El pantano de Sau, en plena sequía / DAVID BORRAT - EFE

El pantano de Sau, en plena sequía / DAVID BORRAT - EFE

Vida

La sequía se agrava en Cataluña y declaran la alerta en otros 129 municipios

Un total de 279 localidades y más de 638.000 personas ya están afectadas por restricciones debido a la escasez de agua

26 agosto, 2022 13:36

La sequía se agrava en Cataluña. La Agencia Catalana del Agua (ACA) ha declarado este viernes la alerta hidrológica en otros 129 municipios en las comarcas del Empordà, Banyoles, la cordillera Transversal (Girona), y Prades-Llaberia (Tarragona). Ya son 279 las localidades catalanas --y más de 683.000 personas-- las que se han visto afectadas por restricciones debido a la escasez de agua de los últimos meses.

La declaración de la alerta hidrológica implica reducciones en los usos de agua agrícolas, industriales y otros usos recreativos. En cuanto al uso doméstico, se establecen limitaciones como limitar el riego de jardines y zonas verdes, prohibir el llenado de fuentes ornamentales y la limpieza de calles con agua de red, limitar el llenado de piscinas y la limpieza de vehículos, entre otras cosas.

Las desalinizadoras intensifican su trabajo

El volumen de agua en los embalses de las cuencas internas catalanas sigue bajando de forma peligrosa y las reservas ya han descendido al 39% de su capacidad. Esta situación ha obligado a las desalinizadoras catalanas a intensificar su trabajo, que ha incrementado hasta el 90%. 

De acuerdo con la ACA, en siete meses han aportado más de 38 hectómetros cúbicos al sistema. Sin su aportación, los embalses catalanas estarían seis puntos por debajo de si nivel actual.

Las tormentas veraniegas, insuficientes

Los meteorólogos ya han alertado de que las lluvias torrenciales registradas este verano son “insuficientes” para paliar la sequía que azota a Cataluña y a la península ibérica en general. Las lluvias que trajo el frente atlántico a la región esta última semana refrescaron el ambiente, pero apenas tuvieron impacto en las reservas de agua en la región. 

No obstante, sí que han reducido la tendencia descendente y sobre todo la velocidad del descenso y han permitido desembalsar menos agua y alargar las reservas, ha asegurado la ACA.