Ada Colau les echa por "odio a España". Esta es la denuncia pública de la Asociación de Amigos del Castillo de Montjuïc, que fue desahuciada unilateralmente de la fortaleza barcelonesa el pasado 11 de abril. La entidad, declarada de utilidad pública en 2010, alerta de la "intolerancia ideológica" de la munícipe de Barcelona en Comú (BComú) y advierte de que pedirán "daños y perjuicios".
En conversación con este medio días después de ser desplazados del conjunto monumental, el abogado de la asociación civil, Jorge Buxadé, ha rechazado de plano las acusaciones del Ejecutivo local de Barcelona, que acusó a la entidad de "celebrar misas franquistas". "Con un proceso judicial contencioso en marcha, el movimiento del Ayuntamiento de Barcelona de pedir un desalojo cautelar de la asociación se debe circunscribir en el electoralismo --de cara a los comicios locales del próximo 26 de mayo-- y en el odio ideológico del equipo de Colau a España".
"Ni una traza de franquismo"
El letrado ha arremetido contra el teniente de alcalde Jaume Asens, que justificó el cambio de cerradura de los dos espacios que ocupaba la Asociación de Amigos del Castillo de Montjuïc en la "lucha contra la impunidad de los crímenes del franquismo". "Cabe situar al lector. En 2007, el Ministerio de Economía y Hacienda cedió la gestión de la fortaleza a un consorcio que formarían el Ayuntamiento, la Generalitat de Cataluña y la Administración General del Estado (AGE). En una década, los distintos gobiernos municipales no han atinado a constituir este ente mixto", ha recordado Buxadé.
Imagen de una exposición de la Asociación de Amigos del Castillo de Montjuïc / AACM
El representante de la asociación cívica ha rechazado de plano las acusaciones de Asens y ha enfatizado que la AACM "fue declarada de utilidad pública en 2010 por la Generalitat, por lo que lo de vincularla a un régimen que acabó hace 40 años es pura intoxicación. Si alguien tiene alguna duda de lo que hacen, puede examinar la memoria de actividades --consultar aquí--, o recordar el hecho de que la Asociación es miembro de Icofort, una asociación internacional de conservación del patrimonio. No encontrará traza alguna de lo que sostiene el concejal", ha subrayado Buxadé. ¿A qué se dedica pues la AACM? "Actividades de conservación del castillo, infantiles, deportivas o culturales", enumera el letrado.
Litigio en marcha
La actividad de la Asociación no ha convencido al Ayuntamiento de Barcelona, que el pasado 11 de abril la desahució de las dos últimas estancias que ocupaban en la fortaleza. Cambiaron las cerraduras de las habitaciones antes de que Jaume Asens compareciera ante los medios a explicar que "Franco había sido sacado del último reducto de Barcelona". ¿Es ello así? "Mire, el procedimiento de desahucio se remonta al año 2017. Está recurrido en el juzgado contencioso número 8 de Barcelona. Ha sido ejecutado después de que el Ayuntamiento pidiera medidas cautelares. Unas medidas que se explican solo por la voluntad de la alcaldesa de Barcelona y su equipo de hacer electoralismo y mostrar su intolerancia ideológica y odio a España", argumenta el abogado de la entidad.
¿Dónde realizará sua actividades ahora la AACM? "Buscarán un lugar, estoy seguros. Lo que es evidente es que cuando acabe el proceso judicial y se restituya el derecho a permanecer en el conjunto monumental --producto de una última reforma ejecutada en el siglo XVIII y que es patrimonio protegido-- se pedirán daños y perjuicios al actual Ejecutivo local de Barcelona. No se debería actuar unilateralmente contra una asociación cívica y reconocida por el gobierno autonómico en aras de protagonismo electoral", apostilla el abogado.