Guerra abierta entre Rosa Benito y María Teresa Campos tras la docuserie de Rocío Carrasco

Se ha abierto la caja de Pandora y todos quieren decir algo sobre la relación entre Rocío Carrasco y Antonio David Flores. Cada uno toma sus posiciones y eso ya empieza a generar ciertas tensiones.

Si en el mundo político, representantes de Vox critican a la Rociito mientras miembros del Gobierno creen en su denuncia sobre los maltratos, en el mundo de la televisión empiezan los roces.

María Teresa

Algunos como Amador Mohedano, Kiko Rivera o Risto Mejide defienden al exguardia civil, pero la gran mayoría se pone al lado de la protagonista de la docuserie de la que todo el mundo habla. La persona que se sabe que está de su lado antes incluso de su emisión es María Teresa Campos.

La presentadora en más de una ocasión ha pedido a la hija de su amiga Rocío Jurado que hable y cuente su versión. Ahora que le ha hecho caso, la periodista guarda silencio, sólo espera a que se emita entero.

Rocío Jurado

Pero el protagonismo de la andaluza no es del agrado del todos. Rosa Benito, cuñada de la cantante, se alegra de que Carrasco cuente con ella, “si tiene a las Campos me hará mucha alegría”. Eso sí, no sabe de dónde se saca que en su día fue amiga de la tonadillera.

La colaboradora de Ya es mediodía recuerda que la misma presentadora reconoce que en los 18 meses que la folclórica estuvo ingresada debido al cáncer que sufría sólo fue “tres veces a verla al hospital”.

Duras indirectas

“Yo no la he visto en casa de mi cuñada como he visto a lo mejor a Isabel Gemio y mucha más gente”, subraya. Un nombre que suena como un dardo envenenado tras el duro enfrentamiento que tuvo esta con María Teresa.

Señala que personas como Cristina Tárrega, entre otras, iban a ver a la artista “día sí día también al hospital, que la habitación estaba abierta a visitas cundo se encontraba bien la paciente. La Campos, en cambio, sólo fue tres veces, recalca.

Rociito

“No era amiga”, sentencia. Lo tiene clarísimo. Al menos esa es su opinión, un hecho que no quita su respeto hacia ella ni a su relación con Rocío Carrasco.

Sobre la que fuera su sobrina política, apoya la decisión que ha tomado y hablar de lo que ha vivido, “yo ya dije que estaba muy bien”. Aun así, deja caer que, tal vez, no se la deba creer a pies juntillas. “Esa es su verdad, pero luego también puede haber otras verdades, vamos a ver que pasa al final con el documental”.