Se buscan vecinos en este pueblo cerca de Barcelona: en plena naturaleza y con casas desde 57.000 euros

La despoblación es uno de los grandes retos a los que se enfrentan muchos municipios rurales de Cataluña. Durante las últimas décadas, el fenómeno de la migración hacia las grandes ciudades ha dejado pueblos con menos habitantes, un envejecimiento progresivo de la población y, en algunos casos, riesgo de desaparecer.

Para revertir esta tendencia, varias localidades se han sumado a los llamados municipios de acogida, una iniciativa que busca atraer nuevos vecinos ofreciendo oportunidades de vivienda asequible, calidad de vida y un entorno donde la naturaleza y la comunidad cobran un valor especial.

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Uno de estos pueblos es Sant Guim de Freixenet, situado en la comarca de la Segarra. Se encuentra a tan solo 15 minutos de Cervera y a 20 de Igualada, dos núcleos urbanos que concentran servicios y empleo, y a apenas una hora de Barcelona o Lleida gracias a su buena conexión por carretera y tren.

Esta ubicación estratégica lo convierte en un punto intermedio ideal para quienes desean residir en un entorno tranquilo sin renunciar a la cercanía de grandes ciudades.

El territorio municipal se levanta sobre una meseta con un clima continental: inviernos fríos, con medias de 3 °C, y veranos calurosos, aunque con noches frescas que permiten descansar. Esta geografía y su entorno natural lo convierten en un espacio atractivo para quienes valoran el contacto con la naturaleza y la vida en comunidad.

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Además, el municipio dispone de un polígono en desarrollo y varias empresas consolidadas que generan puestos de trabajo, lo que favorece que nuevas familias puedan establecerse sin necesidad de grandes desplazamientos diarios.

Oferta de servicios

En cuanto a servicios, Sant Guim de Freixenet sorprende por su amplia oferta comercial y social para ser una localidad pequeña. Cuenta con carnicerías, pescadería, supermercados, fruterías, panaderías, varias cafeterías, restaurantes y comercios de ropa o equipación para el hogar.

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También dispone de peluquerías, farmacia, gasolinera, entidad bancaria y otros servicios básicos que garantizan la autosuficiencia de los vecinos. A ello se suma un fuerte tejido asociativo, con numerosas agrupaciones culturales, deportivas y un local de jóvenes que dinamizan la vida social.

Para las familias, el pueblo ofrece escuela de primaria, hogar de niños y escuela de música, además de instalaciones deportivas como pabellón, campos de fútbol, pistas de pádel y piscina de verano. Estas infraestructuras convierten a la localidad en un entorno donde crecer con seguridad y disfrutar de un ocio variado sin salir del municipio.

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Vivienda y empleo

Uno de los principales atractivos es la accesibilidad a la vivienda. En el portal Idealista, por ejemplo, se anuncia un piso por tan solo 57.000 euros. Se trata de una vivienda de 103 m² distribuida en salón-comedor, cocina, tres dormitorios y dos baños.

Captura de pantalla de Idealista de la vivienda

Su diseño funcional y sus espacios luminosos lo hacen ideal para una familia que busque un hogar acogedor. Además, la estructura del edificio está en buen estado, garantizando estabilidad y seguridad. Esta oferta, difícil de encontrar en las grandes ciudades, representa una oportunidad para quienes deseen asentarse en un lugar tranquilo con un coste de vida mucho más bajo.

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En cuanto a salud, el pueblo dispone de un centro de atención primaria, mientras que el Hospital Comarcal de Mollerussa se encuentra a unos 40 minutos en coche para servicios especializados. El transporte público también está garantizado con líneas regulares de autobús hacia Lleida y poblaciones vecinas, además de la proximidad a la autovía A-2, que conecta de manera directa con Barcelona y Zaragoza.

El entorno de Sant Guim de Freixenet es perfecto para los amantes de la vida al aire libre. Su ubicación, rodeada de paisajes de meseta y campos agrícolas, lo hace idóneo para el turismo rural, excursiones y actividades de naturaleza.

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Pero más allá de su atractivo natural, lo que más destaca es la posibilidad real de trabajo en la zona. En Cervera, por ejemplo, hay ofertas activas para puestos como jefe de taller de maquinaria industrial o soldador, con salarios que oscilan entre los 25.000 y 32.000 euros anuales, lo que aporta estabilidad económica para quienes decidan mudarse.

Sant Guim de Freixenet no solo ofrece viviendas asequibles desde 57.000 euros, sino que también garantiza servicios, oportunidades laborales, cercanía con grandes ciudades y un estilo de vida sereno, en plena naturaleza. Un destino que busca vecinos para revitalizarse y que, a cambio, ofrece la posibilidad de construir un futuro en comunidad, con la tranquilidad de un pueblo y las comodidades de la ciudad a pocos minutos de distancia.