Morabanc remodela su área financiera tras la fusión con la filial andorrana del Sabadell

Un portavoz de la entidad ha subrayado que la directiva pilotó a lo largo de 2022 el proceso de integración de las estructuras financieras de Morabanc y BSA Banc. "Una vez terminada la fusión dio por concluida su etapa de más de 10 años en Morabanc y decidió emprender nuevos retos profesionales", ha comentado.

Trayectoria de Amilburu

Esta transición "ordenada y natural", en palabras de la compañía, ha comportado el ascenso de Amilburu a este puesto de máxima responsabilidad dentro del organigrama, inmediatamente por debajo de Lluís Alsina Álvarez, consejero y director general.

Anteriormente, Amilburu ejercía de director del área de riesgos del grupo --puesto que será ocupado ahora por la segunda del equipo del ejecutivo--. Previamente a su incorporación al sucesor de la histórica Banca Mora, el ejecutivo ocupó distintos cargos en Andbank y Winterthur Life, propiedad de la multinacional Axa.

Resultados en 2022

Estos cambios internos llegan tras un año dulce para la entidad financiera. Morabanc elevó su beneficio un 16% en 2022 hasta los 40,1 millones de euros y cerró el ejercicio con 10.211 millones de recursos gestionados.

Además, la compañía presidida por Juan María Nin aumentó su rentabilidad financiera (ROE) hasta el 10,9% y registró una ratio de solvencia del 18,06% (CET 1 fully loaded) y de liquidez del 294,14%.

Lluís Alsina (izq.), consejero y director general de Morabanc, y Juan María Nin (dcha.), presidente de la entidad Toni Espinosa

Más huella en España

Unos indicadores óptimos que coinciden con una etapa de intensificación del negocio en España a través de su marca Morawealth, que inició su actividad en 2020. La agencia de valores ya cuenta con una oficina en Barcelona y abrió otra el pasado mayo en Madrid, en la icónica Torre Serrano.

La previsión es que después de un proceso de formación de equipos, la delegación madrileña esté a pleno rendimiento el próximo septiembre.