Imagen de uno de los médicos agotados tras su jornada laboral / EFE

Imagen de uno de los médicos agotados tras su jornada laboral / EFE

Vida

Cataluña ordena a sus médicos evitar vacaciones más allá del 15 de septiembre

La Generalitat se prepara para un virulento rebrote del coronavirus en otoño: exige a los sanitarios que descansen en julio y agosto

12 junio, 2020 00:00

"No hay orden escrita, pero están avisando". Así explica el presidente de la junta de personal de un gran hospital catalán las instrucciones de la Generaltat de Cataluña sobre las vacaciones de los sanitarios. El Govern se prepara para un virulento rebrote del coronavirus que fija para finales de septiembre o principios de octubre. Es por ello que presiona a médicos, enfermeros, técnicos de enfermería, celadores, camilleros, administrativos y demás categorías laborales para que descansen en julio y agosto.

Preguntado por esta cuestión, el Departamento catalán de Salud no ha contestado a las preguntas de este medio. Sí lo han hecho tres fuentes distintas de tres hospitales: Santa Creu i Sant Pau (Barcelona); Hospital de Mataró y Hospital Santa Caterina (Girona). Todos ellos están concertados con el sistema público. Las tres voces han apuntado a lo mismo. "Las gerencias no te garantizan que tengas vacaciones más allá del 15 de septiembre, por lo que repiten una y otra vez que las cojas ya o las perderás", coinciden. ¿Por qué? "Planean --ya no prevén, sino planean-- cómo afrontar el rebrote del virus cuando llegue de nuevo el frío. Quieren a todo el mundo al pie del cañón", explican.

 

 

Cataluña ordena a sus médicos evitar vacaciones más allá del 15 de septiembre / CG

Cierre de quirófanos y ambulatorios en verano

Las instrucciones, precisan las fuentes consultadas, son verbales, no escritas en ningún caso "salvo excepciones". "Las dan los jefes de servicio y de área y las repiten. Se nota que vienen de arriba", insisten. Por arriba se refieren al Departamento catalán de Salud, que hace acopio de recursos materiales y humanos para cuando el patógeno golpee de nuevo la región en otoño. "Saben que el coronavirus es mucho peor que la gripe estacional, ahora sí hay información de su capacidad de incidencia y letalidad, no como en febrero. Es por ello que preparan los hospitales y centros de atención primaria (CAP) para que, cuando llegue el frío, nadie tenga vacaciones pendientes", explican.

Un sanitario extenuado al término de su jornada laboral / EFE

Un sanitario extenuado al término de su jornada laboral / EFE

La obligatoriedad de gastar los días de libranza antes del 15 de septiembre es, de hecho, cierto oxígeno para la Generalitat. Si los médicos tienen que librar en julio y agosto, habrá menos plantilla en centros sanitarios y ambulatorios, por lo que hay servicios que tendrán que cerrar. Ello evitará la polémica de cada verano sobre la clausura estival de quirófanos y CAP. "Este año el Departamento de Salud lo tendrá más fácil para bajar la actividad. Le basta con argumentar que el personal debe descansar tras la pandemia y antes del rebrote", ilustran las mismas fuentes. Esta tesis es, no obstante, tramposa. "Si recortan actividad porque el personal descansa, significa que no contratan a más para el verano. Se ahorran dinero", agregan las voces consultadas.

¿Y las listas de espera?

En este endiablado calendario, en el que España sale de una pandemia, descansa tres meses y encara un posible rebrote, Cataluña saldrá mal parada en un aspecto: sus ya maltrechas listas de espera sufrirán. Antes del envite del SARS-CoV-2, la región ya presentaba de los peores números de del país en demoras hospitalarias. "Ahora es peor. Lo es porque los hospitales estamos recuperando todo el volumen de operaciones no urgentes que no se pudieron hacer durante la pandemia por falta de espacio y recursos [unas 80.000 intervenciones]. Pero es que nadie piensa en las pruebas diagnósticas o las consultas de especialistas. Las esperas aquí son larguísimas: hay mucha demora", lamentan voces del sector de la sanidad concertada. Para paliarlo, piden que en el futuro se refuerce la atención primaria. "Algo tan sencillo como dotar a los ambulatorios de un ecógrafo nos ayudaría sobremanera", ilustran. Pero si los servicios cierran en verano y los médicos descansan, las listas de espera aumentarán.

Lo evidente, hasta el momento, es que las demoras hospitalarias no son una prioridad. La sanidad catalana ha aguantado a duras penas el impacto de la pandemia y ya se prepara para la previsible réplica de otoño. En el ínterin, apenas queda tiempo para debatir sobre cómo se gratifica a los sanitarios que bregaron contra la infección --ocho de ellos murieron y miles se contagiaron-- y asegurar recursos humanos y materiales para la próxima ola. De hecho, la paga extra de agosto para compensar a las plantillas de la red pública y concertada --no la privada, que se ha excluido del bonus-- está en la diana porque algunos colectivos han quedado fuera de la misma. Son las contratas de ambulancias y los teleoperadores del 061. Este canal fue el que primero colapsó con el coronavirus en febrero. Un rebrote, si lo hay, empezará también por esta plataforma.