacían por su cuenta, un traslado que, según Sandra López, portavoz de la agrupación de afectados, costaría entre 8.000 y 9.000 euros si lo hicieran por su cuenta.
Hasta el momento, los vecinos de este camping no han podido retirar sus propiedades por la inversión económica que supone, por la falta de espacio en el resto de instalaciones de la zona -aseguran no haber encontrado una sola plaza de acampada permanente en ningún camping de la provinica de Tarragona- y por la falta de tiempo -la empresa sólo les dejaba acceder al lugar en fin de semana y, por logística, las grúas necesarias sólo pueden retirar dos mobilehomes al día.
La empresa convocó reuniones individuales
"Esta semana llamaron a los afectados uno por uno y convocaron reuniones individuales", explica López a Crónica Global sobre la última información que tienen por parte de la empresa. Sin embargo, los abogados de los desahuciados, de la cooperativa Col·lectiu Ronda, les recomendaron no asistir, a menos que se concertara un encuentro abierto a todos los afectados y con la compañía del asesoramiento legal.
López asegura que desconocen qué pasará el lunes con esas caravanas y que la empresa no les ha ofrecido nuevas informaciones. Sí espera, sin embargo, recibir alguna notificación el propio día del vencimiento del plazo donde se detalle cómo va HolaCamp a proceder con los 100 habitáculos que debían ser retirados. "Sinó, el martes iré a la puerta del camping a ver si se han cumplido las amenazas", ha lamentado la portavoz del grupo, con miedo a terminar perdiendo el mobilehome en el que ha invertido miles de euros durante años.