No hace falta apostar por las grandes ciudades para comer bien. Sólo hace falta ver donde están las estrellas Michelin más reconocidas de Cataluña: Girona, Sant Pol de Mar o la Cala Montjoi han dado una cocina increíble con unos chefs que elevaron la gastronomía catalana a otro nivel.
Hoy queremos centrarnos en una zona que está a una hora de Barcelona que concentra los mejores dulces de toda Cataluña. Un lugar conocido por su mercado medieval, su esencia catalana y la reconocible plaza mayor de su capital, Vic.
Dónde está
Osona ha desarrollado una oferta gastronómica que atrae a los amantes de los dulces y del buen comer. Aquí, en un radio de poco más de 20 kilómetros, varios artesanos han ganado una excelente reputación y reconocimientos por sus elaboraciones en sus obradores, convirtiendo a esta región en un paraíso para los golosos.
Nuestra ruta comienza precisamente en la capital de la comarca, Vic. Allí, cuatro premiados pasteleros, panaderos y el mejor chocolatero del mundo tienen sus propios establecimientos que conquistas a los más dulzones.
El mejor chocolatero
Nuestra primera parada es con Lluc Crusellas, quien en octubre de 2022 fue nombrado Mejor Chocolatero del Mundo en los World Chocolate Masters (WCM) celebrados en París. Fue el candidato más joven --26 años-- y el primer español en conseguir este título. Su Eukarya se ha popularizado tanto que gente de medio mundo se acerca hasta allí para degustar sus creaciones chocolateras como las habas de cacao cultivadas en Perú, Papúa Nueva Guinea y Ecuador servidas en peculiares esferas, tabletas y múltiples formas.
Desde entonces, su fama ha ido a más. El mismo hotel Ritz de Madrid ha incorporado sus bombones y creaciones a su carta para la hora del té. Lo llaman desde todas las partes del mundo y, en cambio, ofrece productos a precios muy asequibles, como la exclusiva mona de Pascua que vendía por menos de 30 euros este 2024.
El mejor croissant artesanal
A menos de 8 km de allí, se encuentra Roda de Ter, donde el pastelero Gil Prat Parcet prepara el mejor croissant artesanal de mantequilla de España. Así quedó acreditado en el concurso convocado por el Gremi de Pastisseria de Barcelona en 2017. Pero también en 2023, que se alzó de nuevo con este reconocimiento.
La pastelería familiar Prat Can Carriel, con más de un siglo de historia, ha sido testigo de la dedicación de cuatro generaciones. Gil, que desde pequeño ayudaba a decorar monas de Pascua, ha elevado el nivel de los croissants a una excelencia espectacular. Además, las recetas tradicionales de melindros, carquinyolis y otros dulces han consolidado la fama de este negocio pastelero.
La mejor rebanada de pan
Desde Roda de Ter, nos dirigimos a Torelló, donde el panadero y pastelero Miquel Saborit, de la tercera generación del Horno de Pan Saborit, ha sido reconocido con el premio a Mejor Joven Artesano Alimentario de Cataluña y La Llesca d’Or. Sus panes y panetones, elaborados con ingredientes de alta calidad y técnicas artesanales, son una delicia.
En su establecimiento, Méskpa, se pueden degustar y comprar sus famosas cocas, croissants de chocolate y otras elaboraciones tradicionales. Miquel Saborit destaca por su compromiso con la calidad y su dedicación a la tradición familiar, que se remonta a 1941.
Más chocolate
No hace falta salir de este municipio para encontrar otro gran maestro chocolatero. De hecho, uno de los reconocidos con el título del Mejor Maestro Artesano Chocolatero Artesanal de España, Torelló también es el hogar de Pol Marginedas.
Este artesano catalán, que empezó su carrera en la prestigiosa pastelería Hofmann y ha realizado stages en la Chocolate Academy de Vic, se ha hecho con su propio negocio. Su talento y dedicación han sido reconocidos tanto en España como en el extranjero.