Diez sindicatos convocan huelga en la sanidad el 25 y 26 de enero

Diez sindicatos han oficializado la convocatoria de huelga en la sanidad catalana los días 25 y 26 de enero. La protesta, que coincidirá con la movilización de médicos convocada por Metges de Catalunya, quiere detener el ICS, la sanidad concertada y privada, el 061 y la salud mental, entre otras redes asistenciales. 

En una nota, los convocantes han desgranado su memorial de agravios con los gestores sanitarios autonómicos, alertando de que "están agotados" tras la fase más dura de la pandemia del coronavirus. "Estamos hartos", señalan, alegando que es la "buena voluntad" de los profesionales lo que sostiene un sistema "ineficiente". 

Equiparación o internalización

Ante ello, las plataformas sociales desgranan hasta veinte demandas que el Govern debería abordar para encauzar el paro. Los sindicatos piden la equiparación entre los empleados del ICS y la sanidad concertada --la red Siscat--; la reducción de las cargas laborales o el fin de los contratos eventuales. 

Asimismo, exigen que se dedique el 25% del presupuesto del Departamento de Salud a la atención primaria --ahora mismo ronda el 14%-- o la internalización de servicios como el 061 CatSalut Respon, cuya gestión ha revalidado recientemente Ferrovial por medio de su participada Serveo o el reconocimiento del Covid-19 como una enfermedad laboral. 

Con la de médicos

Sea como fuere, la convocatoria coincidirá con la avanzada por Metges de Catalunya, mayoritario en la categoría profesional de facultativo. Con ello, se garantiza el impacto de la doble protesta en el sistema asistencial. 

Los galenos han convocado a los ejercientes a dejar sus puestos de trabajo por la situación de "sobrecarga, desprecio y precariedad" que aseguran que sufren. 

Salud quiere evitarla

En las últimas semanas, la Consejería de Salud, que comanda Manel Balcells (ERC), ha tratado de ofrecer medidas para evitar que la protesta paralice el sistema sanitario en tres semanas. 

Eso sí, no puede ahondar en esta senda porque el Govern aún carece de ley de presupuestos para 2023, por lo que la mayoría de partidas se comprometieron un año atrás.