El líder del PSC, Salvador Illa, durante el pleno del Parlament de esta semana

El líder del PSC, Salvador Illa, durante el pleno del Parlament de esta semana Quique García EFE Barcelona

Política

El socialismo catalán ve rendición política del independentismo en los pactos de investidura

Los de Salvador Illa remarcan que Junts ha regresado a la previa de 2017 y que sus demandas de mayor autogobierno, mejor financiación y protección de la lengua se enmarcan en la Constitución

11 noviembre, 2023 00:00

Noticias relacionadas

Pedro Sánchez ató este viernes los apoyos necesarios para la mayoría reforzada que le garantizará seguir en La Moncloa. La votación de la investidura se espera para finales de la semana próxima y la contestación en las calles de Cataluña es, por ahora, limitada. ERC y Junts continúan a la greña y los más radicales se empiezan a mover, hecho que da alas a la cuarta lista secesionista que uniría a las voces más radicales.

Mientras, los socialistas catalanes digieren unos acuerdos en cuya confección han participado más bien poco y arman su propio relato, el que contempla cierta rendición política del independentismo en los dos documentos que garantizarán 14 síes capitales para que el PSOE se quede en el Gobierno.

La presidenta de Junts, Laura Borràs; el exconseller y eurodiputado de Junts Toni Comín; el expresidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, y la diputada de Junts, Miriam Nogueras, llegan al Parlamento Europeo

La presidenta de Junts, Laura Borràs; el exconseller y eurodiputado de Junts Toni Comín; el expresidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, y la diputada de Junts, Miriam Nogueras, llegan al Parlamento Europeo Europa Press Bruselas

Los de Salvador Illa remarcan que el documento firmado por Junts es un escrito que devuelve al redil constitucional a los de Carles Puigdemont. Señalan que, más allá de la retórica, las peticiones de mayores cuotas de autogobierno, más financiación y blindaje de la lengua catalana se hacen dentro del marco de la Carta Magna y del Estatut. “Volvemos a Artur Mas, a antes de lo ocurrido en 2017”, afirman desde el entorno del líder de los socialistas catalanes.

Demanda de otro referéndum

El principal ejemplo de ello, según justifican, es la fórmula que Junts propone para celebrar un referéndum de autodeterminación sobre el futuro político de Cataluña. Los neoconvergentes lo amparan “en el artículo 92 de la Constitución”, un camino nuevo respecto a la tramitación de la misma demanda en 2014.

El entonces diputado Jordi Turull compareció ante el Congreso junto a la número dos de ERC, Marta Rovira, y el líder de ICV-EUiA, Joan Herrera, para defender una proposición de ley con el objetivo de “delegar en la Generalitat la competencia para autorizar, convocar y celebrar” una votación en Cataluña. Se ampararon en el artículo 150.2 de la Carta Magna para solicitarla.

Votación en toda España

Nueve años después, abren la puerta a que se pongan urnas en todo el país. Y es que, tal y como afirman desde el PSC, el artículo 92 valida los “referéndums consultivos de todos los ciudadanos” y señala que éstos deben ser convocados “por el Rey, mediante propuesta del presidente del Gobierno, previamente autorizada por el Congreso” y que sus “condiciones y procedimientos” se fijarán en una ley orgánica. En ningún momento hace referencia a que se delimite la participación a un territorio en concreto, destacan.

Una urna durante el referéndum ilegal del 1-O

Una urna durante el referéndum ilegal del 1-O EFE

Por lo que también existiría, según alegan, una ruptura con la unilateralidad del 1 de octubre de 2017. Esto explicaría el portazo que han dado tanto Junts como ERC a la CUP esta semana en el Parlament en su petición de recuperar el camino de la declaración unilateral de independencia (DUI).

Una amnistía incómoda pero asumible

Ahora, queda conocer la letra pequeña de la ley de amnistía. Se tramitará en breve y los próximos a Illa aseguran que será “digerible”. Reconocen que abrir este melón en la negociación de la investidura ha resultado incómodo para algunos dirigentes del partido, pero que prevalece la lectura posibilista que hacen del contexto político del país.

Los socialistas remarcan que no sólo permitirá a Sánchez seguir al frente del Gobierno, aceptan que es la única alternativa posible para poner el punto y final al procés. La medida que acaba, principalmente, con la radicalidad que se ha instaurado en los últimos años en Junts y que evita que los gestos independentistas se queden en esto, en gestos que no impliquen un choque real con el Estado. Especialmente por el coste personal que afirman que el chicken game de 2017 ha supuesto para toda una generación de políticos nacionalistas.

El pacto pasa factura al PSC

Los socialistas admiten que los acuerdos con ERC y Junts pasan factura a nivel catalán. Asumen que perderán parte de los votos prestados en los últimos comicios y que han permitido al partido firmar sus resultados más dulces de los últimos años.

El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, y el líder del PSC, Salvador Illa (d), firmando el acuerdo de Presupuestos de la Generalitat para 2023 el pasado febrero

El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, y el líder del PSC, Salvador Illa (d), firmando el acuerdo de Presupuestos de la Generalitat para 2023 el pasado febrero Andreu Dalmau EFE Barcelona

Las expectativas del PSC incluyen que a medio plazo este desgaste sea menor. Prevén que ERC acabe con la legislatura en curso y que cuando Pere Aragonès convoque elecciones consigan en las urnas la fuerza suficiente para evitar un nuevo gobierno en clave independentista, su única posibilidad de gobernar en Cataluña.

Negociación de los presupuestos con Aragonès

Illa y Aragonès deben abrir la negociación de los Presupuestos de la Generalitat de 2024. Al líder de los socialistas catalanes le pesa la falta de ejecución de los acuerdos cerrados en las cuentas anteriores, pero sus allegados explican que en este debate hay más de un elemento en juego. Y es que la lectura posibilista también incluye que ERC, especialmente los próximos a Aragonès, adelante los comicios para evitar sufrir por el retorno de Puigdemont si da tiempo a ejecutar la amnistía. 

Es el escenario más favorable que contemplan los republicanos para seguir al frente de la Generalitat. Aunque Illa ganase en las urnas, su victoria se quedaría corta. Su alternativa: seguir como jefe de la oposición.