Pancartas de apoyo a los soberanistas presos colocadas en la Diputación de Lleida / Europa Press

Pancartas de apoyo a los soberanistas presos colocadas en la Diputación de Lleida / Europa Press

Política

El ex presidente de la Diputación de Lleida se embolsó, al menos, 150.000€ en mordidas

Una denuncia anónima en 2015 ya alertó del supuesto cobro de comisiones por parte de Joan Reñé Huguet y su secretaria

15 diciembre, 2019 11:45

El ex presidente de la Diputación de Lleida, Joan Reñé Huguet, y su secretaria, Marlen Minguell, se habrían embolsado, por lo menos, 150.000 euros de sobornos a varios empresarios. En concreto, tal y como subraya un informe de los Mossos d’Esquadra al que ha tenido acceso el ok diario, Reñé habría realizado varios ingresos a su cuenta con billetes de 500 euros y habría pagado hasta 60.000 euros en efectivo por las reformas realizadas en su casa de Barcelona, unos movimientos bastante sospechosos que han hecho que levantar, todavía más, la voz de alarma. 

Sin embargo, las primeras informaciones sobre estos movimientos irregulares saltó en 2015 cuando la Fiscalía de Lleida y la Agencia Tributaria recibieron una denuncia anónima sobre el supuesto cobro de comisiones por parte de Reñé y su secretaria a cambio de favores a empresarios, en forma de adjudicaciones de obras. Pero, de momento, sólo se ha podido establecer un aumento del patrimonio de Reñé no justificado de 150.000 euros, aunque se sospecha que parte de los sobornos cobrados podrían haberse destinado al actual partido PDeCAT.

El caso del 3%

De hecho, el juez de la Audiencia Nacional, José de la Mata, estudia ahora añadir estos hechos al sumario sobre el caso del 3% de Convergència, sobre todo teniendo en cuenta las grandes coincidencias con la forma de proceder y los actores implicados.

Por otro lado, el informe elaborado por los Mossos d’Esquadra también pone de relieve que el administrador único de la empresa Enginyeria Inalba, Esteve Niuvó Mir, actuaba como recaudador de ex presidente de la Diputación de Lleida, quien, por aquel entonces ya mantenía una relación muy estrecha con el ex conseller de Justicia de la Generalitat, Germà Gordó, uno de los encargados de negociar las conocidas mordidas del 3% para el partido.