El caso de la niña del Hospital de Calella que casi muere desata una gran investigación contra Salud
El Síndic de Greuges actúa de oficio contra el CatSalut por los "retrasos" en las reclamaciones por errores médicos en Cataluña, que "ahorran pagos" a la Administración
18 noviembre, 2022 00:00El caso de una niña de cuatro años que casi muere tras un error de diagnóstico en las urgencias del Hospital de Calella ha derivado en una investigación a gran escala contra la Consejería de Salud. El Síndic de Greuges ha abierto pesquisas por los "retrasos" en las reclamaciones de pacientes y familiares de enfermos que denuncian mala praxis médica en Cataluña. Son dilaciones que terminan "evitando pagos", pues "pasa el tiempo y caducan los plazos", alertan los expertos.
Lo han explicado a este medio fuentes del sector, que han precisado que la oficina de la nueva síndica, Esther Giménez-Salinas, ha iniciado una "actuación de oficio" para examinar el problema "desde la perspectiva del derecho ciudadano". Lo que quiere saber el Síndic es por qué Salud demora la respuesta en las reclamaciones por errores médicos, causando un sufrimiento mayor a los afectados y sus familias y, también, "afectando a su derecho a obtener una resolución razonada y motivada en un plazo razonable".
"Gran número de quejas"
La investigación de la oficina de Giménez-Salinas, que ya ha arrancado con el requerimiento de información a la Administración, llega después de que se constate que "son numerosas las quejas" que se dirigen al Síndic por "retraso en la resolución de procedimientos de reclamación patrimonial por mala praxis asistencial".
¿A quién apunta el defensor del pueblo autonómico? Al CatSalut. Concretamente, a su área de valoraciones médicas que evalúa las quejas de pacientes en hospitales y Centros de Asistencia Primaria (CAP). De este modo, la investigación del Síndic abre un primer problema para el nuevo director de la aseguradora pública catalana, Ramon Canal, aunque en puridad el médico no es responsable por lo sucedido en Calella ni por la investigación más amplia que se ha abierto ahora. Pero tendrá que gestionar el escenario que se abre.
Una 'madre coraje'
Las pesquisas abiertas las conducirá el equipo de Giménez-Salinas. Pero, a decir verdad, arrancan por el trabajo de una madre que ha bregado para aclarar el caso de su pequeña y "que no vuelva a ocurrir". Mari Carmen Velasco es la familiar directa de una menor de cuatro años que casi fallece en octubre de 2021 tras ser dada de alta en el Hospital de Calella, donde no le detectaron una grave infección en el cuello que le ladeaba la cabeza. Pasó 15 días en la unidad de cuidados intensivos (uci) tras ser operada a vida o muerte en Sant Joan de Déu.
En conversación con este medio, Velasco recuerda que "quiere que se haga justicia". Por ello ha reclamado ante el CatSalut, donde aún no le han contestado. También al Síndic de Greuges, en diversas ocasiones, lo que ha terminado en la citada gran investigación por la gestión de los errores médicos. Y, con la ayuda de El Defensor del Paciente, acudió a la Fiscalía de área de Mataró, que ha abierto diligencias para determinar si el mal diagnóstico de la pequeña en Calella pudo ser delito.
Abogado experto: "Eluden la responsabilidad"
A preguntas de este medio, José Aznar, de Verdún Legal, uno de los abogados más veteranos en reclamaciones médicas en Cataluña, confirma que el CatSalut gestiona con extrema lentitud los escritos por posible mala praxis. "A veces llegan a tardar en responder entre cuatro y cinco años", explican. Ello es atribuible a "la falta de personal, porque lidian con una avalancha de casos, y a un interés por demorar los procedimientos".
Ese interés por retrasar los expedientes tiene un beneficio directo para la Administración. "Es una forma de eludir la responsabilidad, ya sea por la vía civil o penal, pues provoca que se prescriban los plazos", lamenta Aznar. El letrado alerta de que las demandas por errores médicos "tienen que sustanciarse dentro de un periodo concreto o cuando se acrediten las secuelas". Si ello no ocurre puede prescribir, pero es que hay otro beneficio. "En la jurisdicción contenciosa no hay intereses de demora, por lo que el tiempo juega a favor de la Administración. No es como la civil", ha apostillado.
Dada de alta en Calella; salvada en Sant Joan de Déu
Esa lentitud podría cambiar si Salud reacciona tras la investigación del Síndic. Las pesquisas se iniciaron tras la queja de Mari Carmen Velasco, que brega para que se aclare qué pasó con E., su hija de 4 años que fue dada de alta en el Hospital de Calella el 21 de octubre de 2021, donde acudió con fiebre alta, malestar general y el cuello muy ladeado, pero que fue enviada a casa pese a que un análisis de sangre "salió muy alterado". Horas después, el cuadro de la menor comenzó a empeorar. La familia la llevó por decisión propia al Hospital maternoinfantil de Sant Joan de Déu de Esplugues de Llobregat (Barcelona).
Allí, los médicos le detectaron un absceso retrofaríngeo, una infección en los ganglios del cuello que puede llegar a ser mortal. La operaron "a vida o muerte", hasta el punto de que su madre tuvo que despedirse de ella. La pequeña aguantó la intervención quirúrgica, pero tuvo que pasar 15 días en cuidados intensivos. Allí, en la uci, desarrolló una neumonía que casi acaba de nuevo con su vida. Finalmente se recuperó, aunque con algunas secuelas que ahora evalúa el Instituto Catalán de Evaluaciones Médicas (ICAM). La familia, a su vez, lamenta "duras consecuencias psicológicas" por el conato de tragedia.