El exsocio de Oleguer Pujol retoma los mandos de Drago Capital
Luis Iglesias dejó la presidencia de la inmobiliaria en la que trabajó con el hijo del expresidente de la Generalitat hace diez años, cuando se inició la investigación por blanqueo de capitales
1 diciembre, 2023 00:00Noticias relacionadas
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La causa abierta contra el expresidente de la Generalitat de Cataluña, Jordi Pujol, y su familia por el origen de su fortuna personal acabó provisionalmente con la carrera empresarial de Luis Iglesias Rodríguez-Viña, quien fuera socio de Oleguer Pujol, uno de los siete hijos del emblemático exdirigente político, en los negocios inmobiliarios a través de la sociedad Drago Capital. Más de dos años después de que sus cuentas con la justicia quedaran resueltas, Iglesias ha regresado a la presidencia de la compañía.
Iglesias fue imputado en su día por la Audiencia Nacional por su presunto delito de blanqueo de capitales dado que el por entonces juez instructor de la citada causa, José de la Mata, decidió abrir varias piezas separadas, que afectaban a los distintos miembros del clan Pujol involucrados en la investigación.
Origen de las inversiones
En el caso de Oleguer Pujol, la pieza que protagonizaba fue bautizada precisamente con el nombre de "Drago", dado que fue esta sociedad uno de los principales objetos de investigación.
Se trataba de determinar si parte del capital invertido por el vástago de Jordi Pujol a través de este vehículo procedía del patrimonio familiar y, por ende, contaba con un origen sospechoso.
La pieza también incluía la investigación a otras siete personas, entre ellos Iglesias Rodríguez-Viñas, estrecho colaborador de Oleguer Pujol en Drago. Ambos mantenían una relación profesional ya duradera por entonces al haber coincidido con anterioridad en el banco de inversión estadounidense Morgan Stanley.
Algo más de un año antes de que se iniciase la causa, Drago Capital pasó a ser regida por un consejo de administración, lo que supuso que Oleguer Pujol, que hasta entonces había ejercido como administrador único, diera un paso en lateral y se apartara de la primera línea de la empresa, que había sido protagonista de sonadas operaciones en el sector inmobiliario entre finales de la primera década del siglo y comienzos de la siguiente.
4.000 millones bajo gestión
En pleno estallido de la crisis financiera y de la burbuja inmobiliaria, Drago Capital realizó adquisiciones como el edificio que alberga la sede del grupo Prisa en la Gran Vía madrileña (posteriormente vendido a Pontegadea, la sociedad de inversiones del fundador y accionista mayoritario de Inditex, Amancio Ortega).
También se hizo con sendas voluminosas carteras de oficinas de Banco Santander y la aun denominada por entonces Caja Madrid (germen de la posterior Bankia, tras su fusión con otras seis cajas de ahorros). En total, Drago Capital llegó a administrar más de 4.000 millones de euros bajo gestión.
Tras el inicio de la causa y la aparición de las imputaciones, Iglesias dejó la presidencia de Drago y se centró en resolver sus cuentas pendientes con la Justicia, que no se limitaban al caso Pujol. También estuvo involucrado en la causa contra el exministro de Trabajo y destacado dirigente del PP en Valencia Eduardo Zaplana, con el que por entonces estaba emparentado al haber contraído matrimonio con una de sus hijas.
En 2017 tomó el testigo Mayte Medina, incorporada a Drago cuatro años antes y que provenía de la distribuidora textil irlandesa Primark. Casi al mismo tiempo también se unió al equipo de la inmobiliaria Alfonso Mato García-Ansorena, primo de la que fuera ministra de Sanidad Ana Mato y que pasó a asumir la presidencia de Drago cuando Medina abandonó la empresa, hace algo más de dos años.
Archivo de la causa
Hasta la fecha, ha sido Mato quien se ha ocupado de llevar el timón de una Drago ya alejada de los días de vino y rosas y cuya vinculación con el nombre de Oleguer Pujol e imputación de Luis Iglesias ocasionaron un daño reputacional del que no ha terminado de recuperarse.
Recientemente, el juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz también ha archivado la causa que pesaba contra el propio Oleguer Pujol por presuntos delitos relacionados con el blanqueo de capitales a través de sus negocios inmobiliarios.