El Hospital Sant Joan de Déu acerca a pacientes y familiares
Mediante videoconferencias en alta definición, los niños aislados pueden reunirse con sus seres queridos y participar en actividades lúdicas en remoto
14 febrero, 2022 18:44El Hospital Sant Joan de Déu de Barcelona ha puesto en marcha un programa para mejorar la comunicación por videoconferencias entre médicos, familiares y niños con tratamientos que requieren aislamiento.
Esta tecnología, implementada en colaboración con Cisco Webex, se ha desarrollado en el centro maternoinfantil desde marzo de 2020. Gracias a ella, los pacientes aislados por prescripción pueden participar en actividades lúdicas, revisiones y reuniones con sus seres queridos en remoto. El proyecto nació en el Centro de Innovación de Cisco en Barcelona y está financiado por Digitaliza, el programa de aceleración digital de Cisco para España.
Tecnología inclusiva
Mediante terminales de audio y vídeo en alta definición, los pacientes participan en eventos, sesiones con profesionales y actos lúdicos para hacer más amigable su estancia en el hospital, especialmente para aquellos niños que permanecen ingresados durante largas temporadas. Del mismo modo, los familiares reciben información periódica a través de videoconferencias con los profesionales sanitarios.
Durante los casi dos años que lleva en marcha el proyecto, se han celebrado más de 300 videoconferencias (más de 3.200 minutos de vídeo y una media de 10 minutos por llamada), así como sesiones de entretenimiento para los pacientes aislados que están luchando contra el cáncer u otras enfermedades graves.
Digitalización contra las desigualdades
Desde Cisco aseguran estar comprometidos con Barcelona y sus instituciones, así como con “el papel tan relevante de la atención pediátrica en un momento preocupante por la ocupación de camas uci en los hospitales como consecuencia de la pandemia”, ha asegurado Pastora Valero, Vicepresidenta Senior de Asuntos Gubernamentales y Políticas en Cisco EMEAR.
Desde la compañía también han querido resaltar la “necesidad urgente de colaborar entre proveedores y administraciones” para que la transformación digital consiga eliminar las desigualdades y mejorar la calidad de vida de las personas.