Guzmán Gastronomía pone el foco en la zona de Málaga para crecer

Guzmán Gastronomía está inmerso en un proceso de expansión. Se mueve en un sector de actividad bastante desconocido en España, el de actuar como proveedor integral de comida y responde a los requisitos de la restauración gastronómica. Su consejero delegado, Jordi Franch, explica que este perfil les ha permitido competir en todos los segmentos en un mundo muy competitivo. Este 2019 tienen en foco puesto en continuar con su crecimiento y una de las prioridades es la de aterrizar en la zona de Málaga.

El grupo ya opera una plataforma en Sevilla. Desde allí se preparan todos los pedidos que se mandan a sus clientes, que llegan a los 8.000 entre España y Portugal. El ejecutivo detalla que su primer canal son los restaurantes independientes, seguidos de la restauración comercial y las cadenas hoteleras.

Facturar 160 millones

La previsión para el ejercicio fiscal en curso, que terminará en junio, es que la facturación de la compañía alcance los 160 millones de euros. Cuentan con el músculo suficiente para que el crecimiento orgánico se sitúe al entorno del 15%, pero no se limitan a esta cifra. El avance de Guzmán Gastronomía se apoya en la “adquisición de distribuidores con fondos de comercio y plataformas propias” que se adapten a las necesidades del grupo, señala su máximo ejecutivo.

Para ello mantienen una “actitud proactiva” en identificar las ofertas que surgen en el mercado. Reconoce que no cuentan con ningún presupuesto cerrado para cumplir con este objetivo por la propia idiosincrasia del sector, muy atomizado y con pocas compañías con la dimensión y los planes estratégicos de Guzmán.

Entrada de BidFood

“Nosotros sabemos cómo integrar a las empresas --la gestión del personal, los sistemas informáticos y las formas de trabajo-- y contamos con la capacidad financiera del grupo detrás”. Este apoyo lo da BidFood, una de las grandes multinacionales que operan en todo el mundo y que en 2017 entró en el capital de Guzmán para poner el primer pie en el mercado ibérico.

Aunque en cada una de las adquisiciones se contrae deuda financiera, la presencia del gigante sudafricano es capital para completar con éxito el proceso. El año se ha iniciado con la compra del proveedor vasco Igartza. Una firma que les permite entrar en Guipúzcoa, el territorio con más estrellas Michelín de España, y entrar en el segmento del pescado y el marisco congelado.

Más productos

Esta experiencia será clave para el grupo. Nació como una firma especializada en los productos frescos, tanto frutas como verduras. La compra de otra firma vasca, Cárnica Sainz, le permitió entrar en el sector de la carne y los embutidos, hecho que elevó sus propuestas gastronómicas.

Franch reconoce que la dimensión de Igartza no les permitirá vender los productos que se procesan en los centros productivos de la firma en todas las plazas en las que tienen presencia. Pero sí les otorgará los conocimientos necesarios para replicar la actividad en otras plataformas.

Valencia y Galicia

Además de Málaga, un territorio muy apetecible por la concentración turística y la dimensión del parque hotelero, el crecimiento geográfico previsto también pasa por hacerse fuertes en Valencia (ya tienen una plataforma en Alicante) y en Galicia.

“Somos pequeños, pero en el mercado ibérico hemos conseguido destacar”, reconoce el consejero delegado. Su reto es el de consolidarse como el primer proveedor integral gastronómico del país.