Jordi Gil, jefe operativo de los ADF de Sabadell en al extinción de un incendio

Jordi Gil, jefe operativo de los ADF de Sabadell en al extinción de un incendio Archivo Archivo Barcelona

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Parlon ve un "nuevo paradigma de riesgo" por el incremento de incendios este verano

Durante la temporada estival se ha registrado un aumento del 62% de los fuegos, con un total de 2.168

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Este verano, los incendios han sido los grandes protagonistas. Ninguna comunidad autónoma se ha librado de ellos y Cataluña tampoco ha sido la excepción. La consellera de Interior y Seguridad Pública de la Generalitat, Núria Parlon, ha reconocido esta situación y ha advertido que nos encontramos ante un "nuevo paradigma riesgo".

Durante esta campaña estival, entre el 1 de junio y el 15 de septiembre, se han registrado 2.168 incendios, lo que supone un incremento del 62,6%. Los fuegos en Lleida y Tarragona concentran el 86,44% de la superficie quemada, con un total de 7.477 hectáreas afectadas. "El riesgo derivado de los fenómenos meteorológicos ya no son un horizonte, son una realidad", ha afirmado Parlon.

Así lo expresó este jueves en la presentación del balance de la campaña de 2025, donde también participaron mandos de otros cuerpos de emergencias como Bombers de la Generalitat, Agents Rurals, Protecció Civil y Mossos d'Esquadra. En este acto, la consellera subrayó que ha sido el segundo verano más cálido —después del de 2022—, lo que ha tenido un fuerte impacto en la propagación de los incendios.

Tarragona y Lleida

Parlon detalló tres episodios críticos de este verano: la simultaneidad de 98 fuegos entre el 21 y 22 de junio; el incendio de Torrefeta i Florejacs y Guissona (Lleida), que dejó 2 víctimas mortales a inicios de julio; y el de Paüls (Tarragona), donde falleció un bombero.

Ambos grandes incendios siguieron un patrón similar. En el caso del de Paüls, el fuego afectó a un entorno de "alto valor natural" como el Parc Natural dels Ports y llegó a acercarse a zonas habitadas, mientras que el de Torrefeta i Florejacs y Guissona se catalogó como un incendio de sexta generación, con un avance de hasta 24 km/h.

Buena coordinación

Pese a estos datos, la consellera aseguró que los cuerpos de emergencias de la Generalitat pudieron ofrecer una "buena respuesta operativa", gracias a la existencia de un mando único, a un cuerpo de bomberos profesionalizado y a la colaboración de las Agrupacions de Defensa Forestal (ADF) y de los Bombers Voluntaris, que —según Parlon— tuvieron un papel clave.

"Trabajar desde la coordinación y el plan de acción con todos los operativos es una buena garantía que, a pesar del contexto, nos permite tener una capacidad operativa robusta", explicó.

Mejoras de futuro

Aunque destacó el buen trabajo desarrollado durante esta campaña, Parlon reconoció que es necesario "mejorar la gestión forestal", una labor que ha vinculado a la Conselleria de Agricultura y que aseguró que ya se está considerando para hacer el territorio más resiliente ante episodios de fuego. Además, confía en la implicación del sector agrícola para ayudar a mejorar el terreno y crear así más cortafuegos.

La consellera señaló como reto de futuro el Pla Bombers 2030, que debe reforzar la preparación ante los incendios de sexta generación. Entre las medidas previstas, mencionó la creación de una nueva región de emergencias en el Pirineo, el desarrollo de un complejo central de bomberos, la aplicación de la Inteligencia Artificial (IA) para aumentar la eficacia de los operativos y el objetivo de alcanzar los 4.000 bomberos en plantilla.