Vytrus Biotech, de Terrassa al éxito
El fondo Venture Tech II, del Institut Català de Finances, invierte medio millón de euros en la firma biotecnológica
26 octubre, 2019 00:00Vytrus Biotech, con sede en Terrassa (Barcelona), es un caso de éxito que con esfuerzo y trabajo ha logrado introducirse en el entramado empresarial catalán. Dedicada a la biotecnología, la compañía fue fundada por dos jóvenes emprendedores, Albert Jané y Óscar Expósito, tras licenciarse en 2009 en la Facultad de Farmacia de la Universidad de Barcelona. “La empresa nació como Phyture Biotech, pero cambiamos el nombre en 2016 después de un proceso de expansión e internacionalización y de un cambio en el enfoque estratégico. Nos convertimos en Vytrus Biotech”, relata Jané.
A partir de un grupo de investigación con más de 40 años de experiencia en tecnología de cultivos celulares vegetales, decidieron aprovechar una oportunidad de mercado inexplorada: la aplicación de estos innovadores procedimientos en el desarrollo de productos cosméticos. “Vimos que esta tecnología tenía muchas aplicaciones en la industria que no se estaban aprovechando. Decidimos empezar a ofrecer nuestros conocimientos científicos para vender a terceros”, prosigue el CEO.
Empresa premiada
Vytrus desarrolla y produce ingredientes activos totalmente naturales, sostenibles y de alta eficacia, que sirven para aplicarse en pieles sensibles o para combatir afecciones como la caída del cabello o el acné. Actualmente, la compañía tiene cinco productos con aplicaciones cosméticas que vende en exclusiva a terceras empresas. Este año ya ha sacado su noveno producto propio al mercado.
A partir del lanzamiento de su primera cartera de productos en 2014, los jóvenes ejecutivos no han hecho más que acumular éxitos: “Nos enorgullece mucho que en los últimos dos años, gracias a nuestros productos, hayamos ganado cuatro premios internacionales de primer nivel como el Gold Innovation Zone Best Ingredient Award por nuestro ingrediente activo Olea Vitae; el premio de la Industria de la Belleza en el In-Cosmetics 2019, al Mejor Uso de un Ingrediente como producto terminado por el activo Quora Nori; así como el Premio del Cosmetorium Award 2018 por la formulación Serum Perfect Touch”, destaca Jané.
Impulso al crecimiento
La compañía está cada vez más inmersa en la innovación y en su proyecto de seguir creciendo como empresa de alto valor añadido. En este sentido, ha arrancado con nuevas líneas de investigación centradas en el desarrollo de productos de aplicación dermatológica, además de cosmética. “Es en esta fase de crecimiento exponencial y conversión en empresa industrial cuando recurrimos a la financiación del Institut Català de Finances para seguir creciendo”.
La entidad financiera, propiedad de la Generalitat de Cataluña, realizó su primera inversión de 500.000 euros en esta compañía con el nuevo fondo de capital riesgo de la entidad (ICF Venture Tech II). Esos fondos servirán para impulsar el crecimiento y la internacionalización de la firma egarense gracias a una nueva estrategia comercial. También en marzo de 2018 había formalizado un préstamo participativo de 200.000 euros a través de IFEM.
La creación de empresas es fundamental para el crecimiento económico de un país. Lo es también su supervivencia y, más aún, el desarrollo de las existentes. Comunidades como la catalana mantienen vivo un tejido de pymes determinantes para la economía productiva. En este contexto, el papel de las administraciones públicas resulta imprescindible para impulsar iniciativas que fomenten la red empresarial.
Fondo Venture Tech II
El nuevo fondo de capital de riesgo del ICF dispone de 20 millones de euros y lo gestiona ICF Capital. Está dirigido a compañías de tecnología e innovación con un elevado potencial de crecimiento y revalorización en las fases de desarrollo. Las inversiones se realizan tanto en capital como con instrumentos de deuda, de manera preferente con sistemas de coinversión. Los importes por operación se sitúan entre 500.000 euros y los dos millones.
Jané explica que en la empresa están muy contentos con la contribución del ICF a su crecimiento: “Una vez nos hemos convertido en una empresa industrial y tecnológica, la ayuda del ICF nos ha dado el impulso definitivo, tanto con el fondo de inversión como con el IFEM”, afirma el CEO. Para Jané, la consolidación es plausible. “Empezamos con facturaciones pequeñas y este año ya lo estamos cerrando con una facturación de 1,2 millones”.