Un avión de la flota de Vueling / EUROPA PRESS
Vueling señala la colaboración público-privada como la única opción viable para el combustible sostenible
El director de Sostenibilidad de la aerolínea, Franc Santmartí, defiende el uso del SAF para reducir las emisiones y aboga por incentivar su producción en España como ya hace EEUU
26 enero, 2024 00:00Noticias relacionadas
La colaboración-público privada es el motor que ha logrado desencallar avances en sectores como el inmobiliario o el turismo. También es el mecanismo que puede llevarnos hacia un futuro en que volar sea sostenible con el medioambiente. Está convencido de ello Franc Santmartí, director de Sostenibilidad de Vueling, que defiende el uso del SAF como la solución fundamental para reducir las emisiones del sector.
La aerolínea low cost del grupo IAG apuesta por el combustible sostenible para la aviación (SAF, por sus siglas en inglés) como la herramienta idónea para reducir las emisiones de CO2 y mitigar el impacto ambiental del sector aéreo. En una entrevista con Crónica Global, el ejecutivo destaca el compromiso de la compañía de suministrar un 10% de SAF en el año 2030, el doble de lo que exigirá la Unión Europea.
Menos emisiones
Según Santmartí, "el SAF puede reducir las emisiones en el caso de los combustibles sostenibles obtenidos a través de residuos orgánicos del 80%, o 90%, y en el caso de los combustibles sintéticos, que son aquellos que se obtienen con la captura de CO2 directamente del aire, de hasta el 100%". "Ahí se mezcla el hidrógeno verde con el CO2 que se puede captar directamente del aire", indica Santmartí.
Sin embargo, el responsable de sostenibilidad de la firma reconoce que la producción de SAF en España es aún muy limitada, y que la mayor parte del combustible sostenible que utiliza la aerolínea procede de Estados Unidos y Reino Unido, donde hay más incentivos para su desarrollo. Por ello, reclama colaboración público-privada para impulsar la producción de SAF en nuestro país.
Un avión de Vueling reposta SAF
Empleo industrial
Y es que el desarrollo de una industria productora de SAF supondría, según un estudio de PwC, la creación de más de 270.000 nuevos puestos de trabajo, un impacto en el PIB de más de 56.000 millones de euros y la instalación de 30 o 40 plantas de SAF en España, con una inversión de unos 20.000 millones de euros. "España tiene un gran potencial para convertirse en un gran productor de SAF gracias a la cantidad de residuos que tiene, gracias también a las energías renovables que tiene", subraya Santmartí.
"Pero la verdad es que a día de hoy, de todas las necesidades que tenemos para el año 2030, todo lo que tenemos cubierto, que es prácticamente una tercera parte, viene de Estados Unidos e Inglaterra, que son los países que tienen más incentivos para la producción de estos combustibles", apunta el ejecutivo. "Estamos abogando por una colaboración público-privada para que haya más incentivos para el desarrollo de estos combustibles en España", justifica.
Una "oportunidad"
Vueling es la primera aerolínea low-cost que suministra SAF a diario, aunque en volúmenes todavía bajos. Santmartí señala que la aerolínea está haciendo una labor de pedagogía con sus clientes de todo el mundo para concienciarles de la importancia de usar este tipo de combustible.
"Necesitamos la colaboración de todos los actores de la cadena de valor pero, efectivamente, la oportunidad está", insiste. "Ahora solo necesitamos esta colaboración público-privada para hacerlo una realidad", concluye.
