Oriol Dols-Icardo
Dos investigadores del Hospital Sant Pau de Barcelona han descubierto una mutación genética que interviene en el desarrollo de la esclerosis lateral amiotrófica (ELA), cuestión que abre una ventana a nuevos tipos de tratamientos para una patología que, hasta el momento, es terminal.
Se trata del neurólogo Ricard Rojas-García y del Oriol Dols-Icardo, que obtuvo, en 2016, el doctorado en Biomedicina centrado en el estudio de los factores genéticos en el contínuum de la demencia frontotemporal y la esclerosis lateral amiotrófica. Conocer mejor estas dolencias es su gran objetivo, y con este descubrimiento, demuestra que va por buen camino.
Queda un largo trecho por recorrer, pero este es un primer paso para conocer y combatir la ELA. De nuevo, la observación, la vocación y la apuesta por la ciencia están detrás de los avances.