La consejera catalana de Salud, Alba Vergés, con el vicepresidente Pere Aragonès, impulsor de unos presupuestos desfasados por el coronavirus / EFE

La consejera catalana de Salud, Alba Vergés, con el vicepresidente Pere Aragonès, impulsor de unos presupuestos desfasados por el coronavirus / EFE

Política

Choque entre Gobierno y Generalitat por liderar la respuesta a la crisis del coronavirus

Palau y Moncloa se propinan codazos para comandar la reacción al primer contagio confirmado de Covid-2019 en Cataluña

26 febrero, 2020 00:00

Elegantes, pero pequeños codazos. Así reaccionaron la Generalitat de Cataluña y el Gobierno con el nuevo capítulo de la crisis del coronavirus, que ayer alcanzó la región española con la confirmación del primer contagio de una mujer italiana de 36 años en Barcelona. Palau de la Generalitat y Moncloa se coordinaron, sí, pero también pugnaron durante las primeras horas del episodio para liderar la respuesta política y captar atención mediática.

La noticia de que el laboratorio del Hospital Clínic Barcelona devolvió un test positivo a los médicos que tratan a la paciente contagiada con el Covid-2019 fue una carga de profundidad a la agenda mediática del martes y, también, de hoy miércoles, cuando quedará tapada la primera mesa de diálogo entre Ejecutivo autonómico y Gobierno. Antes, ayer, el primer caso confirmado de neumonía de Wuhan en el territorio cogió a la consellera catalana de Salud, Alba Vergés, en la conferencia Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (SNS) convocada de forma extraordinaria por el ministro de Sanidad, Salvador Illa. La oportunidad era propicia para Moncloa para mostrar su liderazgo. Pero el Govern trató de maniobrar.

Duelo de mensajes

El Ejecutivo autonómico contaba con el positivo del laboratorio del Clínic, que tiene que ser confirmado aún por el Centro Nacional de Microbiología de Majadahonda (Madrid). Los tests de la instalación del Clínic son "certeros al 99%", reiteró ayer Joan Guix, secretario autonómico de Salud Pública. Con este material aunque sin el doble de los dos laboratorios, el Gobierno catalán actuó. Emitió nota de prensa, pese a que el caso de la mujer italiana es solo uno de los ocho que está investigando. Y que hay 25 contactos --personas que estuvieron muy cerca de la infectada y de forma prolongada-- más. El caso, pues, ni está doblemente confirmado ni cerrado. Pero el Govern decidió salir.

Quim Torra convocó una cuestionable reunión de urgencia sobre el coronavirus en el Palau de la Generalitat ayer / EFE

Quim Torra convocó una cuestionable reunión de urgencia sobre el coronavirus en el Palau de la Generalitat ayer / EFE

Con la consejera en la conferencia en Madrid y el doctor Antoni Trilla, epidemiólogo de cabecera de la Generalitat, reunido, Salud llamó a Joan Guix. El secretario de Salud Pública es un habitual de las ruedas de prensa en casos en infecciones y brotes víricos. No lo es la doctora Assumpta Ricard, directora clínica de Urgencias del Hospital Vall d'Hebron. De hecho, la facultativa era la primera vez que comparecía ante los medios por este asunto. Los periodistas fueron convocados con menos de dos horas de margen. Moncloa, con otra comparecencia programada tras el Consejo Interterritorial, también reaccionó.

"Eso es política"

Ante decenas de periodistas esperando a Guix y Ricard para recabar más información de un caso del que se conocían pocos detalles, el Ministerio de Sanidad aportó información. Envió un comunicado a los medios recordando la edad de la paciente, su estado y enfatizando que no "había transmisión comunitaria", esto es, entre individuos en España. Se aseguró de que llegara, también, por el canal de Telegram habilitado para seguir la crisis. Fue minutos antes de la rueda de prensa, con el auditorio del Departamento catalán de Salud hasta los topes. El mensaje corrió como la pólvora entre los periodistas. Tras ello, entraron los dos altos cargos y dieron cuenta de la actuación del Govern. Pero Moncloa ya se había adelantado.

No contento con ello, el equipo de Quim Torra trató de contraatacar. Convocó un cónclave de urgencia con, de nuevo, Joan Guix, en el Palau de la Generalitat. Al encuentro no pudo acudir Vergés porque se encontraba aún en Madrid. La consellera entró por plasma, mediante un sistema de videoconferencia. La reunión de Torra con la cúpula de Salud no aportó nada. Ningún dato nuevo sobre el primer caso de coronavirus en Cataluña,. Sí sirvió para contraprogramar, o poner el contrapunto, la rueda de prensa del ministro Salvador Illa desde la sede del Ministerio. Fue el broche a una tarde de codazos entre Gobiernos para liderar la respuesta a la crisis sanitaria.