Hacia una financiación autonómica federal, transparente y equitativa

“Es un debate incómodo, pero necesario”, admite Salvador Illa. Se refiere a la compleja reforma del modelo de financiación autonómica, que exige, a su juicio, superar barreras ideológicos y evitar la política de “sillas vacías” que lleva a cabo el Govern independentista. Un modelo que, según los expertos, debe ser federal, equitativo y robusto. Esto es, alejado de los avatares políticos.

El líder del PSC, Salvador Illa, en el debate sobre financiación autonómica

‘Crónica Global’ ha moderado hoy un debate sobre esta reforma organizado por la Fundación Campalans y el secretario de Economía y Hacienda del PSC, Francesc Trillas, en el Colegio de Periodistas. La sesión, inaugurada por el expresidente catalán José Montilla, quien ha abogado por un modelo de equidad, se ha basado en el informe elaborado por el exsecretario de Estado de Hacienda y doctor en Economía, Antoni Zabalza, titulado La lógica de la financiación autonómica y recomendaciones para su reforma.

Opacidad

Zabalza ha propuesto medidas para superar el actual modelo, que no se actualiza desde 2014 y que, según ha dicho, es “opaco y poco equitativo”. Por ello, apuesta por una serie de medidas consistentes en sustituir los fondos actuales –de suficiencia y de convergencia—, basados en criterios políticos, por un sistema de igualación de la capacidad fiscal, de forma que las comunidades autónomas tengan margen de maniobra para ejercer su autonomía y distribuir el gasto como deseen. El documento del experto propone un mecanismo de actualización basado en as necesidades de gasto de las comunidades y dejar de ligar sus recursos a la evolución de los ingresos tributarios estatales.

Zabalza también apuesta por una condonación parcial de la deuda de las comunidades, que pasaría a formar parte de la deuda del Gobierno. Asimismo, sus propuestas incluyen armonizar la base e imponer una tarifa mínima del impuesto de sucesiones y de patrimonio para evitar la competencia fiscal entre comunidades.

El expresidente José Montilla interviene en un debate sobre financiación autonómica

El estudio da continuidad al trabajo realizado por Montserrat Colldeforns y Maria Antònia Monés Apuntes para una reforma federal del sistema de financiación autonómica, también publicado por la Fundación Campalans. Y aunque esta propuesta no representa la posición del PSC, sí es un punto de partida para hacer propuestas. En este sentido, el primer secretario del PSC se ha comprometido a avanzar en esa financiación federal y abrirá una ronda de contactos con el resto de formaciones catalanas para abordar un debate, del que se ha abstenido el Govern. El consejero de Economía, Jaume Giró, considera que la propuesta inicial del Gobierno, basada en un criterio de población ponderada, no se ajusta a los intereses catalanes.

No hay "riesgo moral" en condonar la deuda

También ha participado el exconsejero de Hacienda de la Generalitat valenciana y catedrático de Economía, Vicent Soler, muy crítico con la resistencia al cambio y el apego al status quo. Ha precisado que la nueva financiación no supone que unas comunidades pierdan, sino acabar con las que están infrafinanciadas. La Comunidad Valenciana lo estuvo durante muchos años. “Hablar de la financiación del estado del bienestar es hablar de financiación autonómica. Lo dice la Constitución”, ha dicho Soler, quien ha criticado que en el reciente Debate sobre el Estado de la Nación no se haya abordado ese tema. También ha rechazado que la condonación de la deuda suponga un “riesgo moral”.

La portavoz del grupo parlamentario de PSC-Units, Alícia Romero, ha defendido medidas que garanticen la transparencia y la simplificación del sistema, y ha advertido del “mal” que supone para Cataluña esa política de “sillas vacías” del Govern, esto es, la ausencia de Cataluña en un debate que hace años lideró.

Illa también se ha referido a ese absentismo de la Generalitat en un necesario “proceso de reflexión sereno y serio. Es un debate incómodo por su perplejidad, pero debemos huir del simplismo que supone evitar los debates técnicos”. El socialista ha afirmado que el nuevo sistema de financiación "debe rechazar privilegios. No se trata de reclamar posiciones ventajosas. Debe ser un modelo equitativo, de reequilibrio y de solidaridad. Debe ser anticíclico, estable, transparente por la sociedad y con el máximo consenso posible".