Cataluña rozará los 30 millones de turistas extranjeros en 2030
Los destinos rivales de la autonomía revelan tres secretos para evitar la congestión turística, mantener la calidad y aumentar ingresos
8 abril, 2019 14:06"28 o 29 millones de turistas". Este es el número de visitantes internacionales con el que trabaja la Agencia Catalana de Turismo (ACT) a un horizonte de once años vista: en 2030. Así lo ha explicado el director del organismo público de promoción, Octavi Bono, hoy lunes en el Summit Barcelona 2019, que busca fórmulas para elevar el nivel de la industria y, al mismo tiempo, asegurar sus sostenibilidad.
Habida cuenta de un posible aumento del 52% en el número de veraneantes a la región, según la proyección de la Organización Mundial del Turismo (OMT) que hace suya la ACT, el actual Gobierno catalán y los futuros pueden contar con la aportación estratégica de otros destinos que también bregan para evitar la congestión y disparar los ingresos. Competidores como la región de Toscana o Malta han dado tras grandes ideas a las instituciones nacionales, autonómicas y locales para conseguirlo en el marco del evento celebrado hoy en Barcelona.
"Segmentación, segmentación y segmentación"
El reto de encajar en Cataluña a casi 30 millones de pasaportes extranjeros al año sin que se saturen las infraestructuras, la planta alojativa y las calles es mayúsculo. No obstante, los rivales de la autonomía catalana, el segundo destino más visitado en España tras Andalucía --que ya llegó a los 30,6 millones en 2018--, ya trabajan en algunas fórmulas. Uno de los principales es la segmentación. "No queremos más crecimiento. El turismo se ha disparado en los últimos años en Malta, por lo que ahora queremos estabilizar y aumentar facturación. Para ello nos dirigimos a segmentos concretos", ha explicado Tania Sultana, jefe de investigación de la Autoridad de Turismo de Malta (MTA, por sus siglas en inglés).
Silvia Burzagli (i); Tania Sulta; Octavi Bono y el periodista Albert Closas (d), presentador de la ponencia / CG
La académica se refiere a un cambio en la promoción y el producto. "Trabajamos en microsegmentos. Apelamos al turismo LGTBI, que tiene un elevado poder adquisitivo; al corporativo; cultural; bodas; actividad deportiva; buceo o aprendizaje de inglés", ha enumerado Sultana. ¿Qué han conseguido? "Reducir la estacionalidad. Fíjense que solo el 34% de turistas vienen a Malta en verano, frente a un 35% de media en España, un 49% en Baleares o un 61% en Croacia", ha admitido la representante. Ello no habría sido posible sin trabajar el producto. "¿Por qué optamos a la Capitalidad Europea de la Cultura en 2018? Para atraer a visitantes en otras épocas del año y descongestionar el verano", ha agregado la directiva. "Ello no quiere decir aumentar en verano y en invierno. Significa parangonar y repartir el turismo durante todo el año. Porque cada vez que creces con un proveedor --una aerolínea, por ejemplo-- perjudicas a otro", ha alertado Sultana.
La Toscana, más producto y repartir
Además de trabajar en el exterior, los destinos deben hacer una labor interior para evitar la congestión. Es lo que ha expuesto Silvia Burzagli, directora ejecutiva de Economía y Promoción Turística de Regione Toscana. La idílica región italiana presenta un sinfín de ciudades-tesoro, como Florencia, Pisa y Siena, pero se enfrenta a un quebradero de cabeza que también sufrirá Cataluña si no planifica: una ratio de ocho turistas por cada habitante. En la región catalana son 2,5. "Nuestro trabajo se basa en los datos. El famoso big data. ¿Cómo lo hicimos? Recolectando datos de flujos turísticos mediante la captación de tarjetas SIM de sus móviles en un acuerdo con Vodafone Italia", ha aclarado Burzagli.
La Via Francigena, un producto que está impulsando la región Toscana en Italia / MiBAC
Esta estrategia permitió elaborar un mapa y crear perfiles de los tipos de visitantes que exploran la región. Detectó Regione Toscana hiperconcentración en la costa y las ciudades-monumento. "Queríamos evitarlo. Promocionar los pequeños pueblos con encanto y la Toscana interior. Nos ayudó mucho la Via Francigena", ha aseverado la ejecutiva. Esta suerte de camino de santiago que discurre entre Canterbury (Reino Unido) y Roma (Italia) atrae a unos 40.000 excursionistas al año. Experimentó un boom en 2017 y el pasado ejercicio. "Hacemos mucho hincapié en el producto, como oferta especial para colectivos. Por ejemplo, estancias corporativas para directivos chinos. Y también en la innovación, que es escasa en la industria de la hospitalidad", ha resumido Burzali.
"Crecimos en ingresos, no tanto en visitantes"
Estas tres tareas --segmentar, crear productos y repartir-- que los destinos rivales de Cataluña ya han abordado están en la agenda de la Generalitat. Esto es lo que asegura Octavi Bono, director general de Turismo. Ha precisado el directivo que aunque uno de los escenarios es llegar a los "27 o 28 millones de turistas internacionales en 2030", la cifra puede variar, ya que en 2018 la autonomía "ya creció más en ingresos, un 7,2%, que en número absoluto de visitantes", ha admitido el alto cargo. Por lo pronto, el Plan Estratégico de Turismo de Cataluña 2018-2022 [consultar aquí], presentado en enero de 2019, estima que la autonomía alcanzará los 21 millones de veraneantes extranjeros en tres años. "Nuestro foco de trabajo son los ingresos, no el volumen absoluto", ha reiterado Bono.
Las palabras del alto cargo se han escuchado en el Summit Barcelona 2019, las jornadas de reflexión sobre la calidad del turismo que han arrancado hoy lunes en la Ciudad Condal. El foro, cuyo presidente del comité organizador es el exdirector del Círculo de Economía y colaborador de Crónica Global, Jordi Alberich, cuenta con el apoyo de enseñas como Caixabank y entidades como el Consorcio de la Zona Franca. Asimismo, el evento tiene el respaldo de Aguas de Barcelona (Agbar); UnionPay; GlobalBlue; Renfe y Aena, además de firmas como Saba, empresas públicas como FGC e instituciones como el Gobierno, el Ayuntamiento de Barcelona o el Área Metropolitana de Barcelona (AMB).