El beneficio de Laboratorios Esteve cae un 27%
La empresa incrementa la dotación para investigación y desarrollo
10 noviembre, 2017 00:00Laboratorios Esteve ha confeccionado un presupuesto expansivo para 2017 tanto para su división farmacéutica como para la química.
Los cambios introducidos en la cartera de productos están impulsando las ventas de los fármacos de Laboratorios Esteve. También la química se prevé que mejore giro y beneficios, gracias sobre todo a la fabricación para terceros. El presupuesto destinado a investigación y desarrollo ronda este año los 80 millones de euros.
Cinco fábricas
Esteve es una corporación poderosa, con sede en Barcelona, de la que depende una treintena de empresas. Figuran entre ellas firmas situadas en Alemania, Italia, Irlanda, Suiza, Suecia, Portugal, Turquía, EEUU, México y China.
El acervo industrial de Laboratorios Esteve comprende cinco plantas sitas en Martorelles (Barcelona), Celrà (Girona), Banyeres del Penedès (Tarragona), Jiutepec (México) y Shaoxing (China).
La planta de Laboratorios Esteve en Celrà, Girona / ESTEVE
Planta de Laboratorios Esteve en Shaoxing, China / ESTEVE
El grupo contabiliza unos activos consolidados de casi mil millones. De ellos, 215 millones son inmuebles e instalaciones, 92 tesorería y 183 deudores comerciales. El patrimonio neto se eleva a 737 millones.
En 2016, Esteve facturó 812 millones, un 4% más. Los fármacos aportaron 545 millones y la química, 267 millones. Uno de los platos fuertes de la casa es la exportación, que supone dos terceras partes del giro.
Despidos
El beneficio consolidado descendió el año pasado de 74 a 54 millones, con un recorte del 27%. El retroceso se debe a que en 2015 Esteve vendió su negocio de veterinaria a Ecuphar, lo que supuso un beneficio de 30 millones. En consecuencia, el resultado de ese año estuvo hinchado por tal circunstancia.
La plantilla suma 2.480 personas. Ha experimentado un notable recorte de casi 500 colaboradores, en parte por la venta de Ecuphar. En 2013 salieron de la casa otros 185 empleados en un expediente de regulación que costó 17,3 millones.
En la cúpula de la casa ha habido un cambio significativo. El grupo estaba presidido hasta hace poco por Juan Esteve Soler. Y las máximas funciones ejecutivas recaían en Albert Esteve Cruella, hijo del expresidente José Esteve Soler.
En fechas recientes, Albert Esteve ha asumido la presidencia y se ha designado consejero delegado a una persona ajena a la saga familiar, el sueco Staffan Schüberg.